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Narrador

-¿Sucede algo pequeña?- ¿Si me pasaba algo? No, para nada, el hecho de que ahora existan los zombies no me causa temor, para nada- Soy tu padre, cuéntame - empezó a peinar mi cabello y a hacerme una colita mal hecha.  Yo estaba recostada, mi cabeza encima de sus piernas.

-¿Cuánto falta para que el tío Merle llegue?- pregunte mientras miraba mis pasadores.

-Llegara pronto solo fue a una farmacia cercana, ya sabes, a traer unas pastillas para tu madre y un par de inhaladores para ti -asentí -¿y ya me vas a decir que te sucede?Hasta yo me he dado cuenta que has estado algo distante -.susurro el cazador.

-Quiero que todo esto acabe - tape mi cara con mis manos, estaba apunto de llorar. Había visto como esas cosas se comían a mi abuelo, como devoraban cada parte de el, cuando la sangre chorreaba por el piso y aquellos monstruos venían a mi. Empezé a sollozar inconscientemente.

Abraze a mi padre con fuerzas. Empece a llorar no era la primera ves que lo hacía enfrente de el, mientras que la simplemente me susurraba un "shhh" "las cosas mejorarán" "no dejaré que te pase nada, ni a ti ni a tu madre".

-Tengo miedo de perderte, Papá -

-No lo harás. Papi Dixon siempre estará a tu lado- reí - La misma sonrisa de tu madre chiquitina, te adoro. Ya es hora de dormir. - asentí mientras nos dirijamos a la habitación junto a mamá.

-Hola, mi amor ¿Ya estás mejor?- sonreí viendo a mamá. Cada día se veía más pálida y ojerosa.

-Si, mami. Tengo mucho sueño. Hay que dormir de una vez- dije mientras me arropaba junto a ella. Ella me dio uno de sus besos que tanto amaba y papá nos dio un beso a ambas.

-Los dos amores de mi vida - dijo sonriente. Ni pude evitar sonreír.

Me quedé dormida abrazando a mamá.

(....)

Me levanté temprano. Mamá seguía durmiendo junto a mi padre es raro que ninguno de los dos esté haciendo guardia.

Baje cuidadosamente las escaleras, no quería despertar a nadie. Vi a Merle tirado en el sofá, rodé los ojos se supone que haría guardia a el cuando duerme no hay nadie que pueda despertarlo.

Fijé mi vista hacia la mesa de la cocina, ahí estaba mi arco algo en mi me incito a que lo tomara y lo hice.

¿Y si salía a dar una vuelta por el bosque? Total si se me cruza alguna de esas cosas sería igual que cazar alguna ardilla u algo, ¿Verdad? Pues si es que no, ya es muy tarde, ya estoy afuera.

Regresaré rápido antes de que amanezca por completo- pensé .

la zona se veía despejada y segura, como si nada hubiera pasado ¿Y si se acabó? -penso ingenuamente.

Camine unos metros por el bosque, tratando de buscar alguna ardilla u algo para que no me griten tanto cuando regrese por que si me darán una buena gritada.

Empezé a seguir las huellas, todo indicaba que era un ciervo. Sonreí . Termine alejándome un poco de la cabaña e ahí sentí el verdadero miedo .

El silencio.

El profundo silencio que había en el ambiente
, se escuchaban solo un par de gruñidos a los lejos, apreté mi arco el cual estaba listo para disparar.

Me arrepenti de haber salido, por suerte era buena orientándome y llegaría rápido.

Empezé a caminar lo más rápido posible , pero algo me detuvo. Mi dije se había enganchado en un árbol -idiota , me maldije por dentro - intenté sacarla pero se había enganchado junto a unos mechones de mi cabello, esto era horrendo . Forcejie un poco más, nada.

Los gruñidos se empezaron a escuchar más fuertes, apreté los puños. Era una niña bastante miedosa esas cosas me aterraban y no lo negaría. Mordí mi labio inferior, gritar o llorar solo empeoraría más las cosas.

-corre- alguien me tomo del brazo y me jalo con toda la fuerza posible. Al darme cuenta ya estaba corriendo, junto a alguien desconocido .

-mi dije- susurre cuando me di cuenta que no lo tenía.-Suéltame - sujetaba firmemente mi mano y obligaba a correr , cuando intenté safarme de su agarre, me cargó como saco y siguió corriendo.

Papá me había dicho que gritar solo los atraía más, el ruido lo hacía. Decidí dejar que me llamara total los humanos eran los buenos, ¿No es cierto?

Cerré los ojos por impulso.

Al darme cuenta vi que estábamos en la carretera, empezé a patalear para que me soltara y lo hizo.

- ¿Quién eres?- caí en cuenta que el dije no era lo único que se me había perdido, si no también mi arco.

-Mi nombre es Negan y tu eres....- se agachó a mi altura

-Soy Elizabeth Dixon -lo mire con una sonrisa - Tengo que ir con mis padres. Gracias por salvarme.- le dije.

-oh no pequeña tu no irás a ningún lado - ¿Que demonios?.

Intenté correr pero fue rápido y me agarró de las muñecas.

-SUELTAME , TENGO QUE IR CON MI FAMILIA - gritar no servía de nada, me cargó nuevamente y segui gritando hasta que sentí un golpe fuerte en la cabeza .

Todo se volvió negro.

(.....)

Los padres de la pequeña se encontraban conversando cómodamente sobre su hija y el ahora mundo. Pensaron que la pequeña estaba con Merle pero se equivocaron.

-¡SE SUPONE QUE ESTABAS HACIENDO GUARDIA!- el menor de los dixon explotó en llanto. Lo primero que hizo al enterarse fue agarrar su ballesta-que tiempo después se convertiría en los más preciado que tenga- y salir a buscarla.

Merle lo siguió algo apenado por la situación, se hecha a la culpa y pues en cierta forma la tenía. No podía evitar culparse.

-MIERDA - vio como su hermano estrechaba su puño contra el árbol al encontrar el dije de su hija. Nunca lo había visto de esa forma. Se acercó bruscamente hacia el - ¡SI LE PASA ALGO, TE MATO!- Su hermano mayor solo alzó las manos, no diría nada pues el no comprendía eso de el amor de padre.

Daryl hacia el mayor esfuerzo por no romper en llanto. Rastrean sigilosamente sus huellas pero la lluvia que había comenzado hace un rato no ayudaba .

Recogió el arco que estaba tirado en el suelo
, lo estrecho con fuerza hacia su pecho y no puedo evitar pensar lo peor. Las huellas se borraron por comoleto , se percató de eso y cayo de rodillas al piso- ignorando el hecho de que su hermano mayor se encontraba con el - rompió en llanto.

Era solo una niña ¿Que le pudo haber pasado? No puede desaparecer haci de la nada.

-Hay que seguir buscando- Merle lo tomo del hombro algo apenado por la situación .

.....Daryl asintió con la fé que aún le quedaba , la fé que al pasar los años se fue desvaneciendo.....

WE ARE MOMENTS| Carl Grimes y TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora