La mujer del abrigo de pieles

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Se dice que las madres siempre quieren lo mejor para sus hijas, Lyon opinaba lo mismo, pero para ella la felicidad de su hija era casarse con un hombre rico, aunque ella no lo quisiera.

Cuando Marta era pequeña Lyon no la dejo ir a la escuela, la niñera la educo en casa, la educo para ser una mujer elegante y sofisticada, y sobre todo una buena mujer, Marta siempre soñó con ser científica, pero su madre no se lo permitió le dijo-Eso es para hombres las mujeres nos debemos quedar en casa y cuidar de los hijos. Un día a la semana Lyon dedicaba 1 hora de su entretenida vida a estar con Marta, esa era la única hora en que Marta podía estar con su madre. Cuando el padre de Marta enfermo a Lyon no le pareció importar mucho, ya que ella siguió con sus viajes y con su trabajo como modelo, el día que el padre de Marta murió Lyon no se presentó, ya que estaba en París, 6 meses después Marta cumplía los 18 años Lyon había organizado todo, todo iba a ser perfecto, pero de repente entro alguien por la puerta era un joven cuando el joven se acercó a su hija y le pidió matrimonio Lyon se quedó impresionada, ¿cómo un insecto tan insignificante como ese podía atreverse a pedirle eso a su hija?, no dudó ni un segundo en gritar a ese joven y echarlo de la fiesta. Ese mismo día llamo a un amigo de su difunto esposo, y tres semanas después Lyon y Marta cenaron con Adrián y su padre, y más tarde su hija se casaría con Adrián.

Un día Adrián llamo a Lyon y le contó sobre la infidelidad de su hija con Charlie, ella le dijo que volviera a casa y que ella se encargaría de Charlie, cogió una pistola y se fue con el coche a la ubicación que Adrián le había dicho allí vio a su hija salir de la casa de Charlie, Lyon espero hasta que fuera tarde y cuando Charlie dormía lo mato.

La última vez que Lyon hablo con Marta fue en el 10 cumpleaños de Emma, la hija mayor de Marta, Lyon puso en duda la educación que estaban teniendo sus hijos, y que las niñas no tuvieran que ir al cole que tenían que tener una educación en casa, Marta estaba en desacuerdo con esto empezaron a discutir y al final llegaron a discutir sobre la educación de Marta, desde aquel día Lyon no volvió a ver ni hablar con su hija Marta. Dos años después, Lyon recibió una llamada de Emma, su nieta, la cual le explicaba lo que a su madre le había pasado y que ahora estaba en el hospital.

Al llegar al hospital Lyon pregunto por el número de habitación de su hija Marta, al entrar en la habitación encontró a dentro a Zoe, Sara y Lucía, al entrar todas le miraron.

Lyon-¿Por qué me miráis así es que tengo el maquillaje mal?

Sara-No tranquila, estás muy bien, solo es que nos impresiona verte aquí.

Zoe-Sí, desde que Marta y tú os peleasteis no creíamos que os volveríais a hablar.

Sara-Sí, la verdad no creemos que Marta quisiera que estés aquí.

Lucía-En otras palabras lárgate.

Zoe-Lucía!!!

Lucía-¿Qué pasa?, es lo que le intentáis decir, lo único que he hecho es ser más directa que vosotras dos.

Lyon-Primero no me voy a ir, y segundo iros acostumbrando porque voy a estar aquí cada día.

Lucía-Ahí vale pesada.

Sara-Bueno, ahora si nos disculpa, nos iremos a descansar a casa.

Después de la pequeña disputa que tuvieron en la habitación del hospital Sara, Zoe y Lucía volvieron a casa, era la hora de poner en marcha el plan para recuperar a Anna.

Pequeñas Mentiras          Sara RivasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora