Pijamada.

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CAPÍTULO II:Pijamada.

Se encontraba de pies frente al auto de su padre

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Se encontraba de pies frente al auto de su padre.

-Bueno Selene, ya sabes, nada de desastres y se duermen temprano, que mañana es día de padre e hijo. -Río levemente por las palabras de su progenitor.

-Claro, tranquilo papá. -Calmo a el mayor quien le sonrió de vuelta, arrancando el auto y se marchó, al ver que se habia ido corrío a su casa a ponerse el pijama. Tomó un plato ondo y undio las palomitas en el mientras lo colocaba junto a las otra botanas.

La puerta fue tocada, se acercó a el oyó de la puerta revisando de quien se trataba encontrándose con un ojo azulejo de Ío quien hizo caras chistosas frente a la lupita, río por sus restos tan graciosos. Al abrir la puerta se le abalanzó encima con su mameluco de elefante mientras Calisto lo miraba algo avergonzada con una pijama normal.

-¿¡Y que pelicula Vamos a ver!? -Pregunto el rubio quien se sentó en el sofá personal mientras tomaba del plato y le daba un mordisco a el puño de palomitas.

-¿Disculpa? ¡Ya te había dicho que Vamos a intentar una receta que me encontre en el canal 34! -Mencionó la fémina llendo a la cocina, Luna río mientras Ío bufaba en negación siguiendo resignado a la chica.

Era una receta simple (Al menos para Selene) quien se encargó de preparar la mezcla y amasar la masa, Ío y Calisto se encargaron de acomodar las futuras galletas en un molde y mandarlas al horno. Reían y se aventaban palomitas mientras miraban la película E.T, un clásico de los 80's.

-¡H-Hay q-que intentar hacer e-eso! -Dio la idea Ío al ver aquella escena tan icónica de una bicicleta en los cielos.

-¡No seas idiota! -Reprochó la mayor algo irritada, el sonido de la alarma hizo que los presentes dejaran de hablar, los tres se dirigieron a la cocina, abrieron paso al chef principal, este río un poco pues siempre hacían lo mismo. Tomó la parte de arriba del horno, al abrirlo el olor a gengibre recién horneado les llegó a sus sentidos del olfato; se colocó los guantes mientras tomaba la plancha en donde acomodaron las galletas, tenían forma de muñecos de nieve y copos de nieve, ambos se acercaron para decorar las galletas, sin embargo el azabaches los detuvo quitándoles el merengue -¿Ahora que? -Pregunto la de trenzas intrigada.

-Ustedes se van a encargar de recoger la Sala, yo voy a decorar las galletas. -Respondió apuntando con su pulgar, ambos individuos hicieron un pequeño berrinche.

Papá soltero //Solarballs//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora