ᑌᑎᗯᗩᑎTᗴᗪ [Regulus Black]

15. Goodbye Hogwarts

Los exámenes habían terminado, cierto grupo de Slytherin solo esperaban los resultados y que el curso terminará oficialmente, lo que significaba que iniciarían con verdaderas misiones como los mortifagos que eran.

También significaba que faltaba poco para que el bebé de Regulus y Layla naciera, lo que sería una buena excusa para que la rubia no tuviera que tomar la marca y participar en las misiones, en las que todos eran concientes, podían morir si llegaban a aparecer los Aurores o la Orden del Fénix.

Aún así, ellos creían que ese era el camino correcto, y que la visión que tuvo Grindelwald hace años, no era tan errónea.

Layla, al ser prefecta de su casa, era la encargada de entregar los resultados del curso a los de séptimo año, un trabajo que su jefe de casa le encomendaba por la confianza que le tenía a la chica Black.

-Chicos- la rubia se acercó a sus amigos, que estaban en los sillones de la sala comun- Aquí están los resultados del año.

La chica les entrego un pergamino a cada uno, donde venían sus resultados.

-¿Y de casualidad no tendrás los resultados de los Extasis?- Matheo pregunto con burla, esa era su forma de molestar a la chica.

-¿Y para que quieres saber tus resultados?- la rubia enarcó una ceja- Si todos sabemos que no los pasarás ni porque Rodolphus soborne al ministerio de magia.

Todo el grupo estalló en risas, mientras que el menor de los Lestrange rodaba los ojos y le daba una sonrisa falsa a la pequeña Black.

-Pronto terminará el curso y nos tendremos que casar...

Ese tema era algo que no le agradaba a los chicos.

-Suerte que Layla y Regulus se casaron entre ellos- Hardin los observo- Así no tendrán que ser infelices para toda la vida.

-Mientras siga la guerra, no tendrán suficiente tiempo para pensar en los matrimonios arreglados a los que somos sometidos.

La rubia comento, sentándose en medio de los hermanos Jones.

-Pero mientras nuestros padres quieran nietos, eso será imposible.

Evan tenía toda la razón, los patriarcas de las familias sangre pura, siempre buscaban tener seguro su legado, por lo que siempre obligaban a sus hijos a darles nietos a los que podrían heredar toda su fortuna y el nombre de su familia, todos excepto los Jones, ya que su padre había muerto hace más de dos años, pero aún así sentían esa necesidad por enorgullecer a su padre.

El grupo solo dejo escapar un suspiro, antes de abrir los pergaminos y ver sus resultados.

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La ceremonia de graduación estaba por iniciar, Layla estaba en su habitacion, mentalizandose que tenia que dar una buena imagen ante la presencia de sus padres en el colegio, no es como si quisiera hacerlo,pero era una orden de Narcissa, especificada en la carta que le había mandado unos días antes.

La rubia mayor también asistirá a la ceremonia, pero Bellatrix no, la mayor de las Black ya era catalogada como una criminal, así que ninguno de los Lestrange asistirá.

Muchos creían que al no tener la presencia de los Lestrange, Matheo estaría solo, pero no era verdad, la madre de Alaric y Hardin no solo estaria ahí por sus hijos mellizos, tambien iria por Matheo, ya que el chico se había ganado su cariño, aunque fuera igual que sus hermanos con respecto a la pureza de la sangre.

Todos los Slytherin de último año se estaban reuniendo en su sala común por indicación de su jefe de casa, este los iria a buscar cuando fuera hora para llevarlos al Gran Comedor, donde seria la ceremonia.

La rubia se acerco a donde estaban sus amigos, pronto iniciaría su tortura, pero debían disimular, como siempre los hacía, en especial los Black, ya que tenian suficiente con la traición de Sirius y Andromeda años atras.

La puerta de la sala común se abrió, dejando ver al profesor de pociones con una enorme sonrisa.

-Muy bien chicos- el profesor se paró en medio de la sala- La hora ha llegado.

Todos se colocaron correctamente sus túnicas antes de salir de la sala comun, despues, como era común verlos, todos los estudiantes se dirigieron al Gran Comedor en grupos, como solían juntarse.

Al entrar al comedor, los integrantes de las otras tres casas ya estaban en el comedor, en sus respectivas mesas donde solian cenar, solo faltaban las serpientes, que no tardaron en tomar asiento y prestar atencion en las palabras que decia el director.

Layla estaba sumida en sus pensamientos, ignorando a todos a su alrededor, o era así hasta que las palabras que estaba pronunciando el viejo director llamo si atención.

-Y como sabrán, el mundo está siendo cada vez más peligroso -todo el mundo quedó en silencio- Así que solo puedo pedirles jóvenes, que tenga cuidado una vez se retiren del castillo- Dumbledore poso su mirada en la mesa de Slytherin- Y recuerden que la ayuda siempre será brindada en Hogwarts a quien la necesite.

Tras esas últimas palabras el comedor estalló en aplausos por parte de todo mundo, excepto las serpientes y sus familiares presentes. Dando cierre a una etapa en la chica Black, donde si pudo ser feliz por un tiempo.