Imagina Con Jennie

Peleas

Caminé pesadamente mientras entraba a nuestro hogar, BlackPink house.
Todo estaba en silencio y la tensión se sentía mientras las demás entraban detrás de mi..

Tomé un poco de agua y me senté en la mesa; Jennie, quien tampoco quería ser parte de la pelea que se aproximaba, también se acercó a mi para sentarse.
Las chicas todas se miraron entre si, siendo Lisa quien rompió el silencio.

—Muévete —Le dijo a Rosé, quien estaba de pie frente a ella.

—Podrías intentar ser más amable, ¿no crees?

Lisa ya estaba escaleras arriba, lista para ir a su cuarto.
Pero al escuchar a Rosé, regresó.

—No —Se cruzó de brazos. —Creo que lo mereces ya que te la has pasado todo el día molestando mi paz

—Estás siendo un poco ruda, Lisa —Habló Jisoo.

—¡Gracias! —Respondió Rosé.

—Oh, no —Jisoo negó. —No me agradezcas, no estoy feliz con ninguna de ustedes y no estoy tomando el lado de ninguna

—¿Por qué no mejor vamos todas a dormir? —Jennie habló pasando sus manos por su cabello. —Ha sido un día difícil para todas, por ende todas estamos cansadas y estresadas, mañana va a ser un día mejor

—¡Lo será si todas dejan de arruinar todo! —Se escuchó la voz de Rosé.

—Habló la señorita perfecta —Lisa estaba molesta. —Siempre somos nosotras las que arruinan todo, tú nunca haces nada

—Al menos yo bailo bien y canto mis partes correctamente —Jisoo comenzó a pelear también. —Tenemos que comenzar las grabaciones en unos días y tu ni siquiera sabes bailar

—¡Tuve un mal día! ¿Si? —Respondió frustrada.

—¿Pueden dejar de pelear? —Grité molesta. —Solo vayan a su cuarto y mañana hablaremos al respecto

—¡No! —Lisa se negó. —Quiero hablarlo ahora porque, al parecer, todo lo que pasó hoy es mi culpa

—Nadie dijo eso, Lisa —Jennie suspiró. —Calmense todas, respiren; tuvimos un muy mal día, solo vayan a dormir

—¿Saben que? Ya que estamos hablando de eso... —Lisa miró a Jisoo. —¡Tú también lo arruinaste, no fui solo yo!

Rodé los ojos cansada al igual que Jennie.
Las chicas son muy tercas.

En menos de un minuto, las voces de todas se escucharon con fuerza.
Gritaban su punto de vista y lo hacían con intensidad.
Lo cual solo hizo que se molestaran más, al punto de que ya se iban a poner agresivas.

No pude soportarlo.
Mis mejores amigas peleando con tanta intensidad y sus voces tan fuertes, no puedo con tanto.
Me alejé rápidamente y me senté en un rincón del cuarto, para no estar ahí en medio.

—¡¿Se pueden callar?! —Jennie estaba enojada. —¡Ya basta!

—¿Saben qué? Me cansé, no necesito esto —Lisa subió a su cuarto, cerrando la puerta con fuerza.

—Yo igual —Jisoo suspiró molesta.

—Voy a ir a mi cuarto y a poner la música a todo volumen, no quiero a ninguna molestando —Rosé habló con voz firme mientras subía las escaleras.

Jennie suspiró negando. —Al menos nosotras si usamos la cabeza y sabemos que solo fue un mal día sin necesidad de gritar entre nosotras, ¿verdad? —Se giró pero estaba sola. —¿T/n? —Comenzó a buscar por todo el primer piso.

Miró bajo la mesa, tras las cortinas, detrás de las encimeras, junto a la ventana.
Dejó salir un suspiro de alivio al ver unos pies detrás del sofá.

Allí estaba yo, abrazando mis piernas y cubriendo mis oídos.
Abrumada por la situación.

—Oye... —Jennie se acercó. —Ven aquí, todo esta bien —Quité las manos de mis oídos y ella me abrazó. —Todo estará bien

—¿Y si no? ¿Qué pasa si este es el final? ¿Y si nunca se perdonan?

—Eso no sucederá, todas nos amamos mucho como para dejar las cosas así —Negó. —Te garantizo que en menos de 2 horas vamos a estar todas en el cuarto de nuestra unnie favorita, dándonos abrazos y superando la situación

Antes de que piensen que la unnie favorita es Jisoo, en realidad soy yo.
Desde que nos conocimos y nos volvimos amigas, he sido como su madre junto a Jennie, con quien tengo una muy fuerte conexión a pesar de que solo seamos amigas...

Y sé que tiene razón.
Somos muy unidas como para dejar que esto sea más fuerte que nosotras.
Nuestro amor y nuestra amistad hace que siempre superemos las peleas.

Pero aún así, me asusta perder a las chicas...

—Todo estará bien, te lo prometo —Sonrió. —Ya sabes como somos, no podemos permanecer enojadas

—Lo sé...

—Ya los ruidos fuertes terminaron, no te preocupes —Tomó mis manos con cariño. —Ahora solo deben dejar de ser tan testarudas y arreglar las cosas, vas a ver que no tardarán mucho

—Espero que tengas razón —Asentí suspirando.

—¿No la tengo siempre?

—Tonta —Le di un golpecito, sonrojándome al ver lo cerca que estamos. —B-bueno... ¿Podrías continuar abrazándome? Te necesito —Susurré. —Por favor

—Siempre estaré aquí —Besó mi mejilla y me sostuvo con fuerza entre sus brazos. —Nos quedaremos aquí hasta que ellas arreglen su situación

—¿Incluso si pasan horas? —Giré un poco mi rostro para mirarla.

—Incluso si pasan horas —Sonrió mirando mi rostro con detenimiento. —Aquí estaré, en especial porque también me haces sentir bien

Reí suavemente y rodeé su cuello con una gran sonrisa. —Yo también estaré aquí siempre

Jennie soltó una risilla, besando mi rostro sin soltar mi cintura.
Definitivamente ella es la compañía que necesito para estar mejor...