SLYTHERIN BOYS |
Slytherin Boys React, o probablemente no lo son como tal.
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Diciembre 2023/
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Una pequeña flama iluminando en lo alto del armario.
Un corazón latiendo con euforia, otro latiendo con frustración.
—¿Cuánto llevamos? —La pregunta ansiosa que salió con cierto desdén.
—Treinta segundos—, su respuesta seca.
El ruido de la fiesta afuera se escuchaba de manera amortiguada, silencio, hasta que un golpe violento los hizo pegar un brinco.
—¡Un minuto y no escucho sonidos de placer! —Una voz burlona, Theodore Nott.
Draco bufó con fastidio, ella contuvo el aliento sintiendo el rostro ardiendo.
—Creo que si no te gustan esta clase de juegos no deberías de participar—, reclamó, Draco se inclinó en dirección a su rostro.
—¿Y qué te hace pensar que no me gustan esta clase de juegos? ¿Eh? —Sus ojos grises se entrecerraron, una oleada nueva de calor la golpeó.
—No pareces querer hacer algo al respecto—, soltó, ladeando la cabeza con cierta vergüenza—. Lamento que la suerte te haya traído aquí conmigo, sé lo desesperado que estabas porque fuera Astoria la que estuviera aquí...
Sus palabras se perdieron, Draco la miraba como un dragón a punto de atacar, ojos brillantes y fijos, una sonrisa seductora, su cuerpo acercándose al suyo; desprendiendo un calor infernal que hizo que la piel se le pusiera de gallina.
—Malfoy—, le advirtió con la voz temblorosa, una de sus manos se posó en su cintura y la otra emprendió viaje debajo de su vestido.
—Ajá, te estoy escuchando—, caricias ardientes en la parte interna de su muslo, sus piernas se cerraron una contra otra, capturando su mano—. Hum...
—No creo que...
—Estabas hablando acerca de lo mucho, según tú, de que deseaba que Astoria estuviera en tu lugar—susurró, pegando su pecho contra el de ella, mientras movía la mano entre sus piernas, incitándola a abrirlas—. Probablemente a ella le encantaría estar aquí, teniendo mi mano entre sus piernas.
Poco a poco fue escalando hasta topar contra su creciente humedad, mordió sus labios evitando un jadeo.
Draco elevó una ceja, una sonrisa perversa. La punta de sus dedos haciendo a un lado su ropa interior, un leve rose, ella jadeó.
—Hummm sí, puede que escucharas por ahí que hablaba de Astoria—, sus labios susurraron sobre uno de sus descubiertos oídos, ella volvió a jadear—. Pero el que está detrás de ella es Berkshire.
Un dedo se deslizó dentro de ella, sus ojos se cerraron con placer.
—Yo en lo particular—, otro dedo dentro, su cabeza se echó hacia atrás a la vez que el jadeo se convertía en gemido—. Yo voy detrás de la miel, ¿lo captas?
