Compass [JJ Maybank X Fem OC]

04.

JJ

Me desperté y me quedé mirando a Baby. Era preciosa. Los rizos le caían por la cara y ella estaba tan tranquila. Parecía que estaba en paz, cosa que yo nunca conseguí tener en mi vida hasta que la conocí. Aún lo recuerdo. John B, ella y yo teníamos unos siete u ocho años y nos pusieron juntos en un trabajo escolar.

Aquella fue la primera vez que realmente interactué con Gigi. Al principio, éramos solo compañeros de clase, pero a medida que trabajábamos juntos, descubrí que había algo especial en ella. Su risa contagiosa y su energía positiva iluminaban cualquier habitación en la que entraba. A medida que pasaba el tiempo, nuestra amistad se fortaleció y nos convertimos en inseparables.

Recuerdo el primer día que te vi, hace ya una década. Éramos tan jóvenes, tan inocentes, sin saber que el destino estaba trazando un camino que nos llevaría a este preciso instante. Tengo grabado en mi memoria todos los momentos que hemos compartido juntos, las risas, las lágrimas y las miradas cómplices.

Hará un par de años cuando me di cuenta de que mis sentimientos hacia Baby iban más allá de la amistad. Cada vez que la veía, mi corazón se aceleraba y mi mente se llenaba de pensamientos confusos. Me encontraba constantemente buscando su aprobación y queriendo ser alguien en quien ella pudiera confiar.

No podía dejar de pensar en ella. Ella era lo único que le daba sentido a mi vida y ella era lo único que me permitía seguir viviendo. Porque esa era Gigi, la luz que me dice que lo siga intentando, que no me rinda y siga poniendo un pie delante del otro. Es la que me dice que mi corazón tiene que seguir latiendo.

Le quité un mechón de pelo de la cara y ella se abrazó a mí. Susurró algo parecido a "duérmete, todavía es pronto" y volvió a cerrar los ojos. Pasé un brazo por sus hombros y me aseguré de que estuviese total y completamente dormida y no pudiese escucharme.

-Desde que tengo memoria, mi cabeza siempre parece volver a ti. No sabes cuánto significas para mí y cómo te has convertido en el sol de mi vida. Me gustas Baby, me encantas. Me gustas tanto que me da miedo. Me da miedo porque puedes irte con alguien mucho mejor que yo. Me da miedo porque creo que nunca podrás dejar de gustarme. Y me da miedo, sobre todo porque sé que no sientes lo mismo.- reí un poco.- Siempre dices que las mentes más brillantes ni siquiera pueden explicar el amor. Yo sí que puedo. Amor es lo que siento cada vez que te despiertas y me sonríes. Amor es lo que siento cada vez que me llevas la contraria. Amor es lo que siento cuando me miras, me abrazas, me das un beso en la mejilla o simplemente cuando estás a mi lado.- me froté la cara.- Eso es amor, Gigi. Joder, no puedo creer que esté aquí, a tu lado, mientras mi corazón late tan rápido que temo que puedas escucharlo. Es ridículo, ¿verdad? Cómo una simple sonrisa tuya puede hacerme sentir como si estuviera flotando en el aire. Cómo cada palabra que dices me deja sin aliento y mantengo mi respiración solo para escucharte hablar un poco más. A veces me gustaría poder decirte todo esto en voz alta, pero algo me detiene. La idea de que si te lo dijera, podría arruinar nuestra amistad. No puedo arriesgarme a perder lo que tenemos, pero tampoco puedo dejar de preguntarme si algo más podría existir entre nosotros. ¿Y si ese "algo más" podría ser incluso mejor que lo que ya tenemos? No puedo explicar todo el amor que siento por ti, ni las noches en vela que he pasado soñando despierto contigo. Pero lo que quiero que sepas, aunque nunca pueda decírtelo, es que mi amor por ti es palpable, intenso y eterno. Y mientras siga a tu lado, incluso en silencio, encontraré alguna forma de sentirme completo.- suspiré pesadamente. Acababa de darle el discurso de mi vida a una chica que ni siquiera podía oírme. Gigi se movió bajo mi brazo.

-¿JJ? ¿De qué iba todo eso de qué estás enamorado de mí?- mierda.