Capítulo 9|| Paul

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Me metí en la ducha, con la tranquilidad de saber que nadie más lo haría porque estaban todos durmiendo.

Me gustaba tener pequeños momentos solo para mí, ya que compartir espacio con tanta gente a veces puede llegar a ser agotador. Les tengo cariño a todos, claro, y a mi pequeño grupo les llevaré siempre en mi corazón, pero al menos yo, necesito estos ratitos.

Me estaba quitando la camiseta del pijama cuando la puerta se abrió de golpe. Casi al instante, está volvió a cerrarse, y yo me pude fijar perfectamente en la mata de rizos oscuros que asomaba por allí.

— ¿Qué...?

— No pienso desaprovechar ninguno de los momentos a solas que pueda llegar a tener contigo, Pablo Delgado.

— ¿Eso significa que no me puedo duchar en la tranquilidad de mi soledad?

Álvaro puso cara de total indignación antes de hablar. Cosa que a mi me hizo gracia.

— Pues nada, me voy... Yo pensaba que querías compartir tiempo conmigo, Polcin.

Vi como se daba la vuelta e intentaba girar el picaporte para salir del baño. Tiré de su brazo hasta tenerle pegado a mi, viendo sus ojitos impresionados y una pequeña sonrisa que se escapaba de sus labios. Ni yo sabía de donde había salido aquel ímpetu de tenerle tan cerca, pero me creaba una sensación nerviosa, porque Álvaro era impredecible. Por lo que decidí rellenar ese vacío con palabras y más palabras.

— Por su puesto que quiero compartir todo mi tiempo contigo, pero estabas dormido. Además que no es la gran cosa estar aquí juntos...

— ¿No lo es? —Álvaro me agarro de la cintura, tirando de mi hacia atrás, hasta acabar pegados a la pared.— ¿Seguro?

— Álvaro... ¿Qué...? Yo...

— Deja de entrar en pánico, Paulito. No es la gran cosa, ¿no? Si me pides que salga de aquí, me iré sin problema.

Le tenía tan cerca que podía ver sus ojos, chispeando con maldad ante su broma y su sonrisa vacilona. Note como la presión de sus manos en mi cintura bajo considerablemente, hasta ser solo una caricia. No se de donde saqué la voz, que hacia varios minutos que se había largado, pero hablé.

— Quédate.

Sus cejas se arquearon, mostrando una incredulidad palpable en su rostro. Yo le miré de nuevo a los ojos, aunque no tardaron en bajar hacia sus labios. Estos estaban entreabiertos, y su lengua se paseo por ellos, ganando tiempo para pensar. Aunque parecía tenerlo bastante claro, porque fue directo a por mis labios.

El beso era distinto al resto que habíamos compartido. Este parecía mucho más necesitado, y dejaba entrever un deseo que el resto no habían mostrado. Noté el agarre de sus manos volverse más necesitado, y como mis manos necesitaban aferrarse a algo, que acabo siendo su cuello.

Justo en ese instante, unos golpes en la puerta sonaron, cargándose la burbuja en la que nos habíamos metido tras aquel beso. La voz de Juanjo resonó por todo el lugar.

— Oye, ¡tortolitos! ¡Que el resto también queremos ducharnos! ¡Daros prisa!

— ¡Que tu te quieras comer la boca con Martin aquí dentro no significa que el resto hagamos lo mismo!

Yo miré incrédulo tras aquellas palabras a Álvaro, principalmente por la mentira tan grande que acababa de soltar y, segundo pero no menos importante, acababa de exponer nuestra situación delante de todos.

La vergüenza me invadió en aquel momento y estuve a punto de huir de allí hacia la ducha, pasando de mi acompañante. Pero él fue más rápido y, tras deshacernos del resto de cosas, me guió hasta la ducha.

[...]

Aquella misma tarde, logramos convencer a la directora para ponernos una película. Yo era un buen cinefilo, por lo que ver la portada de Culpa mía en la televisión, no fue lo que esperaba. Naiara, Juanjo y Álvaro, por su parte parecían encantados. Martin y yo, en cambio, estábamos a punto de salir corriendo de aquel lugar.

Decidí sentarme en el suelo, apoyado en el sofá. Después de aquella mañana no estaba seguro de concentrarme en nada que no fuese Álvaro si me colocaba a su lado. Él pareció notarlo, porque puso una sonrisa burlona antes de sentarse en el otro extremo.

La película empezó sin mucha importancia, Naiara soltaba frases sobre lo encantada que estaba de ver una película con temática sexual y coches, mientras que tras ella Juanjo comentaba todo como si de una obra dramática se tratase.

Fue a mitad de película cuando Álvaro se cambió de lado, poniéndose cerca de mí. No le di mucha importancia, ya que ahí podía estar más agusto solo. Aún así, le miraba de vez en cuando de reojo, observando como se retorcía intentando encontrar una postura adecuada. Una de esas veces, le pille tumbado bocabajo mirándome. Intercambiamos una sonrisa tímida entre ambos pero no tarde en girarse de nuevo, a lo que recibí un pequeño golpe por parte de Ruslana, acompañando de un susurro.

— Paul...

— ¿Qué?

Su mirada hizo una línea invisible desde Álvaro hacia mí, pero no entendí su punto. Ella decidió dejar de insistir con un suspiro y bajo la mirada de Álvaro, que se había girado (de nuevo) en algún momento.

La película siguió avanzando y con ella los movimientos extraños de Álvaro. No era idiota, sabía que la mitad eran para tratar de acercarse a mi, pero no entendía porqué no venía sin más. Por eso mismo, utilice a Nai de estrategia.

Me acerque a la mesita, donde teníamos algo de picoteo esparcido por el espacio  y cogí un trozo de queso y una uva. Tras mirarle, me gire a Naiara, que leyó perfectamente mis intenciones.

— Uva y queso, porque sabe a beso, y como aquí nadie me besa...

Mi amiga soltó una pequeña risa y yo sonreí, encantado con mi pequeña broma hacía el sevillano de rizos que estaba cerca mío.

Por fin, aquella tortura moderna llamada película, terminó. Todos comenzamos a hace bromas, de besos, líos y hermanastros (curiosamente la trama de la película) y ahí vi mi oportunidad de devolverle lo de aquella mañana en el baño.

Me acerque a Álvaro, y tras decirle una frase de la película, le coloque una mano en su mejilla con algo de dureza, a la vez que me acercaba a su cara para besarle. Pude ver como se quedaba pasmado ahí en medio y aproveche esa oportunidad para huir deliberadamente de aquel lugar.

Puede que más tarde me arrepintiese de aquel jueguecito, pero de momento, Granada iba ganando.

🤍

Helloussss.

Os dejo por aquí mi percepción sobre lo que fue Polcín viendo la peli, o lo que es lo mismo el partido Sevilla-Granada. Además un añadido al principio que me pareció chuli escribir.

Espero que os guste. Love u<3

Those eyes|| OT2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora