Yes, Miss Kim | Chaesoo

Capítulo 2

Bla, bla, bla, evento de caridad, bla, bla, bla en Jeju...

Como siempre a esta hora de la mañana, leía desinteresadamente los informes que sus subordinados dejaban en su escritorio a finalizar el día.

Los ricos sólo piensan en eventos de caridad en Jeju, que básicos...

De pronto, vio unas manos pálidas dejar una caja su escritorio. Por instinto, alzó a vista para ver el rostro sonriente de Rosé quien dejaba un Ice americano en su escritorio. Ella nuevamente usaba una blusa de botones, una falda y su cabello con un semi recogido.

Se ve muy linda, pensó.

-¿Que haces?-le preguntó.

Rosé se aclaró la garganta y puso sus manos a los lados.

-Buenos días, señorita Kim.-saludó- Esperaba que empezáramos nuestro primera día oficial trabajando juntas con energía y ánimo.-dijo eso último agitando el puño en el aire.

Y tiene mucha energía.

Jisoo rió un poco, la verdad es que la chica le parecía divertida.

-Lo tomaré como un incentivo a ser más eficiente hoy.-Rosé sintió con fuerza- ¿Que tienes en la mano?
En ese momento, pudo ver como el rostro de la chica enrojecer de vergüenza mientras intentaba ocultar lo que tenía en la mano.

Jisoo se levantó y se puso frente a ella, con Rosé atrapada con el escritorio de su jefa en su espalda.

La mayor solo extendió su palma, y despues de hacer una mueca, Rosé puso unas figuras de origami en su mano. Dejando a Jisoo un poco desconcertada.

-Ayer le dije que hacía origami, así que pensé en regalarle unos para su escritorio.-ella suspiró- Pero de camino acá pensé que sería alto tonto y compre el café.

Inesperadamente Jisoo rodó los ojos riendo y colocando los animalitos de origami en su escritorio.

-Eres una persona creativa y con entusiasmo, solo te falta experiencia laboral y entenderás mejor este mundo de los adultos.

Poco a poco, Rosé pareció estar más relajada.

-¿Hablas de mundo de los adultos y sólo tienes unos 5 años más que yo?

-Pasan muchas cosas en 5 años.-habló la mayor.

Rosé asintió, estando de acuerdo y caminando hasta su escritorio.

-A pesar de ser joven también tengo muchas experiencias.-saltó Rosé.

Jisoo se sentó de nuevo en su escritorio, tomando de su ice americano.

-¿Laborales? Ya que ese debería ser nuestro tema de conversación más animado, señorita Park.

Rosé rió negando.

-Usted es un hueso duro de roer-y Jisoo estuvo apunto de escupir su café-. No debes olvidarte que la universidad también es difícil.

Jisoo se rió.

-No más difícil que depender de ti misma para mantenerte viva y además ayudar a tu familia-Rosé permaneció analítica-. Te aseguro que la universidad fue un pedazo de pastel para mi, pero ¿el año siguiente? Ese fue el verdadero choque de realidad.

Así fue como la más joven dejó caer sus hombros un poco.

-Seria genial que no pasaras por eso.-agregó Jisoo, haciendo que Rosé se irguera de nuevo, y asintiera con algo de vergüenza.

El resto del día transcurrió en un pequeño juego del que Jisoo no estaba muy orgullosa. Se había dado cuenta de un detalle muy importante: Rosé no dejaba de hablar. No es que dijera cosas tontas o sin importancia.