Freen podía ver la espalda curveada de Becky entre sus grandes palmas. La cintura marcada y las nalgas encontrándose con su pelvis.
Gruñó excitada por la imagen en sus pupilas.
—iMás! ¡Ah! ¡Sarocha! —La omega debajo de ella se retorcía por su toque, por sus embistes.
Se inclino dejando que su pecho tocará la espalda, sintiendo de pronto el cuerpo caliente y sudado. Beso el cuello, mordió sus orejas y succiono en la pequeña glándula omega donde se supone iría la mordida.
Rebecca lloriqueo. Queria ser marcada.
Gracias a Dios, Freen aún guardaba algo de racionalidad.
—Freen... —Susurro la alfa en el oído izquierdo del castaña-, llamame Freen.
Becky jadeo cuando el pene de Freen entró de nuevo a su cuerpo. Entrar y salir, su mente sólo se enfocaba en el golpe de sus cuerpos.
—iFreeeen! —Tony trató de pegar más su trasero a la pelvis del rubio— iMás! iFreen!
La alfa sentía que su pene era succionado por la entrada de Becky . Dios.
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La tailandesa despertó con una gran ereccion en los pantalones. Abatida, se dejó caer de nuevo en el colchón.
Llevo ambas palmas a su cara y trato de olvidar el sueño; no, no era un sueño, era un recuerdo. O
—Me voy a volver loca. —Susurró en medio de su agitada respiración.
Miró el reloj a su derecha. Eran las 3:00 a.m.
Buena hora para una ducha fría.
Cada escalón qué bajaba parecía regresarlo a la realidad. Sarocha suspiro cuando llegó a la cocina; necesitaba un gran vaso de agua, unos cuantos minutos y con suerte, volvería a retomar su sueño.
—¿Rebecca? —La castaña miró sorprendida a la británica en la barra de la cocina. Tenía un vaso vacío en la mano derecha.
Sus ojos captaron una pequeña mueca de nervios, pero como siempre, becky era muy escondiendo sus emociones.
—Bec —Saludo dejando el vaso en el fregadero
-. Hola y adiós.
—Espera, Rebecca. Sarocha camino hasta la inglesa impidiendo que esta escapara—. Quiero preguntarte algo.
La omega espero en su lugar, sin la intención de acercarse a la castaña . Freen lo noto.
—¿Estás bien? —Preguntó finalmente la tailandesa.
—. Estos últimos días te he notado más cansada y... —Sarocha paró. ¿Cómo explicaría que estaba al pendiente de su aroma sin que esto se mal interpretará? -, has estado extraña.
Becky la miró alarmada, para después simplemente evitar su mirada y poner una sonrisa burda en sus labios.
—No es nada. —Rebecca se encogió de hombros
—. He tenido más trabajo de lo normal, Nam destruyó de nuevo el jardín y Heng no deja de acabarse la alacena. Es normal que este algo estresada. Solamente eso.
Freen se sintió culpable por ello.
—Bec, creo que deberías...
—Hasta mañana, Sarocha. —
Becky huyó del lugar dejando sola a Sarocha con miles de pensamientos.
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Al día siguiente, mientras todos se preparaban para salir a lo que irin le llamó un día de picnic, Freen no podía apartar su mirada de Becky.
Su aroma había cambiado ligeramente. Su olfato no lo engañaba. La tailandesa trato de descifrar la causa, pero a diferencia de una persona enferma, Becky tenía un aroma más dulzón, así, descartando un malestar grave.
Algo en su mente la mantenía alerta. No era peligroso, pero su alfa interno queria vigilar a la omega cada minuto que pasaba.
-Freen. —La voz de Nam la sacó de sus posesivos pensamientos—. Salimos en 5.
—Bien. —Sarocha se obligó a poner atención.
Era uno de sus pocos días libres y no podría desperdiciarlo en pensamientos sin sentido.
Entre risas y bromas pesadas, llegaron al gran parque del centro de Tailandia. Era bonito, bastante tranquilo gracias a la cantidad de niños que preferían el celular que salir a jugar al aire libre.
—Bien, comamos los sagrados alimentos. — Heng ya babeaba por los platillos—. Estoy agradecido con la gran amiga Irin por pensar en esta bonita forma de convivencia.
—Si como no. —Becky se sentó a un lado de Thor y sacó lo que traían en la canasta —. Lo único que te interesa es la comida gratis.
Freen miró la pequeña discusión que tenía la omega con el alfa y Sentía su estómago retorcerse.
—Freen —La alfa pelirroja lo miró fijamente—
¿Estás bien?
Sarocha asintió ausente. Seguía muy ocupada descubriendo que es lo que le pasaba.
La comida continuó con un ambiente relajado.
Freen sonrió al ver la gran sonrisa de Becky.
—Iré por algo que tomar. —La castaño se levantó del lugar. Estaba sedienta.
Freen inmediamente se levantó para ir con la omega con la tonta excusa de estirar las piernas.
—¿Quieres que te ayude con las bebidas? -
Preguntó al llegar al lado de la inglesa.
—¿Desde cuando eres tan amable? —Rebecca la miró recelosa—. Que yo recuerde no eramos amigas.
Freen ignoro el comentario. Ni siquiera ella lo entendía.
Cuando pidieron las bebidas de todos, Freen noto como Becky se tambaleaba ligeramente.
—¿Bec? —La alfa la miro con preocupación—
¿Te sientes bien?
—Si. —Rebecca aspiro para continuar.
Lamentablemente, no dio más de tres pasos cuando su cuerpo se desvaneció.
—iRebecca! —Freen dejó caer las bebidas y tomó el cuerpo inconciente de la omega — iBecky!
iArmstrong!... iBecky!
Tenía que llevarla al hospital.
