-¿Me estás diciendo qué alguien te está haciendo cartas anónimas?
-¿Otra vez Brian?
-Perdón, perdón.
-En fin, ¿conoces la letra?
-Se me hace conocida...
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Toby pensaba, ¿cuántas cartas entregaría aquella persona hasta que supiera su nombre? Le había quedado claro que le quería, pero, ¿algún día sabría su tan secreta identidad? Esperaba que sí. Ahora que lo pensaba, sólo lo sabía Hoodie, tal vez se lo tendría que decir a Cody. Tocó tres veces.
—¿Quién es?
—Soy yo, Cody —contestó Tobías.
—Ah, vale. Entra —abrió la puerta.
—Te quería contar algo —habló el castaño sentándose la cama de su compañero tras cerrar la puerta de la habitación.
—Soy todo oídos.
—Verás, hace un tiempo alguien me manda cartas o poemas de... —No sabía terminar bien la oración.
—¿De...?
—¿Amor? —Si no lo sabía él, ¿quién lo iba a saber? Quizás Hoodie.
—Esa no me la esperaba, ¿alguién más lo sabe?
—Hoodie —El chico contrario se sonrojó al escuchar el nombre del rubio.
—O-Oh, ¿cuánto tiempo llevas recibiendo cartas? —Se subió su máscara de gas.
—No demasiado, esta es la sexta—mencionó dándole al castaño de ojos verdes la carta que recibió el día anterior.
—Wow... Espera, ¿¡te has besado con él!?
—Ehh, s-sí.
—¿¡Sin verle la cara!? —Tobías asintió—Dios, ¿al menos sabes describir el sabor de su boca?
—Sabía a cigarrillos y a alcohol, sus manos eran ásperas y parecía de estatura alta.
—Ajam, bueno, Jeff sería incapaz de escribir tales cursileadas, Scolinex viene aquí menos que Dina. ¿Hoodie y Masky? —miró con sorpresa a Toby.
—Ni en broma—Iluso.
—No los descartes, dices que el primero en saberlo fue Hoodie, ellos hacen un buen dúo.
—P-pero... ¿No hay nadie más? —dijo, aún con un poco de esperanza.
—Jack no bebe alcohol, quizá Hunter.
—¿Cat Hunter? No creo, sus manos no son tan ásperas.
—Parece que quieres que sea Masky o Hoodie, eh. —contestó X-Virus.
—Creo que está bien por hoy.
—Vale, ¿tienes más cartas?
—Sí, ¿te las traigo?
—Mejor—finalizó la conversación.
Así, Toby le trajo la caja y Cody se la quedó observando las cartas.
