Pequeñas Mentiras Sara Rivas

Pesadilla

Lo más difícil de tener un secreto es esconderlo. Algunos, son los fáciles de esconder, como un regalo, una fiesta, sorpresa, un viaje... Pero hay de otros que tenemos que mantener ocultos durante toda nuestra vida, los que no queremos que nadie se entere, esos son los más difíciles de ocultar, algunos son más oscuros que otros, como era el caso de nuestras protagonistas que tenían que esconder más que un secreto.

-Oh, mierda, me he manchado de sangre.

-Eres una torpe, siempre estás igual.

-Mira Natalie, no me hagas hablar.

-Chicas, voy a ir a mi casa a cambiarme.

-¿Pero estás loca? La policía está ahí a fuera y te puede pillar.

-Por eso voy a salir por la puerta de atrás, a ver si alguna vez utilizas la cabeza y piensas un poco, Natalie.

-Hay, perdón, señorita.

Lucía volvió rápidamente a su casa, pero lo que ella no esperaba era que había alguien más en su casa. Ya sé lo que estaréis pensando, que era Luca, pero siento deciros que no era él.

-¿Erick que haces aquí?

-¿Qué te pasa? ¿Por qué estás tan alarmada?

-No es nada, solo que me has asustado.

-¿De qué estás manchada?

-Nada, solo es pintura roja, ¿dónde está Luca?

-Va de camino a la fiesta, no me digas que lo habéis vuelto a hacer.

-¿Volver a hacer el qué? No te entiendo.

-Ya sabes de lo que te estoy hablando, no te hagas la tonta.

-Erick, márchate de mi casa ahora mismo.

-Vale, igualmente no tengo ningún problema en decirles a todos que eres una asesina.

-¿Cómo lo sabes? ¿Eres tú quien nos manda esas amenazas?

-¿Cómo podéis ser tan estúpidas? Todo este tiempo he estado aquí y no os habéis dado ni cuenta. Hace poco más de un año me enteré de que mi padre, el cual me abandonó, vivía aquí con su nueva esposa. Decidí convencer a mis padres adoptivos para venir aquí, la cual cosa fue muy fácil. La misma noche que llegamos, me enteré de que ya no vivía allí, y después de una pelea con mis padres adoptivos, decidí dar un paseo por el vecindario. Fue en aquel momento cuando vi cómo matabais a mi padre.

-Todo este tiempo has sido tú, asesinato tras asesinato, tú has estado detrás, incluso mataste a tu propia abuela.

-Mi abuela era una asesina, además ella fue la que le obligo a mi padre abandonarme después de la muerte de mi madre, ella fue asesinada por mi padre, aun recuerdo los gritos de mi madre, como pedía ayuda y gritaba sin parar, esa noche no la ayude, tenía miedo de mi padre, estaba muy agresivo y había bebido mucho.

-Tu padre era un hombre horrible.

- Él solo cometió un error, fue todo culpa del alcohol, él no tuvo la culpa. Yo pensaba en volver y ser una familia feliz los dos juntos, pero tú y tus amigas lo habéis estropeado todo y ahora me voy a vengar de vosotras una por una, a ti te dejaré para el final. Quiero ver cómo sufres al ver morir a tus amigas una por una y que no puedas hacer nada.

-Por favor, Erick, no lo hagas, tú no eres así, tú en realidad eres buena persona.

-Para empezar, Erick no es mi nombre, mi nombre es Marcos, ¿cómo puedes creer conocerme si no sabes ni mi nombre?

-Marcos, por favor, para aún podemos solucionar esto antes de que sea demasiado tarde.

-Nos vemos en la fiesta, te recomiendo que te des prisa en cambiarte, la fiesta ya va a empezar.

-Voy a llamar a la policía.

-Atrévete, yo creo que tú tienes más que perder.

Tras la amenaza de Marcos, Lucía corrió e intentó llamar a la policía, pero la señal no funcionaba. Lucía intentó abrir la puerta, pero estaba cerrada, Marcos la había cerrado. Mientras tanto, Marcos, o también conocido como Erick, llegaba a una fiesta con un plan secreto que no tardarían en descubrir.

-Hola Erick.

-Hola, ¿cómo estás, Luca?

-Bien, ¿has visto a mi madre?

-No, seguramente está con sus amigas.

-Sí, seguramente.

-Luca, ¿podemos hablar?

-Sí, claro.

-Quiero que sepas que te quiero, te quiero de verdad.

-¿Entonces por eso te fuiste con Dan?

-Irme con él fue un error, yo te quiero a ti, voy a tener que desaparecer durante unos días, pero cuando termine con mis asuntos pendientes seremos felices los dos.

-¿Y cómo sé que me dices la verdad?

-¿Luca Evans Johnson te quieres casar conmigo?

-¿Esto es en serio?

-Y tanto, como mi amor por ti.

-Sí quiero.

-¿Sí?

-Sí.

Entre sus planes no tenía enamorarse, pero Erick se enamoró por completo de Luca, ¿pero Luca se quedará con Erick después de saber quién es en realidad?

De repente las chicas llegaron e interrumpieron la conversación de los enamorados.

-Chicos, ¿habéis visto a Lucía?

-¿No estaba con vosotras?

-No, no la hemos visto en toda la noche.

-Voy a llamarle.

-Nosotras vamos a buscarla, ¿Sara te quedas aquí para supervisar la fiesta?

-Claro, ahora nos vemos, ojalá encontréis a Lucía.

Las chicas fueron a casa y allí encontraron a Lucía.

-¿Qué haces aún aquí?

-¿Qué está diciendo?

-Creo que dice la puerta, la puerta.

-Esta cerrada, no se abre.

-Pues abra que abrir la ventana.

-Pero también está cerrada, ¿pero qué haces estás loca?

Natalie cogió un ladrillo y lo tiro contra la ventana, así rompiéndola, Lucía salió por la ventana y les explico todo a las chicas. Mientras tanto Erick comenzó con su plan aprovechando que Sara estaba sola y que nadie podía verla cogió un cuchillo de la cocina y fue a hablar con ella en una habitación a solas. Erick cogió a Sara, y le apunto con el cuchillo, cuando menos se lo esperaba, Erick recibió un golpe en la cabeza con una maceta. Luca ayudó a Sara a escapar mientras Erick estaba en el suelo inconsciente.

-¿Qué está pasando Luca?

-No preguntes y agradece, si no llega a ser por el mensaje que me ha enviado Marta ahora estarías muerta.

-¿Dónde están?

-Vienen de camino, mientras no llegan para recogernos tenemos que estar en un sitio donde la gente nos vea y Erick no pueda hacerte daño.

Unos diez minutos después llegaron un montón de coches de policía y posteriormente las chicas, cuando llegaron había mucha gente en la calle rodeados de los policías, las chicas se impactaron mucho al ver a dos cuerpos colgados de la azotea, uno era el cuerpo de Adrián y el otro era el cuerpo de...