˗ˏˋ 18 NeoMark ˎˊ˗

Capítulo 16

—¡No! —gritó Mark mientras veía a Zelos apuñalar a su hermano tan rápido, que no pudo reaccionar. Su corazón se contrajo ante la visión de Neo cayendo mientras Nonnie lo aferraba y atacaba por detrás. Una furia inimaginable lo envolvió. Una que no pudo explicar o mitigar.

Todo lo que podía saborear era la necesidad de sangre. La sangre de Zelos.

Antes de que se diera cuenta, se movió y lo tuvo contra el suelo, estrellando su cabeza contra el piso mientras su furia lo remontaba con fuerza.

—¡Mark, detente! Lo vas a matar.

Desde alguna parte, a través de la niebla de su ira, reconoció la voz de M'Kao, quién trataba de alejarlo de Zelos. Mark soltó el cabello negro de Zelos. Levantándose, lo pateó con fuerza en las costillas.

—Sostenlo. Porque si Neo muere, voy a arrancarle el corazón de su pecho y alimentarlo con él.

Los ojos de Zeth se abrieron.

—Dada la paliza que le acabas de dar, estoy seguro de que lo harás —miró hacia M'Kao—. Recuérdame nunca enfurecerlo.

Mark apenas lo escuchó mientras corría hacia Neo. Xia De lo había alejado de Nonnie, pero no antes de que ella lo hubiera mordido.

Neo estaba jadeando y agitándose mientras yacía en el suelo.

Arrodillándose junto a él, se atragantó ante la ola de agonía que lo recorrió. Su mirada inundada de lágrimas.

—¿Bebé? —su voz se rompió cuando el dolor lo sobrecogió.

Neo tomó su mano en la suya, sosteniéndola mientras Xia De presionaba una tela en la herida de su pecho.

—¿Qué haremos? —Preguntó Xia De—. Nunca había visto a un dios sangrar así.

—Tiene un corazón humano... Pero puede ser resucitado. Los Oneroi y los Dolophoni lo mataban cada noche durante siglos, y cada mañana era traído de vuelta a la vida.

—Por Zeus —le recordó Xia De—. Y, sin ofender, no creo que él esté dispuesto dado lo que le acabamos de hacer.

Las lágrimas fluyeron por sus mejillas mientras observaba el rostro de Neo palidecer aún más. Su respiración siendo más lenta.

—No me dejes, Neo —susurró, acunando su mejilla marcada en su mano—. Por favor. No puedo lidiar con estas emociones que me diste. No puedo. Y no quiero estar sin ti. Te necesito conmigo.

Él levantó su mano hacia sus labios para un delicado beso.

—En todo este tiempo, cada vez que moría, nunca quise despertar de nuevo. Rogaba cada noche para que fuera la última muerte. Y ahora...

Se atragantó y escupió una bocanada de sangre.

Mark sollozó en alto mientras trataba de ayudarlo a que no se ahogara en su propia sangre. Estaba cubierta de ella, y era evidente el hecho de que se estaba muriendo. Su cuerpo entero se sacudió, Mark sabía que lo estaba perdiendo y no podía soportar ese pensamiento. Él no lo perdería.

—¡Necesita un corazón inmortal! —le gritó a M'Kao, mirando sobre su hombro. Su mirada fue de él hacia su prisionero.

Mark se congeló mientras la solución lo golpeaba como un puño en el estómago. Eso era brutal, pero...

¿Quién mejor para dar su vida por Neo, que el traidor entre ellos? El hermano que lo traicionó. El hermano que siempre lo había vendido a él y a cada dios egoísta que se puso en contacto con él.

Zelos.

Encontró la mirada de Xia De sobre el cuerpo de Neo y supo que él había tenido la misma idea.