Hibrida (Alice Cullen-Leah Clearwater x Oc)

Leyendas Quilete

El día siguiente despierto cerca del mediodía, lo cual es toda una sorpresa para mi

Puedo sentir a Leah antes de siquiera abrir los ojos, con una pierna sobre las mías y su brazo sobre mi abdomen, aparte que usa mi hombro de almohada y su respiración me hace cosquillas en el cuello

Mi corazón se acelera y empiezo a pensar que lo que sea que siento hacia ella no es solo amistad, pero me aterra, si mi propia compañera quien se supone que es para toda la vida me rechaza que posibilidad tenía de que Leah, una chica hetero (o bisexual pero no quería asumir y darme más esperanzas) recién salida de un compromiso y con el mismo corazón roto que yo se fijara en mi

Y aún si pasara que es poco probable, no hay motivos para que ella se quede a mi lado

Creo que lo mejor sería no darme esperanzas

-Puedo escuchar los engranes en tu cabeza-me dice Leah y se acurrucar más en mi

-Si, estoy pensando que es mediodía y debería estar en casa, pero no me quiero mover

-Entonces quédate a comer

Me río

-Gracias Lee pero realmente debo irme

-Lee eh, me agrada

Sin mucho ánimo se aparta para dejarme ir

-¿Te veo pronto?

-Seguro

-Sabes en la noche hay una fogata y contarán las leyendas Quilete, por que no vas comes te bañas y regresas

-Me parece un gran plan

Salgo despidiendo me de Seth y Sue que estaban en la cocina, Sue me dice que me puedo quedar a comer pero le digo que los veré en la noche

Al llegar a casa Charlie esta en la cocina preparando pescado, le ayudo a poner la mesa mientras el le sirve a Bella y sube su plato para ver si come algo

Cuando regresa nos sentamos a comer, yo pruebo el pescado con ánimo, pero al primer bocado se que algo esta mal, vuelve a saber a tierra, así que le digo a Charlie que no me siento bien y subo

Paso frente al cuarto de Bella y me habla, así que me detengo en su puerta y volteo a verla

-No llegaste anoche...

-Me quede en casa se los Clearwater

-¿Realmente te hace sentir mejor estar ahí? ¿No te preocupa lo que Alice pueda pensar si regresa?

Mi humor decae inmediato ante la mención de Alice

-Creo que ya hablamos de eso

-Esta bien, yo saldré con Jessica el siguiente fin, era eso o que Charlie me corriera a Phoenix

Yo asiento y me retiro sin decir nada más

Voy por mi ropa y bajo a bañarme, subo a mi habitación para perder un rato y tomo el diario que me dejó mi madre

Cuando era niña creía que se trataba de una recopilación de cuentos, pero conforme fui creciendo entendí que en realidad era un diario pasado de mano en mano de los antepasados de mi madre, algunas entradas más viejas estaban escritas en diferentes idiomas pero alguien se había tomado el tiempo de traducir las por encima

La última entrada podría ser de mi abuelo o probablemente tatarabuelo, del total de entradas que había solo había dos de mujeres las demás eran todas de hombres

Abría la última de las entradas, una letra torpe y descuidada explicaba sobre un romance no correspondido

"...estaba enamorada de ella desde antes del cambio y cuando la vi a los ojos mi centro de gravedad cambió, ya no era la manda, ya no importaba nada que no fuera su existencia, para mi suerte ella no sentía amor hacia mi, solo un profundo cariño, mi forma de verla paso de ser el de un amante al de un hermano, una parte de mi se sentía desgarrada por eso, pero no importaba, seria lo que ella quisiera para toda su vida..."

Eran todas parecidas, solo había una o dos por persona, las primeras siempre eran explicando el cambio y las segundas, para los afortunados era explicando lo que se describía como imprimación

Sabia que las leyendas Quilete hablaban de eso, pensé que quizá podría llevar el diario y mostrárselo a Leah, pero me decidí por no hacerlo

Un poco más tarde volví a salir rumbo a la reservación, en la playa podía ver una gran fogata brillando y no tarde mucho en dar con Leah y Seth

Nos sentamos al rededor de la fogata a escuchar a los ancianos contar la historia del primer cambiante, de su pelea con los fríos de ojos sangre, de como su amor lo salvó, también contaron como se había realizado un trato, con los fríos de ojos ambar

Leah me había contado que hacían esto al menos una vez al mes, y que era bienvenida siempre, por lo visto a Billy Black no le hacía mucha gracia

Para mi desafortunio era noche y tenía que regresar a casa, Leah se ofreció a llevarme cosa que acepté

-Gracias Lee, espero verte pronto

Ella me sonríe desde su asiento de piloto y se acerca un poco

-Gracias a ti Alex, me devuelves la felicidad cuando te veo- y con eso se inclina hacia mi dejando a modo de despedida un beso en la comisura de mis labios

Juro que no podía estar más roja cuando bajé del auto y corrí directo a casa, podía ver a Bella viéndome por su ventana