Por una parte quería ir detrás de Noah solo para escuchar la conversación entre él y sus padres, aunque no debería hacerlo, debería ya estar dirigiéndome a donde se encontraba Abby como se lo prometí a Alek. Pero mi estupidez me ganó, no pude evitarlo.
Me dirigí con cautela hacia donde se encontraba el despacho del rey, evite a cualquier guardia y sirvienta que pasaba por el lugar, todos en el castillo sabían que Alek debía vigilarme pero si me veían sin él caminando hacia donde se encontraba la familia real pensarian de inmediato que algo tramaba.
Ya estando a unos metro de distancia pude ver que el rey y la reina se encontraban afuera de la sala junto con Noah, así que me oculte detrás de unas cuantas figuras para evitar que me vieran, desde donde estaba oculta podía escuchar con bastante claridad lo que hablaban.
–¡Papá! por favor déjame ir contigo, déjame acompañarte – le suplicaba Noah.
–¡No! – le contestó el rey con firmeza.
–¿Pero por qué? – en la voz de Noah se podía percibir resentimiento y molestia.
–Creo que la respuesta es bastante obvia – dijo ya el rey con fastidio – ¡te mataran en cuanto tengan la oportunidad!
–¡¡¡Pero yo no les daré esa oportunidad!!! – gritó Noah, parecía ya muy molesto – ¡siempre es lo mismo, nunca dejas que te apoye en situaciones como esta!
–Porque serías una carga para mi – contesto ya el rey irritado, Noah quedó como piedra ante aquellas palabras – aparte que ni siquiera puedes usar tu magia como deberías.
–¡Crees que no la controlo por gusto! – dijo Noah ya algo alterado – he tratado día tras día poder controlar mi poder, pero….
–Noah – intervino su madre – sabemos que es difícil para ti – le dijo agarrando el rostro de su hijo.
–No me vengas con esa ahora, siempre has sabido lo que he tenido que cargar sobre mis hombros – refuto Noah soltándose del agarre de su madre.
Quedé atónita ante la conversación de ellos, había descubierto lo que sospechaba, que Noah aun no podía controlar sus poderes, quizás era esa la causa del porque siempre andaba con ese carácter de mierda. Pero por alguna razón, la reina Dalila ocultaba algo en su mirada, algo que no supe descifrar que era.
–Hijo tiene que entender que solo quiero protegerte – dijo el rey con angustia.
–Si, ¡¿de qué forma?! – dijo Noah con ironía – encerrandome aquí y a mis poderes en el palacio, como no mejor te dignaste a enseñarte una forma de controlarlos.
–¡Noah! – habló su madre.
–Espera, eso pudiste haberlo hecho tú, ¿no es así, madre? – miraba a su madre con el rostro lleno de ira – eres la persona que controla mejor que nadie la magia.
Sentía que en cualquier momento Noah explotaría de furia, no entendía porqué estaba tan molesto con sus padres si lo único que ellos querían era protegerlo, por un momento quería patearle la cara por ser asi con ellos pero me contuve, él tenía suerte de tenerlos a ambos con vida, ademas tenia que pasar lo más desapercibida posible.
–Nunca te he importado, pese a ser tu hijo – le dijo con ojos intimidantes a su madre – jamas te importo los dolores que yo sentía cuando pequeño, lo único que te importo fue el título que te concedió mi padre al casarse con el - le grito a su madre.
Ambos quedaron plasmados al igual que yo mientras Noah se alejaba de ellos, decidí salir de mi mega escondite cuando los padres de Noah se alejaron del lugar. Había podido averiguar la causa de porque Noah siempre andaba con ese carácter de mierda, y era porque no podía controlar su magia, eso quería decir que mi teoría había sido cierta o al menos eso pensaba. Pero lo que me dejó intrigada fue el hecho de que la reina había quedado estupefacta cuando Noah le dijo que ella no había hecho nada como madre para ayudarlo.
ESTÁS LEYENDO
Reino de luz y sombra
Teen FictionJamás pensé que esto me ocurriría a mí, pero así fue ... .mi mayor miedo se hizo realidad. Todo comenzó cuando lo conocí, a él, mi peor enemigo, mi consuelo, mi némesis y el amor de mi vida. Noah Vangelis, el príncipe del reino de luz y sombra y due...