Reino de luz y sombra

3

    Una vez que Noah desapareció de nuestra vista miré hacia donde estaba Aleksander.

    – Oye ¿ocurre algo malo?

    – No, ¿porque lo preguntas?

    –Porque tu cara me dice que acaba de pasar algo malo – Aleksander tenía una cara de pasmado.

    – Es que la verdad son pocas veces la que me pide que vaya a su despacho, y cuando me lo pide es porque realmente ha pasado algo terrible.

     No sabía cómo reaccionar a eso, realmente había ocurrido algo tan malo como decía Aleksander. Así que no nos quedó de otra que prepararnos para ir más tarde al despacho de Noah, como yo no conocía aún todo el palacio le pedí a Alek si podíamos juntarnos antes e ir los dos.

    –No te molesta ¿cierto?

    –¿Por qué tendría que moléstame, Lysandra? Aparte que el príncipe nos citó a los dos.

    –Gracias a dios, si no fuera por eso estoy segura de que andaría super perdida.

    –Toma un tiempo adaptarse a todo esto, cualquier cosa que necesites puedes pedirme ayuda a mí.

    –Muchas gracias Alek, por cierto ¿no te molesta que te llame así? – pregunté con timidez.

    –Tranquila, puedes llamarme como quieras, cambiando de tema ¿te parece si nos juntamos aquí mismo para que no corras el riesgo de perderte? – me dijo con un deje de diversión.

    –De acuerdo, nos vemos entonces.

    Luego de despedirnos, cada uno siguió mi camino, al llegar a mi habitación decidí darme una pequeña ducha porque aún era temprano, ya cuando salí decidí ponerme una falda blanca y una camisa lila, esta vez preferí llevar el cabello suelto. Cuando ya estuve lista fui a la cocina porque Abby me dijo que íbamos a almorzar juntas. Aun no entendía si debía llevar algún tipo de uniforme o no, pero ni las criadas ni Noah me habían entregado alguna vestimenta.

    Cuando finalmente llegue, salude a todos con una leve inclinación, me sentía un poco incomoda por lo que había pasado entre Abby, así que cuando me encontré con ella decidí disculparme.

    –Hola Abby, quería pedirte disculpa por lo que paso hace unas horas atrás cuando esta….

    –No te preocupes, claramente ambas tenemos opiniones distintas con respecto al príncipe, pero no es causa para molestarme contigo.

    –Si, es solo que hay muchas cosas que no entiendo sobre Noah.

    –Ahora que lo pienso, ¿Desde cuándo conoces al príncipe? Es que hablas como si tuvieras mucha confianza al referirte hacia el por su nombre. Solo los que lo llaman por su nombre son los más cercanos a él.

    –La verdad es que no, pero…

    –No tienes por qué darme explicaciones, además si el príncipe no le molesta que lo llames por su nombre, no veo el problema.

    Nos dirigimos a una sala que por lo visto era el comedor en donde almorzaban todos los empleados, criadas y mayordomos. Era una habitación enorme con una gran mesa en el centro, en ella ya estaba todo servido, Ciertamente aún no conocía todo el castillo, pero si ya encontraba enorme esa sala no me puedo imaginar cuan gigantesca sería el comedor donde cenaba la familia real.

    El tiempo se pasó demasiado rápido, entre tantas risas y charlas con los demás no me había dado cuanta que tan solo me quedaban diez minutos para que me presentará en la oficina de Noah, así que agradecí por la comida y el buen momento que pase, para dirigirme hacia el lugar que habíamos acordado con Aleksander. Cuando llegue al lugar acordado, Alek ya me estaba esperando.