NI EN UN MILLÓN DE SUEÑOS

~CAPÍTULO 23~

06/01/2024, Harry

Eran las seis de la mañana cuando sonó la alarma de mi móvil. Decidí que sería buena hora para ir sin prisas al aeropuerto. Desperté a Clara y a Sara. Desayunamos juntos, me vestí, preparé la maleta y me llevaron con el coche de Santiago.
Una vez allí, compré el primer billete de vuelo que saliera para Barcelona. Salía en una hora. Tenía tiempo para embarcar. Calculé que a las 09:20 ó 09:30 ya estaría aterrizando y para las diez o diez y media, todo dependiendo de los horarios de los buses, llegaría a casa.

Me despedí de mis amigas. Lloramos todos un poco, pero prometimos volver a vernos pronto.

-Ya nos avisarás cuándo llegues y cómo ha ido el vuelo, parece que hoy el día está despejado, - dijo Clara.

-Si, ve con cuidado y no te preocupes por las amenazas de Jack, - añadió Sara.

-De acuerdo, os avisaré, y en cuanto a lo otro... no os prometo nada.

-Bueno, vale.

-Ya nos dirás la reacción de Dahlia también, - dijo Clara.

-Hecho.

Fui a hacer cola para pasar el control de seguridad. Me di la vuelta y mis amigas seguían allí de pie alejadas despidiéndome con la mano. Yo les lancé un beso, se marcharon y seguí mi camino.
Una vez pasado el control, comprobé que tenía batería en el móvil y que llevaba conmigo las llaves de casa. Ni si quiera había avisado a George, así que sería una sorpresa para todos.

Pero la sorpresa fue para mí cuando abrí la puerta y me encontré a toda esa gente durmiendo en el sofá y en un colchón en el suelo. Al principio me asusté porque creí que eran ocupas, hasta que Hugo abrió los ojos y me vio. Los dos nos pegamos un susto, pero le indiqué con mi dedo en el labio que no hiciera ruido.

-Joder, qué susto. Creía que habían entrado ocupas a mi casa.

-Jajaja, buenos días Harry, perdona las molestias, es que ayer... se nos fue un poco de las manos. ¿Qué tal el vuelo?

-Ostia.

-¿Qué ocurre? - Hablábamos susurrando.

-Que he olvidado avisar a mis amigas.

Les mandé un mensaje diciendo que el vuelo estuvo genial y ya había llegado a casa.

-Jajaja, vaya.

-Por cierto, todo bien en el vuelo, gracias por preguntar. Te dejo dormir, luego me contáis qué tal anoche.

-Dalo por hecho, buenas noches... O... buenos días, no sé. Buenas. Jajaja.

-Descansa, anda, hasta luego.

-Igualmente.

Cerré la puerta del pasillo y me fui directo a mi habitación donde seguramente estaría Dahlia durmiendo.
Me quité la ropa y me puse un chándal. Me senté en la cama, la observé cómo dormía profundamente, le acaricié la mejilla y me tumbé junto a ella. Oí un murmullo.

-Sht... Tranquila...

-Hmmm... ¿Harry? - Dijo en un tono muy bajito.

-Si... Soy yo. Ya estoy aquí.

Se despertó de golpe y se incorporó en la cama a lo que copié su acción.

-¡Harry, ya estás aquí! - Se lanzó hacia mi y me abrazó, - ¿qué hora es?

-Síii, he vuelto, - dije riendo y la apreté más hacia mi pecho. Olía tan bien..., - las diez y veinte.

La aparté de mi para verle mejor la cara, la puse entre mis manos, nos miramos unos segundos y nos besamos.