Ojos que no ven...

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(El de la foto es Giorgio)

Narra Carlos:

El movil suena y es un mensaje de Toni, me da las buenas noches y yo le respondo y me voy a dormir.

Al día siguiente voy al set de rodaje y grabamos el anuncio para la campaña publicitaria, queda genial. Conozco a Claudio, Giorgio y José Mari; Claudio es de Roma y en cuanto acaba el rodaje nos dice en un inglés un tanto italianizado que tiene que irse al aeropuerto por otro trabajo que le ha salido en la capital pero que está encantado de conocernos y que nos volveríamos a ver. Jose Mari es un torero español y gracias a el me siento un poco mas acogido alli, ya que nadie hablaba español y el si, es muy simpático y me habla de su esposa, sus hijos y su familia y me invita a ir algun día a su finca taurina en Cáceres; a mi no me gustan los toros pero accedo a ir, no se si a Toni le gustará. Por último Giorgio es un milanés que está mas bueno que el pan y me ofrece quedarme a dormir en su casa ya que me ofrece enseñarme Milán y yo claramente no puedo negarme ante semejante dios romano;

Llegamos a casa de Giorgio y me ducho, me arrelo y espero en el salon a que Giorgio se arregle también para salir.

-Ya estoy aqui, si quieres te puedo prestar una chaqueta, creo que esta noche hará frio- Me dice con un acentazo italiano que me encanta.

-Gracias, pero creo que tengo alguna en la maleta, vengo en un momento- Digo mientras voy a la habitación donde tengo la maleta, y efectivamente, ahi esta mi americana azul marino a juego con la camisa azul claro y el pantalone beige.

-¿Que vamos a hacer primero?- Le pegunto mientras me voy poniando la camisa y camino hasta la puerta de la casa donde el me espera para irnos.

-¿Te parece bien que primero cenemos? conozco un restaurante en el centro que hacen verdaderas obras de arte con la comida- Me dice en un tono bastante conciliador, debo suponer que está deseando ir alli.

-Si, pero, será un poco caro ¿no crees?- Le digo advirtiendole que no puedo gastar mucho dinero, soy "pobre" hasta que no me paguen el dinero del rodaje del spot de Dolce&Gabbana.

-No te preocupes, todo corre de mi cuenta- Me dice con ese acento italiano que tantisimo me gusta; ¡bendita la hora en que se fundó Roma!

-Gracias, es muy considerado por tu parte.- Le digo mientras nos montamos en su MINI rojo.

Estamos en el coche y Giorgio pone la radio pero cambia y parece que las emisoras no le gustan, entonces pulsa el botón de CD y empieza a sonar un acorde de guitarra que me es muy familiar, de pronto una voz de mujer dice There's a fire staring in my heart... de repente me es imposible no acordarme de Toni y cojo el movil, le pongo un Whatsapp: Tu amorcito que no te olvida ni en Italia; Besos. y grabo un audio de rolling mientras suena. Apago el movil y lo vuelvo a guardar en el bolsillo delantero del pantalon. El trayecto se hace muy ameno escuchando a Adele, el idolo de Toni.

Giorgio encuentra aparcamiento y yo me bajo para indicarle. Cuando el coche ya está aparcado voy hacia donde Giorgio me lleva, cuando volvemos una esquina veo un restaurante de muchisimo lujo en el cual hay un cartel en el que pone Pissaco. Entramos y una señora nos recibe en la entrada.

-Un tavolo per due , per favore- Le dice en italiano, y ya que es algo básico deduzco que ha pedido una mesa para dos.

La señora nos guía y nos da una mesa con vistas a la catedral de Milán en la planta de arriba del restaurante. Giorgio me coloca la silla para sentarme, es todo un caballero, intuyo que quiere algo de mi.

Un camarero nos trae la carta, yo pido risotto alla milanese con ragú de ternera, Giorgio se decanta por gnocchi de remolacha sobre mousse de papa con queso ricotta ahumado y trufas negras. Luego nos traen la carta de vinos y Giorgio pide un Monfortino, un vino muy conocido y caro en Italia.

Cuando acabamos de cenar, salimos del Pissaco y vamos a la piazza del Duomo, donde está la catedral.

-¿Quieres que vayamos a mi sitio favorito de la ciudad?- Me dico con ese acento del que no me cansaba viniera de quien viniera, ante lo cual no pude negarme.

-Claro que si, tengo que conocer Milan, mientras mas sitios conozca mejor.

-Bien pues vayamos.

Llevamos un buen rato andando cuando Giorgio me tapa los ojos con un pañuelo que lleva para la ocasión. Me pone ambas manos en mi cintura y me va guiando, de repente, se detiene y yo con el.

-¿Estas preparado?- Me susurra al oido.

-Si- Contesto impaciente por ver donde estoy.

Giorgio me quita lel pañuelo de los ojos y de pronto veo un parque y sobre nosotros un gran arco del triunfo.

-¿Que te parece?

-Me encanta, es precioso, Giorgio.

-Pero no tan precioso como tú.

Esto me descolocó un poco pero no me dió más tiempo a pensar, de pronto Giorgio me plantó un beso en los labios ante lo cual yo lo aparté y le dije que no podía, que tenia novio y que solo podríamos ser amigos.

- Vale, de acuerdo, no pretendía ser grosero contigo- No lo has sido simplemente ha sido un error que ya está olvidado.

Caminamos por el parque, Giorgio me dice que se llama Parque Sempione y que el arco fue construido con motivo de la llegada de Napoleon a la ciudad, me doy cuenta de que Giorgio no es un chico sin cerebro y que le gusta la cultura.

-¿Nos sentamos en el cesped? debes de estar cansado- Me dice Giorgio; es tan considerado conmigo

Nos sentamos y Giorgio me habla de su familia, sus padres lo adoptaron cuando solo tenia 2 años, tiene una hermana mayor que se llama Laura que si es hija biologica de sus padres, yo le hablo de mis padres, de mi hermana, de Toni, de todo en general.

Me tumbo para mirar las estrellas, Giorgio también lo hace y al momento empieza a llorar...


Alguien Como Yo [Gay]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora