El doctor las miraba con detenimiento. Becky comenzaba a sentirse incomoda después de tanto tiempo de observación.
—Doctor, ¿está todo bien? —Sarocha, dándose cuenta de la incomodidad de la omega, preguntó.
-... Bueno... —El doctor no contestó en seguida.
Pensó en sus palabras despertando la curiosidad de Freen y Becky—, no quisiera ser entrometido, pero... ¿Cuándo planean enlazarse?
—No planeamos enlazarnos. —Becky se cruzó de brazos y miró a Freen buscando su apoyo, sin embargo, la tailandesa ignoro su mirada para después interrogar al doctor.
—¿Por qué lo pregunta? —La tailandesa no pudo evitar los nervios.
—Señora Armstrog, Señora Sarocha, tienen que saber que la marca es muy importante en un embarazo.
—El doctor los miró seriamente-.Una omega sin marca, en el mejor de los casos, puede tener un embarazo muy delicado. —El beta suspiro—. Aunque no lo crean, la mayoría de las omegas que pierden a sus cachorros es por no tener la marca de su alfa.
-¿Qué? —Becky, esta vez, comenzaba a espantarse.
—Señora Armstrong, la marca no es simplemente un lazo que las une con otra persona. El enlazarse con otra persona significa ser uno mismo. El bebé necesita de ambas madres para poder crecer sin problema alguno, en este caso, su cuerpo necesita de la alfa que la preño. —El doctor parecio pensarlo—.
Escuche, es algo que la naturaleza así decidió, lamentablemente, cuando omegas son violadas, normalmente pierden el bebé porque llevar un embarazo solo es complicado. El cuerpo de una omega marcada está mejor capacitado para tener las crías necesarias; es decir, la mordida de una Alfa modifica su sistema para poder tener descendencia, descendencia fuerte y saludable.
Una omega sin marca no está preparada para que su matriz soporte un embarazo.
Freen y Becky se miraron por inercia.
—Eso quiere decir que... -Rebecca se tocó el vientre—, mi cachorro podría...
—Lamento decir que si. —El doctor miró los gestos angustiados—. De igual manera, haré todo lo que este en mis manos para evitar que pase algo como eso. Sino planean enlazarse, buscaremos la manera de que su cachorro nazca, señora Armstrong.
—¿Y eso es una garantía? —Molesta, Becky se levantó de su lugar—. Puedo abortar a mi bebé, eso es lo que me está diciendo, y no sólo eso, sino que las probabilidades son mayores.
—Señora Armstrong...
—No me basta con que intente. —Rebecca suspiro—. Gracias, Doc.
Becky salió del lugar escuchando los gritos del doctor. Abrazo su vientre reusandose a creer las posibilidades.
Su bebé podía... No, negó ante la idea. Ella no iba a perder a su bebé.
—Becky. —Una mano grande y callosa tocó su hombro—. ¿Te sientes bien?— Rebecca volteo a verla. Los ojos de Freen desprendían miedo y preocupación.
Ambas pensaban en lo mismo y tenían pánico por la misma situación.
—Hay que enlazarnos. —Dijo la Omega sin ninguna duda.
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Freen dejó su sudadera en la cama, cuando la puerta de su habitación se abrió, suspiro al ver a Becky.
—¿Y bien? — La castaña se cruzó de brazos—
¿Cuándo vamos a enlazarnos?
—Becky, estoy cansada. De verdad quiero dormir.
—No me voy a ir hasta que me des una respuesta.
—La omega se paro enfrente—. Y más te vale que sea positiva.
Sarocha la miro con seriedad.
—¿De verdad quieres que nos enlacemos? — Freen se levantó y dejó que los centímetros de diferencia resaltará entre ella y Becky— ¿Aunque eso signifique estar conmigo toda tu vida?—
Rebecca no retrocedió. Las dos se miraban fijamente.
—¿Es tan malo estar conmigo toda una vida?
—No lo sé, pero según entiendo, me odias lo suficiente como para dormir en la misma cama que yo. —Reto Freen.
—Eso no es verdad. —Becky no dio su brazo a torcer—. Es sólo que me incómoda dormir acompañada.
—¿Por qué? ¿Por tus constantes pesadillas? — Freen no la miró con lástima ni con burla. Había comprensión en sus ojos.
—¿Cómo lo...?
—Eso es lo de menos. —La pelinegra evadió el tema
-. Si nos enlazamos, serás complemente mía.
—Estoy consciente de eso. —Becky la miró con una ceja arriba—. Al igual que tú serás mía.
La tailandesa se cruzó de brazos.
—No quiero tener un enlace vacío.
—Perfecto, pídeme lo que sea y lo haré. -
Acepto Rebecca.
Sarocha lo pensó por algunos instantes.
—Bien, en el momento en que nos enlacemos...
—Freen se acercó a la inglesa—, serás mi pareja.
Nada de fingir; no quiero que actuemos distantes, serás mi omega y yo tu alfa.
Dormiremos juntas, nos bañaremos juntas, quiero tener citas contigo, te daré el beso de las buenas noches, de los buenos días, quiero tomarte de la mano cuando yo quiera, quiero prepararte el desayuno, quiero que se lo digamos a todos, y Becky —La alfa suspiro-, quiero que me ames.
La castaña estaba paralizada. No sabía que contestar.
—Piénsalo seriamente, becky. —La Pelinegra alzó su mano con la intención de acariciar su mejilla izquierda, pero se detuvo-. No me conformare con menos. Lo quiero todo.
