Un mundo en el que hay una persona que es el mayor enemigo de la humanidad, que ha tenido muchas y diferentes víctimas, y Akira Yami no fue la excepción, pero...
Esta es la historia que casi nadie sabe sobre la Pilar de la Oscuridad, una pilar muy...
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Entonces, a penas derrotó al demonio que le asignaron en esa misión, apareció otro.
Sus uñas eran de color azul pálido las cuales son largas y puntiagudas, su piel de tono pálido, cejas negras y gruesas. Su cabello parecia plateado, era más corto hacía la izquierda y el resto se extendía hacía la derecha, además diversos mechones disparejos se expandían en ambas direcciones. Sus ojos eran muy raros y hermosos, ya que parecen estar formados por una variedad de tonos pastel arcoíris que se desvanecen entre sí mientras rodean sus iris.
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Estaba asombrada de lo lindo que podía ser, pero sin duda alguna, era un demonio. Estaba a unos metros de ella, de frente; así que, podia visibilizar que tenía partes de un cadáver, y la cabeza de una mujer. Tenía una pierna completa, y le faltaba una parte, que se notaba que le había pegado un gran mordisco.
Akira estaba algo impactada por la escena, ya que te trajo ciertos recuerdos de la masacre de tu familia, en especial a tu hermanita.
El demonio la veía sonriendo y vio como fue moviendo la boca, estaba a punto de decir algo.
Douma: Vaya, pero que tenemos aquí. Una linda chica, ¿Te han dicho que tú blanco cabello es muy hermoso?
Akira: Y tu... ¿Quién eres? ¿Por qué hueles diferente a los otros demonios?
Douma: Lo siento, lo siento, que descortés de mi parte alagarte y no presentarme, pero es que tú belleza es agobiara y tranquilizante para la vista. Mi nombre es Douma, soy una luna creciente, la dos para ser exactos.
Akira: ¿Luna?
Douma: Si, básicamente somos los demonios favoritos de Muzan, a los que les dono mas sangre... Puedo hacer casi cualquier cosa.
Se detuvo un momento para hablar, mirándote fijamente con ojos entre cerrados.
Douma: Ahora que lo pienso... Si como humana eres linda, no me imagino como demonio.
Akira: ¿Que mierda estas diciendo? No entiendo, solo se que te matare como todo demonio que se ha cruzado por mi camino. A veces me compadezco, pero tu si dices cosas muy asquerosas.
La chica había desenvainado su espada, corriendo directo para atacar. El demonio pudo ver lo ágil era, asi que accedió a cumplir que él mismo había dicho.
Douma esquivo su ataque, esta se volteo y volvió a intentar atacarlo, tomándolo por sorpresa, cortándole la mejilla, pero este se regenero rápido. Lo corto gracias a que él creyó que iba a ser igual de torpe que los otros cazadores y se caería, pero no. Akira le lanzo mucho ataques con su katana, algunos lo esquivaba, otros les hacían ciertas heridas, pero nada que no pudiera regenerar. Noto que la chica se le dificultaba respirar, pero aun asi sus ataques eran limpios y perfectos, aun asi, ella tenia cierto problema en su respiración.
Hubo un momento en que Akira pego un salto, dio un giro hacia atrás, quedando en el aire y su katana en la espalda del Douma para poder contarle el cuello, cosa que fallo, ya que el demonio hizo un pequeño movimiento en su torso, como agachándose, de forma que le diera ahí. Este aprovecho cuando Akira estaba cayendo y uso una de sus técnicas para poder lanzarla a otro lado del lugar, haciendo que esta se estrellara contra el suelo, a sus espaldas.
Douma se volteo para ver a la chica, esta ya estaba arrodillada y pensaba volver a atacar, pero se detuvo cuando él hablo.
Douma: Me impresionas, eres muy fuerte, sin embargo, te noto cansada, ¿llevas días sin dormir? Bueno ya que, creo que para evitar que una damisela como tu pase por eso, te daré un poco de mi sangre.
Akira: Tu si que no tienes ningún tipo de sentimiento ¿no?, he conocido demonios que se arrepienten de lo que hacen, sin embargo, a ti no te importa.
Douma: Pues la verdad, tienes razón. Soy simplemente especial, no puedo sentir una emoción. Lo mejor, es que soy asi desde que era humano, o sea que siempre he sido único desde un principio. Asi que no me importan tales cosas como matar gente y después comerla, me da igual.
Esto solo hizo enojar a Akira y tener mas ganas de matarlo, asi que corrió hacia él sin pensarlo. Sin embargo, Douma lo vio como una oportunidad.
Cuando la chica estuvo lo suficientemente cerca para atacar, no lo hizo, algo la detuvo. Douma le puso un dedo en su frente, haciéndole una herida. Cuando Akira se dio cuanta que le estaba dando de su sangre no pudo reaccionar tan rápido, se quedo paralizada por unos segundos, su corazón iba rápido, antes se le dificultaba respirar, ahora mas; sentía como todo su cuerpo se empezaba a congelar mas, era obvio que no era la nieve, ya que ni ella te da tanto escalofrío.
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Solo le tomo pocos segundos para retomar la conciencia y empezar a atacar mas en serio, pudiéndole cortar los dos brazos, después le hizo una herida, aun mas rápida, en el estomago. Esto alarmo a Douma, asi que cuando vio que estaba a prácticamente nada de decapitarlo, desapareció. Se fue.
Akira se quedo en shock con todo esto, se sentía extraña, todas sus venas se notaban, ella no quería convertirse en demonio, se negaba.
Empezó a volverse loca y mover la cabeza en forma de negación. No iba a convertirse en demonio, no tendría, asi que, cuando iba deslizando su katana por su cuello, esta sintió una gran onda de electricidad, y pronto, se desmayo.
