grwm: flaite culiao

09. me tiene loco weon

derek.

me quedé encerrado en esta caga de liceo con la fernanda, por la chucha.

había actuado más buena onda con ella las últimas horas por la wea que pasó con la polett y esas minas, pero estaba un poco molesto con ella.

¿sale conmigo y después su ex le grita "te amo"? ¿qué es esa wea?

por lo menos ahora tendría tiempo para hablar con ella de eso.

—oye feña, no tiene caso.—rodé los ojos, ella estaba intentando buscar un lugar donde salir.—no vai a encontrar una salida.

—¡pero mañana es feriado! el colegio culiao estará cerrado.

—ya oye, no te estreses.—me paré, estaba en el suelo.—las cámaras no funcionan en ninguna parte, y las puertas no tienen llave. podemos hacer la wea que queramos.

ojalá comernos.

basta, estoy enojado.

—es verdad, me podría ir a dar una ducha a los camerinos.

¿puedo ir contigo?

—ya, anda. te hace falta igual, cochina.

—muérete weon.—me dijo eso y se fue.

que simpática, me enamora.

partí a mi sala para buscar mis cosas, yo siempre traía en la mochila culia más comida que la chucha porque igual trataba de vender unas cositas.

supongo que hoy tomaremos de once galletitas morocha y una leche en caja.

banquete.

también fui a su sala para buscar sus cosas, supongo que las va a necesitar.

cuando entré a su sala casi grito del susto, conchetumare.

—byron culiao, ¿qué hacís aquí?

—hermanito, todo tiene su explicación.—se levantó rápido, el mismísimo estaba acostado en la mesa del profe tapado con caleta de chalecos.

—¿yaaa?

—los amigos del amiguito de tu mina me querían sacar la chucha, me dijeron que los viera afuera del liceo, así que me quedé acá y no salí nunca.—se pasó una mano por la nuca.

—que eri cobarde byron, me hubierai dicho.

—no te quería molestar oe, aparte...—frunció el ceño.—¿qué wea hacís acá tú?

—me quedé dormido en el rincón con pastito.—suspiré.—y la feña está conmigo.

el weon abrió los ojos súper grandes y se tapó la boca con las dos manos, exagerado.

—¡te la estai comiendo en nuestro lugar secreto!

—¡no me la estoy comiendo en nuestro lugar secreto!

—¡es NUESTRO lugar!—me dijo ofendidisimo.

—cállate byron culiao, si sabi que yo a ti te amo.—rodé los ojos.—pero quería mostrarle el lugar...

—ella es la otra.—me dijo digno.—yo soy el oficial.

—obvio mi amor.

—nunca me imaginé que tú andarías mariconeando por ahí.—los dos nos sobresaltamos por la voz de la feña.

puchis.

un novio menos una amiga más...

—oye, córtala.—la miré feo.—y toma tus weas.