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    Al día siguiente desperté cerca de las diez de la mañana, cuando salí de la habitación, Aleksander ya se encontraba afuera esperándome como era ya costumbre, al verme me dedicó una radiante sonrisa.

    –Buenos días, Lysandra – saludo – ¿Espero que hayas dormido bien?

    –Si, gracias por preguntar, me imagino qu tu igual.

    –La verdad es que si, con todo lo que tuve que hacer ayer, caí como tronco a la cama – me explico.

    –Creí que todavía estarías ocupado en eso.

    Pensé que Aleksander estaría organizando aún los preparativos para la guerra, nunca imaginé que ya estaría libre.

    –Me desocupe hace una hora, más o menos – dijo – las tropas se fueron cerca de las ocho de la mañana junto con el rey.

    –Asi que el rey Xander partio temprano en la mañana.

    –Así es – me afirmo – Y dime ¿cómo la pasaste ayer con Abby? ella es una chica algo ocupada – quiso saber.

    –La verdad es que solo estuve un rato con ella – le comente – y fue casi al terminar el día.

    –Y ¿por qué? si me dijiste que te irías con ella de inmediato después de que me fuera.

    Por su tono de voz parecia un poco disgustado, no le iba a contar que fui a escuchar la conversacion de Noah con sus padres. Pero si le dije lo que le pasó después al príncipe, tal vez si le preguntaba a Aleksander, él tendría algunas respuestas a las miles de dudas que tenía en la cabeza.

    –Lo que pasó fue que iba de camino hacia donde se encontraba Abby – no se porque pero empecé a juguetear con los dedos de mis manos, estaba nerviosa, como si lo que hice fuera algo grave – y cuando pase por fuera de la habitacion del principe Noah escuche un horrendo estruendo y decidí ir a ver.

    Aleksander me miraba como si sus ojos en cualquier momento se saldrían de su órbita, por su reacción sabía que había pasado.

    –Cuando entré a su cuarto encontré muchas cosas desparramadas en el suelo y él estaba sangrando – le informe.

    –¡¿Como que sangrando?! – pregunto con espanto.

    –No le paraba de sangrar la nariz, por un momento pense que se habia golpeado pero no fue asi, ¿acaso tu sabes algo al respecto? – indague.

    –¡No es posible!, le dije que cualquier cosa me avisará  – dijo nervioso y se pasó la mano por el cabello.

    –¿Que ocurre? – pregunte preocupada, por su tono de voz sospeche que algo no andaba bien.

    –Dime algo Lysandra, ¿que hiciste cuando viste a Noah en esas condiciones?

    Lo mire a los ojos, su mirada era inquietante, no sabía si debía contarle que había usado un conjuro curativo para detener la hemorragia, sin embargo, Abby me había dicho que era lo mejor y que siempre Alek lo usaba cuando Noah estaba en situaciones similares.

    –Bueno – comencé a contarle – como note que el sangrado no se detenía, Abby llegó y me dijo que lo mejor era usar un conjuro – lo mire nerviosa – me dijo que tu usabas conjuros curativos cuando Noah estaba asi.

    –¡¿Osea que detuviste el sangrado?!.
  
    –Si – afirmé – solo que después de usarlo, Noah me dijo que le dolía todo el cuerpo y que estaba muy cansado.

    –¿Qué tipo de conjuro usaste?¿utilizaste algún tipo de poción o elemento que te ayudará a realizar el hechizo? – no se porque me estaba haciendo tanta preguntas.

Reino de luz y sombraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora