ᛝ𝗥𝗘𝗩𝗘𝗡𝗚𝗘━━ 𝙳𝚊𝚟𝚎𝚗𝚙𝚘𝚛𝚝

【𝖣𝖨𝖤𝖹】

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▸ Capítulo diez ꧁LAS ROSAS TAMBIÉN LASTIMAN꧂

CUANDO ANNABETH TENÍA ONCE, FUE LLEVADA A UN INTERNADO. Donde igual van niños con habilidades como ella, la pequeña niña veía el gigantesco lugar que les recomendó Alec ya que después de Spikebeth tuvo que abandonar aquella escuela.

—No creo que sea necesario que me quede, puedo controlarme. Y el collar me ayudará bastante–pidió Annabeth viendo a sus padres.

—Ya hablamos de esto. Alec nos contó que este lugar es muy seguro–dijo Beatrix viéndola.

—Pero yo estoy segura con ustedes, no me pueden dejar aquí–dijo con los ojos cristalizados dirigiendo su vista hacia Chase.

—Ah... yo–el biónico no se podía contener con aquella mirada que le daba su hija–. Si creo que es mejor que lo pensemos.

—Annie–Beatrix tomó de la mano a su hija y se puso a su altura para verla de frente. La pequeña seguía con la misma expresión pero la pelirroja sonrió–. Sabes que la manipulación no funciona conmigo.

Annabeth dejó su cara triste por una de frustración.

—¿Y bien? ¿Pasamos a firmar?–salió la directora de su oficina viéndolos con una sonrisa. Chase le pidió que los esperara unos minutos por lo que la mujer asintió dejándolos solos.

—Annie, recuerda lo que hablamos. Tú estarás segura en este internado–comentó Beatrix frente a ella.

—¿Segura de qué? ¿Por qué no quieren decirme?–vió a ambos queriendo una explicación.

—Es complicado, prometemos que te lo diremos–habló Chase–. Pero aún no es el momento.

Beatrix y Chase no le querían decir a su hija que corre peligro cuando seguro todos los villanos que conocen Kaz, Oliver y Skylar. La están buscando, y aunque no saben el por qué, no se arriesgarían en que alguno la encuentre.