HOUSE OF BLACK || Theodore Nott fanfic!
"Ser una Black digna de su apellido"
Madelyn siempre tuvo esos pensamientos al saber que su padre, Sirius Black, traicionó el legado de la familia Black al irse con los Potter.
Secretos se esconden detrás del...
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[Marca Tenebrosa]
Quien diría que Madelyn recibiría la marca tenebrosa a sus 16 años, en su sexto año en Hogwarts.
Y su vida no podía ser más tétrica, con los mortifagos invadiendo la mansión y sobre todo porque el mismísimo Lord Voldemort también estaba en ella.
No lo habia visto, no hasta ahora.
Madelyn divisó a una mujer salir de la sala donde se encontraba Voldemort, tenía la vestimenta completamente negra y el cabello rizado y todo alborotado.
Bellatrix.
Una sonrisa burlona salió de los labios de Bellatrix cuando también vio a Madelyn. Se acercó a pasos lentos mirándola de pies a cabeza.
—Así que tú eres hija de... Sirius. —dijo Bellatrix haciendo una mueca al pronunciar el nombre de Sirius
—Bellatrix. —murmuro Madelyn mirándola de reojo.
—Debes sentirte muy honrada —continuó Bellatrix soltando una risa un poco escandalosa—. Al recibir la marca tenebrosa.
—Claro que lo estoy. —mintió Madelyn con expresión fría.
La puerta del salón fue abierta nuevamente, Draco salió de ahí, acompañado de Narcissa quien tenía una expresión decaída. Madelyn pudo ver los ojos de Draco, parecía que se había aguantado las ganas de llorar. Se veía cansado, preocupado y su hermosa sonrisa se había ido.
—Parece que ya es tu turno, querida. —le dijo Bellatrix cruzándose de brazos.
Madelyn no le respondió nada, comenzó a caminar directamente al salón entrando sin una pizca de miedo en su sangre. Al fin vería a Voldemort, ese Mago Tenebroso que no había hecho más que causar sufrimiento.
El salón estaba vacío, a excepción de una persona que estaba sentada en la cabecera de la larga mesa.
Ahí estaba él, más blanco que una calavera. Con la nariz tan aplastada como la de una serpiente, con pequeñas rajas en vez de orificios.
—Así que tú eres la famosa Madelyn Black. —dijo Voldemort con serpenteante voz mientras se levantaba.
—Sí, mi... señor. —Madelyn se odiaba a sí misma por pronunciar esas palabras, era tan convincente que Voldemort le mostró algo parecido a una sonrisa.
—Me complace tu presencia, Madelyn. Me alegra saber que quieras unirte a mí siguiendo los pasos de tu familia —dijo alegre—. Espero me seas tan fiel como Bellatrix.
—Le seré fiel, mi señor, incluso más que Bellatrix. —dijo Madelyn, Voldemort sonrió interesado.
La serpiente de Voldemort había comenzado a deslizarse muy cerca de Madelyn, la castaña miró por uno segundos sus pies cuando la gran serpiente pasó por encima de ellos.
