Las cosas que nunca dije.

14

Me desperté con un dolor de cabeza inmenso.  Intenté abrir los ojos varias veces pero fue imposible,  me pesaba hasta el alma.

Sentía un peso enorme encima

¿Andrea?

En efecto la antes nombrada estaba acostada encima de mi con razón me dolía todo.

Me intente mover sin despertarla pero fue imposible pesaba demasiado.

Miré todo el lugar era su casa .

Cuando giré mi rostro

—¡¡¡AAAAAAAAAH!!!—pegue un grito sobre humano. A lo que Andrea se levantó asustada

—¡¡¡¡Que pasó!!!!!—su puto gato estaba acostado con nosotros, a mi LADO!.

Ella lo sacó luego de casi convulsionar de la risa por mi cara de horror indicándome que tomara un baño y que bajara a desayunar.

No se que tenia exactamente con Andrea pero me gustaba tanto pasar tiempo con ella , me trataba tan bien , creo que ha sido la persona que con tan pocos detalles a hecho que me sienta tan bien como nunca en la vida me había sentido .

Me di una ducha rápida y bajé , el desayuno ya estaba en la mesa acompañado de una hermosa mujer que me miraba con una gran sonrisa.

Luego de desayunar Andrea me llevó a casa justo antes de que llegara mi madre y se lo agradecí tanto. Esa mujer se pone un poco histérica y más sabiendo que me quedé en casa de mi profesora.

Justin estaba dormido en el sofá la casa era un desastre por lo que de dos patadas lo levanté mintiendole con que mamá llegaría en una hora a lo que el se levantó al instante y se puso a ordenar .

Es increíble lo que puede ocasionar el miedo .

Subí a mi habitación sin ganas de mucho me acosté y en menos de lo que pensé ya me había quedado dormida .

•••

Era martes , plenas diez de la mañana , un profesor de Álgebra trazaba líneas en la pizarra mientras dictaba un enunciado.

Mis bostezos eran evidentes , y más cuando lo único que se sentía en aquel salón era los lápices de mis compañeros apoyados en sus libretas .

—Alicia pistt no te duermas—me decía mi compañera de mesa. Pero los ojos me pesaban y mi cuerpo era consiente de ello.

En un abrir y cerrar de ojos , tenía la cabeza sobre la mesa y un puntero puesto en el hombro. 

Miré asustada hacia arriba y ahí estaba el profesor mirándome con mala cara .

—Joven si no le interesa mi clase puede salir sin ningún problema—hice mías sus palabras y recogí mis cosas , mis compañeros me miraban sorprendidos pero el sueño que tenia era mayor que la vergüenza que sentía por semejante regaño .

Caminé sin rumbos por los pasillos de la universidad hasta llegar al campus , estaba desolado perfecto para descansar , subí las gradas y me acosté en el escalón más alto.

•••

No se cuanto tiempo estuve ahi solo se que cuando abrí mis ojos pasaban más de las dos de la tarde , asustada revisé que todas mis cosas estuviesen en su lugar y salí de las gradas .

—Alicia ,¿donde estabas? te he buscado toda la mañana. —la voz de Andrea me sacó de mi trance.

—disculpa me dormí en las gradas—ella me miró sonriendo y negando se vía tan linda .

—necesito hablar contigo ¿ me acompañas a mi despacho?— y así lo hice caminé detrás de ella sin decir una palabra me ponía nerviosa solo de mirarla .

Contrólate Alicia.

Estando en su despacho cerró la puerta con seguro y sin decir una palabra comenzó a besarme a lo que yo le continúe el beso extrañaba ese contacto.

Siempre que teníamos tiempo libre nos encerrabamos en su despacho , ya se nos había hecho costumbre.

Entre besos y caricias se me escapó un leve gemido a lo que ella respondió apretando mi trasero . Ocasionando otro consigo .

—me gustas mucho Andrea—y así sin pensarlo salieron esas palabras que tantas veces dije en mi mente pero jamás en voz alta .

Ella paró de besarme , me miró a los ojos y negó con su cabeza .

—no puedes enamorarte de mi Alicia—no se si fueron el peso de sus palabras pero senti que me había tirado de un avión sin paracaídas y me faltaban dos metros para llegar al suelo.

—¿porque?—le pregunté alejándome un poco de ella

—no soy la persona indicada para eso—dos centímetros antes de chocar con el suelo .

—¿que te hace pensar eso?—la reté

—soy consiente de lo que soy de lo que siento y lo que me haces sentir pero soy tu profesora Alicia,  y no creo que este bien que te enamores de mi , soy mayor que tu , ¿que pensaran tus amigos tu madre?—listo había aterrizado ya , definitivamente un choque demasiado duro.

—¿desde cuando te importa el que dirán? , estoy consciente de que eres mayor que yo pero tampoco es tanto y si lo se eres mi profesora pero estamos en la universidad eso es permitido—ella me miró con tristeza y yo , yo no sabía que hacer.

—no quiero hacerte daño lo último que quiero es verte triste.

—no lo verás , me gusta la nada que tenemos,  ese casi algo que me da miedo  que se quede en nada , estoy dispuesta a sufrirlo solamente por no quedarme con las ganas de saber que hubiese pasado , no quiero culparme en un futuro por no haber sido lo suficientemente valiente como para vivirlo y si créeme que estoy dispuesta a correr el riesgo de ser lastimada.

—me sentiré mal

—solo dime cuando quieras pararlo y así lo haremos .

—no quiero ser la causante de tu tristeza,  no soy la persona que tu te has idealizado .

—lo se , y no me importa,  destruyeme lo que quieras así podré comprender porque los huracanes tienen nombres de personas. —sabía que le gustaba pero el miedo la detenía a dar de más, a ser completamente ella. Estaba dispuesta a sufrir si era necesario. Pero jamás me quedaría con las ganas de descubir lo que podía haber pasado entre nosotras.

"El dibalo te ofrece el plato más no te obliga a comer"

Recordando una frase que me salió esta mañana en mi Facebook me coloqué mi mochila para salir de su despacho dando por finalizada nuestra pequeña conversación.

—Alicia espera—dos toques en la puerta junto a una voz tediosa sonaron al otro lado de su despacho a lo que ella abrió dejando pasar a la persona dueña de estos.

Era la profesora de Arte , una mujer joven y hermosa,  la envidia de muchos aquí.  La miré con mala cara y sali de ese pequeño espacio si tocaba la puerta así no quiero imaginar lo que quería hacer dentro .

Pensando mil cosas y sintiéndome  mal salí rumbo a la parada del autobús definitivamente necesito dormir más de dos años y despertar el día de mi funeral.