~CAPÍTULO 18~

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Habían pasado cinco días desde la operación de George, ya podía caminar sin dolor y comía mejor. Estábamos a sábado, mañana era Noche Buena y Clara y Sara aún no me habían contestado.

Con Dahlia quedé el martes para ir a dar un paseo por la playa, merendamos unos gofres de chocolate y después fuimos al mirador de siempre y... Bueno... Estuvimos besándonos bastante rato, tanto que tuvimos que terminar en el coche. Estábamos bastante bien. Esa noche se quedó a casa a dormir y el miércoles fuimos juntos a clase, que fue el último día, ya que estamos en las vacaciones de Navidad hasta el ocho de enero, aunque por la tarde tuve un contratiempo.

Tuve que quedar a escondidas con Mike y con Steve para entregarles una parte de la mercancía porque me llamaron justo en el mejor momento, para ser sinceros: cuando dejé a Dahlia en su casa por la tarde, así que no tuve que darle explicaciones a sus preguntas. Morales estuvo vigilando con sus compañeros a distancia.

Con Hada he estado hablando estos días y nos vimos el jueves para ver a su hermana y el viernes decidimos quedar para pasar el día en un pueblo de Barcelona: Mura. Pasamos ahí todo el día, comimos, visitamos el pueblo, cenamos y por la noche la llevé a su casa. Me comentó que la denuncia ya le había llegado a ese cabrón... Sigue en contacto con Andrés. Gala todavía no despertaba y están a la espera de que le anuncien la fecha para el juicio. Me pidió que la acompañase cuando sea la cita, obvio le dije que sí. No iba a dejarla sola.

De pronto, mientras estaba haciendo el desayuno me sonó el móvil.

10:03, Clara:
Hi, honey, por supuesto, el día 30 estamos allí. Perdona la tardanza pero hemos estado liadas con tanto curro y estudios, vemnos a buscar el sábado treinta a las dos de la tarde al aeropuerto si no te va mal y ya está. Ya hemos pagado el vuelo ;) hablamos. We love you too.

Bien, avisaré a Dahlia. La llamaré y pondré el manos libres para poder seguir con el desayuno.

-Buenos días.

-Buen día Dahlia, tengo algo que contarte.

-Dime.

-¿Aún sigues dormida?

-Algo... Si...

-¿Te he despertado?

-Un poco, bueno, cuéntame.

-He hablado con Clara y vendrán para noche vieja, bueno, ¡un día antes! - Lo dije con tata emoción que Dahlia se despertó de golpe.

-¿Enserio? Jo, qué guay, ¡las vamos a ver! ¿Eso significa que me estás invitando a cenar todos juntos?

-¡Claro! Si quieres... Y se puede venir tu madre.

-Síii, luego la aviso, ¡gracias! ¿Y mañana qué haréis?

-Pues nada, cenar aquí.

-¿Os queréis venir vosotros a mi casa?

-¿De verdad?

-Por supuesto.

-Sería estupendo darling.

-Vale, pues luego le aviso. Bueno, te dejo que voy a seguir durmiendo.

-Vente si quieres y desayunas aquí con nosotros, estoy preparando tortitas, dime algo para hacerte a ti también.

-Venga vale, me visto y voy.

-Vale, te voy a buscar así llegas antes.

-¿No puedo elegir, no?

-No, no hay opción.

NI EN UN MILLÓN DE SUEÑOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora