3

255 15 5
                                    

ADVERTENCIA⚠ : ABUSO, si no es de tu agrado puedes saltarte: (€) donde empieza y (£) donde termina, cabe aclarar que no disfrute escribirlo y mucho menos reescribirlo... 😫🖐

•••

Hunter estaba regresando con ayuda de Flapjack al castillo como siempre lo hacía, se imaginarán lo rojo que estaba en ese momento.. ¿Qué había hecho?.. tenía las feromonas de aquel Alpha encima suyo marcando territorio que ni siquiera era suyo.. las feromonas del Alpha... Ay no..

(...)


Al llegar al castillo quizo ir a su cuarto a encerrarse y pensar que mergas había hecho para luego llorar y dormir abrazando a alguna almohada o bailar con Flapjack por su logro, realmente le iba agrandando más y más la idea de salír con Edric, aunque no estaba totalmente convencido. Pero sus hermosos sueños y esperanzas se esfumaron tan rápido como llegaron cuando escuchó la odiosa voz de Kikimora llamarlo y decirle de mala manera que el Emperador Belos lo esperaba en la sala del trono como siempre, el odio en sus palabras no hicieron falta, ya se estaban acostumbrando ambos a hablarse con veneno peligroso..

• • •

Al tocar las puertas recibió la orden para entrar, cuando paso por aquella habitación pudo ver a su "tío" (el cual nunca probó que lo era), levantandose de su imponente trono, tenía una cara neutra, pero cuando más se acercaba sus cejas se fruncian cada vez más, mentiría si dijera que estaba bien, sentía un terror descomunal crecer en su interior, sabía lo que seguía, después de todo, casi siempre lo llamaba para "eso", aunque tenía la esperanza de que esta vez no fuese así, pero aún le aterraba de sobre manera..

Pensaba que con la escuela se detendría un poco y le dejaría tiempo para estudiar y relajarse, pero estaba viviendo en una burbuja de mentiras.. El Emperador lo tomó del hombro como lo hacía siempre que lo " saludaba", pero esta vez no lo empujó al suelo, sino que empezó a hablar. Algo no se sentía bien..

—Y bien Hunter... Cuéntame como te ha ido en la escuela estos últimos días, ¿La gente te trata bien?, ¿Sigues estudiando aquí en casa?.. — Pronunció en voz alta, que no denotaba ningún sentimiento.

Derrepente soltó tantas preguntas cómo le vinieron a la mente, ni siquiera le daba tiempo de responder a una porque ya le escupía otra, Hunter trato de calmarse un poco y hablar con normalidad para responder alguna que otra pregunta.

— Muy bien señor, gracias por su preocupación, la gente es amable y no he tenido problemas.. — Dijo indiferente, pero igual con miedo disimulado.

Realmente le tenía asco a ese sujeto, si no fuera porque es su tío legalmente y porque le tenía un mínimo de aprecio, lo habría demandado hace mucho tiempo.

— Ya veo.. Me da gusto que te vaya tan bien y que todos te traten bien... Pero la escuela toma mucho de tu tiempo, y... Ya no tenemos mucho tiempo "juntos"... — Vocifero el rubio mayor con frustración.

El Omega hizo lo que pudo para retener las ganas de vomitar por el comentario, le daba asco estar siquiera cerca de este sujeto, ¿Cómo podía siquiera recordarle aquello?. Sintió arcadas y su cuerpo sudo frío, más no dijo nada y se quedó quieto, luciendo indiferente aunque se estuviese muriendo de miedo por dentro.

Hunter tembló levemente por el miedo que tenía retenido, un escalofrío recorrió su columna vertebral al escuchar esas palabras... Tenía los nervios a flor de piel y no podía evitar el rumbo al cual se estaba llendo esta conversación. Belos quería follarselo una última vez para que todo el resto de su tiempo se fuera a la escuela, se creía bondadoso al pensar de esa manera, pero todos creían que era una escoria sacada dd un oscuro y desolado callejón en las profundidades del abismo infernal, y que no merecía la dicha de estar vivo siquiera, pero era el Emperador, nadie del pueblo se había atrevido a juzgarlo o algo peor, aún por miedo a ser encontrados muertos o petrificados.

Mi rayito de esperanza // 𝙾𝚖𝚎𝚐𝚊𝚟𝚎𝚛𝚜𝚎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora