TRAIDORES| Luke Castellan

LA MISIÓN

Habían pasado tres años desde el suceso en la colina, a estas alturas Zoe se había olvidado de su promesa silenciosa, o se cree.

Claro que eso no quitaba su tristeza, pese a que todos la vieran con su sonrisa diaria, el único que sabía cómo ella se sentía era Luke, desde que llegaron al campamento Luke y ella eran inseparables, todos al principio pensaron que ellos eran algo pero luego de un año se dieron cuenta que ellos eran solo amigos, claro que las apuestas siguen de cuando se volverán algo más.
Era una mañana prácticamente normal Zoe se despertó cómo era de costumbre en la cabaña de Atenea, se levantó de la cama, se vistió y se percató de que Luke estaba afuera esperando a que ella saliera para ir a recorrer el bosque.

- Luke, alguna vez te has puesto a pensar que los dioses no se preocupan por nosotros?
Dijo la rubia algo desanimada mientras caminaban.

- Por qué dices eso mai?- dijo con tono de preocupación.

- Es que a veces me siento desprotegida, cómo si no le importara a nadie, y ni siquiera les preocupaba que llegáramos vivos aquí, dejaron morir a Thalia aunque tenían el poder de mantenerla con vida.
Dijo con los ojos algo rojos por las lágrimas que contenían, habían días que ella solo se ponía a pensar sobre lo que pasóesa noche, sobre el que hubiera pasado si ella simplemente se hubiera quedado a luchar con Thalia.

- Mai tranquila, quizás ellos tenían sus razones y recuerda que Thalia era una hija prohibida, significa que de todas formas los monstruos la habrían de matar- Dijo el peli-negro algo decepcionado debido a que el sabía que la rubia tenía razón, los dioses tenían el poder para haber evitado lo que le pasó a su amiga.
El peli-negro decidió abrazar a su amiga para mostrarle contención y tranquilizarla, el sabía que en el fondo ella se sentía culpable de la muerte de Thalia, según la rubia si ella no se hubiera lastimado su amiga seguiría con ellos.

- Tenemos que ir a practicar al ruedo con la espada, vamos así puedes desahogarte- dijo el peli-negro.
Los chicos estaban practicando con sus espadas, los dos mejores espadachines del campamento luchando entre sí.

- Ya vas a caer, no podrás vencerme- decía la rubia con una sonrisa.

- Jamás Mai, a no ser que reciba algo a cambio- dijo el peli-negro con su sonrisa coqueta.

- A ver? Y que sería lo que quieres a cambio?- dijo la rubia con su cara de confusión.

- Tú y yo, salida al lago está noche- dijo el peli-negro muy seguro.

- De verdad que te acompañaría, pero creo que tengo cosas que hacer- dijo la chica haciendo una estocada que desarmó al peli-negro y lo dejó contra la pared, en este momento sus rostros estaban muy cerca, el peli-negro observaba los ojos de la chica y luego sus labios, para en ese instante cambiar la posición y ahora quien estaba contra la pared era la rubia, los dos estaban tan cerca que ambos sentían su respiración cálida.
Pero en ese momento fueron interrumpidos, la rubia se dio cuenta de un detalle, su amiga Delia iba hacia ellos corriendo.

- Zoe, Luke, que bueno que los encuentro juntos, Quirón dice que tienen que ir a la casa grande ahora ya!.

- Y te dijo para que nos necesita?- dijo la rubia algo sonrojada.

- No, solo me dijo "Delia dile a Zoe y a Luke que vengan enseguida, es una orden".

- Bueno, voy.... nos acompañas??

- Por supuesto.

Llegaron a la casa grande y Delia se quedó afuera esperando a su amiga.
No obstante cuando Zoe iba ingresando Delia le dio un codazo con una sonrisa divertida molestando a su amiga por cómo la encontró con el peli-negro, cuando Zoe entró se encontró Quirón y el señor D.

- Señor Dalia dijo que nos necesita.
Dijo la niña algo insegura.

- Eso es correcto Zoe, te llamaba ya que te tengo que informar que han sido seleccionados por Hermes para una misión.

- Un momento señor, "han"?, eso me suena a plural.
Dijo el peli-negro.

- Correcto Luke, Hermes escogió a dos mestizos, Zoe y tu.

- Y en que consiste nuestra misión??
Dijo la rubia algo confundida todavía.

- Chicos, juntos irán en busca de el fruto del árbol de la Hesperides.
Dijo el Centauro.
La cara de los chicos describía como se sentían en ese momento, ATERRADOS, pese a que sean los mejores espadachines del campamento, no quita que sean unos adolescentes que ahora arriesgaran sus vidas por un dios que les envía a enfrentarse a un dragón.

- Entonces, aceptan??
Dijo el Centauro.
La chica miró a Quirón, luego al señor D y por últimoa Luke. Ambos se observaron.

- Acepto.
Dijeron ambos.

- Excelente, entonces, ahora solo falta consultar al Oráculo.

Este es mi segundo capítulo, espero lo hayan disfrutado.
Recuerden que estoy abierta a sugerencias y correcciones ortográficas, siempre y cuando vengan con respeto.
               - Kiara✨️