Capítulo 14

1.6K 183 9
                                    

JungKook POV

─Fui a la estética esta mañana, ¿lo notaste?─. Rosé, la chica de la universidad con la que salía, colocó un mechón de su cabello detrás de su oreja.

Era tan bonita y delicada como una muñeca de porcelana. Me encantaba.

─Sí, sí, claro. Tu cabello luce hermoso ─. Sostuve uno de sus cabellos dorados, pero ella se apartó con una expresión ofendida.

─¿Mi cabello? No le hice nada a mi cabello─. Chasqueó su lengua─. Dios, sabía que no lo notarías.

Abrí y cerré mi boca sin saber qué decir, cuando alguien se posicionó junto a nuestra mesa. Alto, guapo y muy, muy deslumbrante.

JiMin...

Esperen, ¿JiMin?

¿Qué hacía aquí?

─Oh. Jungkook, mi amigo, ¿eres tú? No te había visto entrar─. JiMin sonrió abiertamente.

Acaricié el interior de mi mejilla con la punta de mi lengua recordándome que mi madre me enseñó buenos modales.

─Deberías revisar tu vista. Tal vez tu ego gigante te dificulta la visión─Sonreí fingidamente.

Sí, mandé a la mierda los modales.

Rosé hundió su entrecejo confundida por mi comportamiento y en ese momento JiMin pareció reparar en ella.

─Oh, cielos, ¿pero como no te ví llegar a ti si eres la chica más hermosa que mis humildes ojos han tenido la dicha de ver? ─. JiMin me empujó y tomó asiento junto a mí.

Lo miré como si estuviera loco.

¿Qué estaba haciendo este pervertido? ¿No que era gay? ¿Por qué halagaba tanto a Rosé? Sin duda no me gustaba para nada.

Rosé le agradeció con un sonrojo cubriéndole las mejillas y es que JiMin si era más guapo que yo el hijo de puta.

─Oh, no puedo creerlo─. JiMin tomó delicadamente la pequeña mano de Rosé─. Tus uñas son una maravilla y combinan a la perfección con tus ojos.

─Las hice esta mañana de hecho ─. Rosé sonrió aún más.

─Sólo un tonto no lo notaría─. JiMin me miró y yo puse mis ojos en blanco.

─Gracias... ─. Rosé esperó por él.

─JiMin.

─Qué nombre tan elegante.

─Es gay─. Me metí en su conversación y Rosé abrió sus ojos.

─Bisexual─. Corrigió él con una sonrisa seductora.

─Bisexual con demasiada inclinación a los hombres.

─Sí, hasta que recuerdo que mi amigo Jungkook también es uno ─. Contraatacó pero suavizó su expresión con Rosé─. Pero tu belleza me mantiene en equilibrio.

Rose rió hechizada por JiMin y yo apreté mi puño sintiendo un malestar asentándose en mi estómago.

¿Celos? ¿Tan rápido sentía celos de Rosé? Pero si la conocí hace una semana.

¿Y a dónde irán después de aquí?

─Al cine─. Respondí cortante.

─Pues tú Rosé, te ves como alguien muy romántica, tu oufit lo dice todo ─JiMin señaló su bonito conjunto─. ¿Tal vez quieres algo de amor?

Rosé asintió frenéticamente, pero se quedó callada ante mi seriedad.

─Ya compré las entradas. Será de terror y punto.

─Por favor, el día está muy bonito y no creo que te hayas vestido tan preciosa para estar encerrada en una sala oscura, ¿verdad? ¿Qué te parece ir a una fiesta? ─. JiMin invitó con una alegría contagiosa─. Yo invito todo, los tragos, la comida, lo que quieran.

─¿Una fiesta? ¡Me encantaría! ─Rose sonrió mirando a JiMin como si fuera el hombre más maravilloso que pudo haber conocido.

Como si fuera un sueño cuando para mí no era más que una pesadilla.

─No iremos a ninguna fiesta.

─¡Por favor! ─. Rosé me suplicó.

─Suficiente─. Determiné y tomé a JiMin bruscamente del brazo para llevarlo arrastrado a los baños.

Probablemente Rosé no entendía ni mierda, pero no podía permitir que JiMin continúe con su absurdo juego.

─¿Qué mierda haces? ─. Interrogué a penas pusimos un pie adentro.

JiMin se hizo el inocente y sentí más deseos de golpearlo.

¿Cómo podía actuar tan descarado? Joder, quería hacerle tantas cosas.

─Sólo intento complacer a tu novia, ahora entiendo porque las relaciones te duran tan poco ─. Bufó.

─No te metas en mis asuntos, lo que hago fuera del departamento no te incumbe─. Lo empujé y conseguí que retroceda─. Déjame en paz.

─Sólo intento ayudar.

─¿Cómo? ¿Halagando a mi chica?

JiMin sonríe y vuelve a dar los pasos que retrocedió quedándose muy cerca, tan cerca que el calor de su cuerpo envolvía el mío.

─¿Así que es eso? ─. JiMin inclinó su cabeza, sus ojos fijos en mis labios como si delineara su forma─. ¿Estás celoso?

─No estoy celoso de ti ─. Apreté mis dientes.

─Pero yo no estaba hablando de mí.

En seguida me percaté de lo que había dicho y quise retractarme, pero claro, ya era demasiado tarde.

¡Mierda!

─S-solo déjame en paz─. Nuevamente lo empujé y me dirigí a la puerta.

─¡Hey, Jungkook! ─. JiMin me llamó y giré sobre mis pies en su dirección.

─¿Qué?

JiMin avanzó y me dijo:

─No eres el único que tiene celos.

Sin más, se marchó dejándome con más dudas que respuestas.

¿Qué quería decir?











boobs › jikook.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora