The Coincidence Line || Walker Scobell

ESTOY AQUÍ

— ¡Leah! Dios mío — dijo Maggie, echándose a correr y dejando las maletas caer contra el suelo del aeropuerto.

— ¡Maggie, Maggie, Maggie! No sabes cuanto te he echado de menos —

— Yo todavía más — respondió la morena, separándose del abrazo de Leah y empezando a caminar junto a ella para recuperar las maletas que había soltado.

— La ilusión que me hace que te hayan cogido... Es increíble — dijo Leah, mirando fijamente a su mejor amiga y con los ojos brillantes.

— Lo sé, a mi también, ahora llegan unos cuantos años de trabajo, ¿verdad? Pero estamos juntas, y estoy de vuelta en Estados Unidos para actuar —

— Estoy muy orgullosa de ti — exclamó Leah, volviendo a abrazar a Maggie.

Maggie Gómez. Actriz de 14 años. Había sido seleccionada para actuar en la segunda temporada de Percy Jackson and The Olympians.
Un mes antes había hecho las audiciones, y aunque hiciera ver que lo sabía, nunca podría haber llegado a pensar que la cogerían a ella. Es decir, Maggie era mundialmente reconocida gracias a sus dotes en la actuación, pero, para ser honesta, era casi imposible que se decidieran por una joven española.
Igualmente, eso ahora era en lo que menos pensaba, Maggie estaba de vuelta en Estados Unidos, actuando, que era la cosa que más amaba, y tenía a Leah, su mejor amiga, al lado.

— Estoy bastante nerviosa, conocer a todo el cast... Ya sabes — dijo Maggie, dejándose caer en la cama junto a Leah.

— Los vas a adorar. Además, podríamos decir que ya te conocen, les he hablado de ti en varias ocasiones — explicó la del pelo afro.

Maggie trazó una sonrisa de oreja a oreja en su cara y soltó un suspiro — Eso espero —

Llegaba el primer día de grabación. O más bien, día de acogida. Maggie no era la única nueva actriz que llegaba a los sets de Percy Jackson, había varios adolescentes más que habían conseguido papeles.
Por lo tanto, Rick había preparado un día solamente para aquellos nuevos y así pudieran conocer a sus compañeros y productores y adaptarse a la situación.

Maggie se levantaba de la cama. Esos días iba a estar durmiendo en casa de Leah, no hasta que encontrara alojamiento, cosa que su madre ya se estaba encargando.
Esta soltó una sonrisa al ver a su mejor amiga babear mientras dormía.
Caminó hacia el baño más cercano de la casa. Maggie recordaba perfectamente como ubicarse por casa de Leah, en sus tiempos, ellas dos pasaban la mayor parte del tiempo juntas y Maggie se sentía como en casa en el hogar de Leah.

La morena se puso delante del espejo, pudo ver que su pelo estaba hecho un desastre, así que se lo intentó peinar un poco con las yemas de sus dedos.

— Primer día — susurró Maggie, sonriendo emocionada.

Una vez esta se aseó, volvió a la habitación de Leah a sentarse en una butaca y en mucho silencio, tratando de no despertarla.

Maggie sacó el móvil y entró a Instagram.
Fue a la cuenta de @percyjackson para informarse un poco más, aunque esta ya había investigado.
Pudo ver que sus nuevos compañeros eran bastante graciosos y agradables gracias a algunos vídeos que aquellos habían subido, eso le alegró.
Decidió stalkear a los protagonistas, en ese caso dos chicos más o menos de su edad llamados Aryan y Walker.
Primero a Aryan, el cual parecía actuar como Grover en la serie. El moreno le dio buena impresión, parecía un buen muchacho y con un humor bastante parecido al suyo.
Seguidamente, chismosearía por la cuenta de Walker, un rubio bastante atractivo.