Mi rayito de esperanza // 𝙾𝚖𝚎𝚐𝚊𝚟𝚎𝚛𝚜𝚎

💌 14 𝐷𝑒 𝐹𝑒𝑏𝑟𝑒𝑟𝑜 // 𝑆𝑎𝑛 𝑉𝑎𝑙𝑒𝑛𝑡𝑖𝑛 💌

{ 𝐻𝑢𝑛𝑡𝑒𝑟 }

Luego de todo lo que tuve que pasar, por fin era mi momento de redimirme, por fin podía ser feliz junto al chico que me gusta, por fin estaba lejos de todo el maltrato, el dolor y el sufrimiento del pasado. Belos fué condenado a petrificación y la sentencia fue realizada el mismo día apenas lo capturaron, mejor no pudo haber resultado. Edric estuvo raro horas más tarde, se le veía perdido y fuera de sí, y eso me asustó, no quería que nada malo pasase a partir de ahora. Luego me explicó esa mamada de la monarquía y los herederos al trono y bla, bla, bla.

Para suerte de todos, días más tarde recibimos una carta de un tal señor Philipp, un supuesto hermano de Belos que venía a ser algo así como otro tío mio. La carta explicaba que se había enterado a través de los pergaminos que Belos, su hermano, fue condenado a "muerte" y que estaba totalmente enojado y molesto cuando se enteró de mí, de como me trataba y de todas las atrocidades que cometió en vida. Literalmente se soltó llorando a mis pies en cuanto me vió, pidiéndome perdón por no haber estado allí antes para ayudarme. Dijo que tuvo muchos problemas en otro lugar y estuvo un tiempo en prisión y que por eso estuvo casualmente 12 años fuera de las Islas Hirvientes.

Gracias a su repentina aparición yo quedaba absuelto de cualquier cargo político o algo así me explicaron. Yo estuve tenso y perdido en todo momento, me dedicaba a asentir pese a no entender un carajo de lo que me explicaban, pero Edric estuvo a mi lado a todo momento, tomando mi mano y acariciandola para tranquilizarme, no pude estar más satisfecho por ello. Cuando toda la odisea término, me fui a vivir con Luz, ella me dió el hogar que siempre quise tener en la casa búho, es estúpido que me halla soltado a llorar a moco suelto sin el ex Golden Guard, pero estaba muy feliz y no lo podía evitar.

Seguí asistiendo a la escuela y teniendo pequeñas salidas con Edric, justo como está. Hoy era 14 de febrero según el calendario del celular de Luz, según ella, era el día del amor y la amistad, en donde las parejas salían y compartían entre ellos o con amigos, una celebración humana bastante agradable, la humana y Edric me obligaron a cambiarme a algo más informal en lo que salí de la escuela, y apenas llegué a la casa, asaltaron mi armario en busca de algo decente que ponerme, luego fuí arrastrado por mi gemelo favorito a no se donde.

Estábamos sentados juntos sobre una gran roca en una gran colina, agarrados de la mano en un reconfortante silencio, mirábamos tranquilos el cielo que se iluminaba en tonos rojos, amarillos y anaranjados, las primeras estrellas amenazaban con salir y la hermosa luna estaba llena, completa, como me sentía en este momento.

— No creerás que solo vinimos hasta aquí para mirar el cielo — Dijo Edric luego de minutos de cómodo silencio —, osea si, pero yo... Uhm.. Quería preguntarte algo..

— Bien... Se que no vinimos solo a ver el cielo, pregunta lo que quieras.

Edric se relamio los labios nervioso con un creciente sonrojo en sus pálidas mejillas, se veía adorable, no pude evitar sonreír y acariciar su manos por debajo, no era muy común que se pusiese nervioso.

— Y-yo te quería pedir que... Yo..

Se notaba inseguro, por lo que me gire hacia el dándole la cara, le di una cálida sonrisa de boca cerrada y solté mis feromonas (que estaba aprendiendo a utilizar gracias a Luz), calmandolo, el suspiro y me miro decidido, me pregunto qué querrá esta vez.

— Quiero que tu y yo.. Uhm.. Quiero que tu, Hunter, oficialmente seas mi pareja, novio o como quiera que le digas..

El aparto la mirada avergonzado, yo me quedé estático por un segundo... Esa era la maldita pregunta que había estado esperando desde que salimos de toda esta mala experiencia. Él volteó hacia mi al notar mi silencio. Estoy seguro de que yo estaba completamente rojo. Sin más me abalance a el y fundi nuestros labios en un cálido beso al cual el no se negó ni se tardo en responder, cuando nos separamos nos quedamos viendo a los ojos por varios segundo, no se necesitaron palabras para leer el contexto.