Narra Coryo:
La vi entrando a su auto con una sonrisa, una sonrisa que me dio a mi, movió la mano despidiéndose de mi como lo hacían los niños y no fue hasta que el auto salio de mi vista que me di cuenta que yo estaba con la mano alzada, le había devuelto la despedida a alguien de los distritos.
Podía sentir el enojo y el arrepentimiento correr por mi ser, no entendía que me estaba pasando al olvidarme de todas las cosas que toda mi vida me habían enseñado, de seguro solo era que estaba distraído por el hambre.
Mientras caminaba a casa ahora sentía vergüenza, algo que nunca admitiría con nadie en voz alta por lo estúpido que eso me haría sonar, ¿Cómo era posible que alguien como yo, que un Snow se sintiera inferior a ese par de hermanos?, ahora si el mundo estaba de cabeza. A cada paso que daba solo recordaba como ellos se habían subido cómodamente a un auto, uno de lujo recien comprado, como todas sus cosas eran nuevas y que de seguro ellos no se tendrían que preocupar por que iban a comer, y aun asi no sabrian apreciar ninguna de esas cosas de la manera en que se debía.
Estaba enojado, al menos quería creer que lo estaba, ¿con que?, no lo se específicamente, quizá con ellos, quizá con el gobierno, quizá con mi mismo, quizá con los distritos, quizá con el mundo en general, las cosas no debian de estar siendo de esta manera, no habia manera de que en serio esto estuviera pasando.
Al llegar a casa lo único que deseaba hacer era olvidarme de todo, principalmente de ella, creí que sería fácil, lo había estado consiguiendo al menos en parte, el olor a rosas no me habia dejado en todo el dia, hasta que Tigris me saludo y se quedo mirándome unos segundos intrigada, le pregunte confundido si es que algo pasaba y ella negó aunque no quito la duda de su mirada.
_¿Algo sucedió hoy Coryo?_ me pregunto directa a lo que negué, no era relevante, al menos de eso me trataba de convencer, ella suspiro sabiendo que le había mentido_ algo pasó, te ves diferente, no en un mal sentido, estas como cuando recuerdas algo lindo_ explicó su punto no queriendo darle mucha importancia, para mi lo había tenido y por la sonrisa que ella tenia sabia que le habia agradado el cambio, que estaba agradecida por lo que fuera que lo hubiera causado.
No sabía que era lo que mi prima había visto diferente en mi hoy, le pregunte pero no supo decirme específicamente que era, solo decía que me veía diferente, que era una suma de muchas cosas. Al menos sabia a que se refería al decir que estaba como cuando recordaba algo lindo, por lindo se refería a mi madre, ella siempre mencionaba cuando la mínima cosa, la más insignificante inconscientemente me recordaba a mi madre, decía que eso me hacía brillar por mas que yo no lo notara, nunca he entendido exactamente que significa que brille pero lleva años usandolo para describirme.
El olor potente a rosas de la Plinth me había recordado a mi madre, negué con mi cabeza para ignorar las dudas que me comenzaban a surgir sobre si realmente era lo único en ella que me recordaba a mi madre y de como era posible que ella siendo de distrito pudiera oler tan bien, aunque no podía negar que su aroma me había atraído. Trate de convencerme que no era por ella, que era por la conexión que ese aroma tenía a mi madre, era la única explicación lógica a porque había tenido tanto interés hacia ella y a pesar de eso, internamente me regañaba por estar comparando a alguien de su rango con mi madre, no habia forma de que fueran remotamente iguales o si quiera parecidas.
Con cada segundo mas que la del distrito dos permanecia en mi cabeza solo me hacia darme cuenta del gran peligro que era que los dejaran estar entre nosotros, su imagen, su forma de ser no era como la de nadie que hubiera conocido antes, ella no pertenecia aqui, todo en ella era anormal, no tenia razon de ser en un lugar como este, el capitolio no era para ella, no encajaba y nunca lo haria.
Esos risos que a diferencia de los de las chicas del capitolio no estaban bien acomodados y simetricos, su cabello se acomoda de la manera mas rara posible, la hacia ver casi como si tuviera las ondas del viento como cabello, como si este la peinara. Oh y sus ojos, sus malditos ojos simplemente eran orbes negras sin fin, como si escondiera miles de cosas que no dejaria que nadie viera jamas
Y luego estaba lo peor de ella, su personalidad, en un momento lucia como alguien dulce y alegre, en otro era tranquila e implausibe y despues parecia ser arrogante, soberbia y hasta cierto punto parecia irritada, frustrada con su alrededor, no habia manera en que pudiera decir una sola palabra para describirla, no habria palabra que encasillara todas las contradicciones que ella representaba.
Estaba en mi cuarto cada vez mas frustrado, no salian de mi cabeza, regresando de a ratos su imagen sonriente en aquel carro, me recoste mirando al techo preguntandome como es que ellos estarian, si tendrian comida caliente y si tendrian suficiente comida como para llenarse aun asi teniendo sobras, si estarian felices riendo en un lugar calido, lleno de cosas lujosa que no iban para nada con ellos y que no sabrian apreciar en lo absoluto, si es que ellos se merecian lo que tenian.
La mayor de mis dudas llegaba a mirar al rededor, los Plith eran del distrito dos, el unico de los distritos que se habia "aliado" con el capitolio, en teoria habian sido los menos afectados por la guerra, al menos eso se decia entre las voces de los soldados que habian regresado. Las teorias de como es que habian estado ellos antes de llegar aqui, si es que estaban peor y en el caso de que si porque el hermano de Rose parecia odiar tanto el haber salido de ahi, yo admitia que el capitolio no necesariamente implicaba una vida perfecta pero la guerra estallo ya que los distritos querian algo mejor.
De alguna manera ellos debieron de haber conseguido suficiente poder, suficiente dinero propio como para pagar por dejar de ser de los distritos, para que le conveniera al gobierno permitir tal sacrilegio, para aquello probablemente habian tenido que traicionar a su propia gente, me preguntaba si siquiera les habia afectado el hacerlo, como es que lo habian conseguido, porque cosas como esas no llegaban sin dar algo a cambio, me preguntaba cual habia sido el precio y si es que creian que habia valido la pena, si es que aun tendrian cosas que pagar.
Al final del dia tuve que confesarle a Tigris que era lo que me sucedia, porque lucia tan pertubado, me confronto cuando fui a ver si es que habia podido coser el boton de una de mis camisas sin que se notara que era un poco diferente al resto, su mirada preocupada habia conseguido convenserme de hablar con ella, no me gustaba verla estresada por algo que no valia la pensa. Siempre era tan buena prima buscando que estuviera lo mejor que podiamos.
Despues de asegurarme de que abuelatriz no estuviera lo suficientemnte cerca como para escucharnos comence a decirle lo que habia sucedido en el dia, la abuela no soportaria que alguien como ellos estuviera cerca de nosotros, se volveria mas loca de pensar que los dejaron estar en el capitolio, de lo que tienen cuando nosotros la pasamos mal.
_La guerra no es facil para nadie Coryo, mucho menos el tener que dejar toda tu vida atras por mas que sea a un mejor lugar, nada es gratis primo, no creo que sus vidas sean todo felicidad, dales una oportunidad, mejor que nadie sabes que ninguno sabe lo mal que lo pasa otra persona, quiza te sorprendan, ellos van a necesitar un apoyo si quieren vivir en paz aqui y la compañia no te haria mal_ ella comenzo a decirme en ese tono dulce en el que siemple hablaba.
Sabia a los puntos a los que queria llegar, la sociedad del capitolio no era totalmente de su agrado, no lo diria en voz alta pero sabia que ella detestaba como algunas personas hacian las cosas, a las espaldas, siendo hipocritas, estaba sugiriendo que quiza los Plith si eran personas verdaderas, honestas y de las que ella consideraba valia la pena tener cerca.
Le conteste lo que ella queria escuchar de mi, que iba a hacerle caso, al menos planeaba cumplir con una parte de esa petición, no los iba a tratar mal, en mi opinión no merecian ni siquiera un gramo de mi atención a diferencia de los demas que consideraban que el mejor uso de sus fuerzas era para odiarlos, era un desperdicio de tiempo y una estupidez tomarle tanta importancia a su exitencia como para que afectaran la mia de alguna forma.
No queria interesarme por ellos, no queria sentir pena por el hecho de que abandonaron su hogar, no eran los que la estaban pasando peor, muchos teniamos mas problemas mas serios como para que alguno se hiciera la victima.
Sentia a mi prima repitiendome sus palabras mientras llegaba al dia siguiente a la escuela, verlos llegar tan despreocupadamente con sus uniformes nuevos solo me hacia pensar que yo tenia razon, al menos hasta que Rose me vio a lo lejos, me sonrio dulcemente y movio su mano en forma de saludo, no pude evitar quedarme observando como caminaba del brazo de su hermano, antes de que pudiera fingir no haberla visto ella ya estaba en el salon, me maldije a mi mismo notando que a pesar de todo ignorarlos no era algo que pudiera hacer.
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Snow always leans on Rose (Corolanius Snow X Tu)
ФанфикSnow amo las rosas desde que era un niño, el olor que siempre tenia su madre, que su padre siempre tenia una en su traje, que abuelatriz las cultivaba, todo siempre le enseño a apreciar a las rosas. Eso hasta que llego a su vida Rose, ella era perfe...