The Last | Narusasu

Capítulo 6. Confianza

—Imagínate, Toneri está escondido en el sol artificial —dijo Shikamaru.

—¿Y por qué no pudo detectarlo el Byakugan de Hinata o por qué Sasuke, quien tiene el sharingan tampoco pudo verlo? —preguntó Sai.

—Tal vez usó un jutsu en su luna artificial que evita tanto el Byakugan, como que hace que a Sasuke le duela la cabeza al activar el Sharingan y tampoco pueda disipar el genjutsu.

—¿Y dónde estará la entrada? —preguntó Sai.

—¿Por qué no le preguntamos? —Shikamaru lanzó un kunai con explosivo que cayó en la luna artificial.

Las alarmas se activaron en el castillo de Toneri y las marionetas salieron a atacar.

—¿Qué hiciste? —Sai ahora estaba exaltado—. Alertaste al enemigo.

El ataqué había comenzado y mientras ellos esquivaban, Shikamaru tenía una sonrisa en el rostro.

—Tú espera —dijo el Nara.

—¿Cuál es tu plan?

—Ya te explicaré.

Por el lateral de aquella luna, se abrió un hueco que dejaba salir a más marionetas para continuar atacando, Shikamaru sonrió al descubrir cómo abrían esa esfera.

—Perfecto —miró a Sai—. Debemos retroceder.

Ambos dieron la media vuelta en las aves y Sai hizo una bestia más grande para que ambos pudieran escapar y que las marionetas no los alcanzaran.

En la tierra, el Raikage estaba preparado para acabar con la luna y destruirla por completo, harían lo que fuera con tal de que todos en el planeta tierra estén bien.

[🌙]

Sasuke suspiró al ver todos los alimentos que había en aquella enorme mesa, las marionetas servían la comida para cada uno. El comedor era muy largo y estaban uno frente del otro.

—Los alimentos saben mucho mejor cuando tienes compañía —dijo Toneri mientras partía su carne—. Ahora, por favor, dime todo acerca de ti.

—¿Sabes? Aún estás a tiempo para poder negociar con los Shinobi de la tierra —dijo mientras observaba la comida.

—¿Qué?

—Tienes razón, por mucho tiempo el Shinobi de la tierra continuó usando el chakra para pelear con los demás, pero ahora es diferente. Los shinobis se han unido para trabajar mano a mano para proteger la paz que hemos ganado. Entonces...

—Ellos iniciarán otra guerra, el mundo de Hagoromo debe ser destruido.

—Pero...

—¡Nunca vuelvas a tocar ese tema! —azotó la copa contra la mesa—. Guarda silencio y come.

Sasuke tuvo que respirar profundo para no lanzarle el plato de comida a la cara a ese Otsutsuki. Ya no estaba aguantando, él no funcionaba para ser sumiso ante alguien, pero debía seguir intentando, así que, obedeció y empezó a comer, hasta que apareció una isla completamente de piedra frente a la gran ventana del comedor.

—¿Y esa isla? —preguntó Sasuke.

—Ha vuelto a aparecer —dijo Toneri con una sonrisa—, ese es el templo de Hamura. Cada año, durante el festival del renacimiento se acerca al castillo.

Sasuke había buscado hasta el cansancio de donde provenía la fuente de aquel chakra tan intenso, y cuando Toneri mencionó que ese era el templo de Hamura, se le ocurrió que tal vez de ahí podía provenir.