Capítulo 8. Sol y Luna

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Naruto y Sasuke salieron corriendo del castillo, Shikamaru ya estaba fuera.

—Sasuke —se sorprendió al verlo vestido como novio—. ¿Están bien?

—Si —respondió Sasuke. Soltó un suspiro—. Quiero disculparme por esto.

—Dejálo para después —Shikamaru sonrió con levedad—. Confíamos en ti. Solo díganme, ¿Qué pasó? El sol artificial desapareció.

—El Tenseigan era la fuente de poder de este lugar, lo destruimos. La luna ya debe haberse detenido.

—¿Qué? —Shikamaru revisó su mano. Era cierto, se había detenido.

Llegaron Sakura, Hinata y Sai, traían consigo a Hanabi. Sasuke sonrió, a pesar de todo, Hinata ya estaba con su hermana. Sakura le extendió a Sasuke un pedazo de bufanda.

—Esto es tuyo, ¿Cierto?

Sasuke asintió y la tomó en sus manos. Bajó la mirada y miró a Naruto.

—¿Tejes? —pregunfó Naruto.

—¿Cómo lo sabes? —preguntó Sasuke.

—Cuando te saqué del genjutsu vi algunos de tus recuerdos. No tienes porque reparar algo que tú no rompiste.

—Tenías planeado dársela a Naruto, ¿No? —preguntó Sakura.

Sasuke asintió.

—Sé que no se puede reemplazar la que fue hecha por tu madre, Naruto —dijo Sasuke—, pero quise intentar repararlo de todos modos... Al menos, una de las tantas cosas que tengo que componer. Sé cuánto querías esto y...

—Entonces, ¿Puedo tenerla?

—Pero... está hecha un desastre, Usuratonkachi.

—¿Y qué? No me importa, porque realmente quiero tenerla —con su dedo medio, Naruto pasó el mechón de cabello negro detrás de la oreja de Sasuke, dejó expuestos ambos ojos. Su cabello ya comenzaba a crecer más.

Sasuke se sonrojó. Le dio a Naruto el pedazo de bufanda que tenía en sus manos.

—Te lo agradezco mucho, la valoraré por siempre.

Sasuke volteó la mirada, no quería que nadie lo viera llorar.

—Naruto...

El rubio tomó la mano contraria.

Sakura y Hinata sonrieron enternecidas. Shikamaru negó con su cabeza por ese par de tórtolos, pasó la mano por su cabello, pero alcanzó a ver el reloj de la palma y se asustó.

—¿Qué pasa? —preguntó Sai.

—Es el reloj, se está moviendo de nuevo.

Era imposible, habían destrozado en Tenseigan.

Toneri iba a destruir todo y a todos, nada lo iba a detener.

[☄️]

—¡Pero es una locura explotar la luna! —exclamó la mujer al lado de Kakashi.

—Mientras la luna siga amenazando al planeta tierra como una bala de cañón, nunca estaremos verdaderamente fuera de peligro —dijo A.

—Por favor, discutamos tranquilamente la situación —dijo Kakashi—. De momento la luna detuvo su avance.

—Te equivocas —dijo Onouki—. Comenzó a moverse de nuevo.

Kakashi no lo entendía, ¿Cómo era posible?

[🌙☀️]

—No lo entiendo —dijo Naruto— ¿Cómo pudo avanzar el reloj otra vez?

The Last | NarusasuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora