Capítulo 10|| Álvaro

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N/A: Hellous, escribo esto para decir que es literalmente la continuación del capítulo nueve, pero obviamente narrado por nuestra Twinka favorita.

Paul había decidido huir tras aquella jugada rastrera, y yo seguía asimilando que cierto rubio teñido me habia, casi, comido la boca delante de toda la academia.

Con aquella imagen, decidí prepararme un té y hacer compañía a mi mejor amiga, que se encontraba en la terraza con la pareja del momento y de la academia. Me senté a su lado, escuchando atentamente la conversación para no estar muy perdido. Hablaban sobre las bromas post-pelicula y, obviamente, mis amigos no perdieron el tiempo.

— Para broma la que le ha hecho Paul Thin a nuestro Alvarito, eh... ¿O quizá no era tan broma?

La sangre me subió a las mejillas de manera instantánea y me atragante al tratar de darle un sorbo a mi té. Yo les miré, tratando de ganar tiempo mientras ellos se reían abiertamente de mi.

— No se de que habláis, la verdad. Paul y yo solo somos amigos. Nos entendemos bien, eso es todo.

— Ajá...

— Álvaro, amor, que no somos idiotas.

— No digo que seáis idiotas, digo que veis fantasmas donde no los hay. Paul y yo solo somos amigos, ni siquiera somos tan cercanos como creéis.

Los tres compartieron una miradita y acto seguido empezaron a soltar carcajadas. De nuevo, se estaban riendo de mí en mi cara. Decidí tirar un cojín a Martin y Juanjo, a la vez que golpeaba el brazo de Bea para que parasen de una vez.

— Hostia, Álvaro... Que bueno. — dijo Juanjo aún riéndose.

— Ni siquieri simis tin circanis, mimimi... Cuelaselo a otro, porque a tu bestie no,amor.

— ¿ A que dejas de ser mi mejor amiga?

— ¿ Y quien te aguantaría, listo?

— Paul, por supuesto. — soltó entre risas Martin.

—Con vosotros no se puede hablar de manera seria... — me levante, de forma muy digna, tras envolverme a mi mismo en la manta que compartía con Bea— Ale, aquí os quedáis, me voy a dormir.

— Noooo...

— Va, Alvarito que era una broma no te vayas.

— Álvaro, veeeen.

No les hice caso y salí de allí. Al llegar a la zona de los lavabos vi al causante de aquellas risas. Tenía el pijama entreabierto y estaba concentrado echándose pasta de dientes en el cepillo. Aquello último me dio más igual, sobretodo al ver su torso descubierto, era raro en él poder verle así fuera de las duchas.

Por eso mismo, me acerque con cuidado y le rodee desde detrás, acariciando su pecho en el proceso. Pude notar como sus músculos se tensaban y como se relajaron al verme en el reflejo del espejo. Decidí seguir con aquellas caricias al ver su pequeña sonrisa, dejándole margen para terminar de lavarse. Al hacerlo, volví a tenerle entre mis brazos y dejé varios besos sobre su nuca y sus hombros, Paul parecía estar algo incómodo.

— ¿Estás bien? Puedo parar, solo tienes que decírmelo, Paulito.

— Estoy bien, es solo que no me acostumbro a esto, y menos aquí en medio. No sé, esto siempre ha sido entre las sombras.

— Ya, es verdad...

Me senté en la encimera de los lavabos, frente a él. Aquella frase me había dejado pensativo y Paul lo había notado. Por eso mismo me cogió ambas manos y se las coloco sobre los hombros. El chico se acerco tanto como pudo a mi, quedando nuestros rostros a escasos centímetros.

— No es un reproche, eh. Me encanta que lo que sea que tengamos los dos, sea tan solo nuestro, de nadie más.

— ¿Seguro...? Puedo ser más discreto entonces, no me importa, de verdad si quieres...

Me dio un beso para callarme, y al separarse volvió a hablar.

— Álvaro, mirame. —me cogió la cara con ambas manos— Me da exactamente igual que me beses en medio de todo el planeta, o si me besas en un cuartucho enano escondidos de todos. Que a mi lo que me importa es que sea contigo. No quiero que cambies absolutamente nada de nuestra dinámica, deja de darle vueltas, ¿si?

Sonreí tímidamente, porque sus palabras me habían reconfortado en cierta manera. Pose mis manos sobre su cadera, tirando de él hacia mi. Si antes había poco espacio, ahora era inexistente.

Paul tomó la iniciativa y comenzó a besarme. Era un beso algo distinto. Seguía siendo cariñoso y dulce, pero se entremezclaba con el deseo y la fuerza. Era un beso imperfecto, porque tan solo tratábamos de buscarnos el uno al otro.

Baje de la encimera sin separarme ni un milímetro de sus labios y juntos, entre tropezones y risas escondidas, llegamos a las duchas. Nos separamos un instante y en cuanto Paul cerró tras de sí volví a lanzarme a sus labios. Me deshice tan rápido como pude de aquella camisa de pijama, volviendo a  acariciar cada centímetro de piel al descubierto en el proceso.

Deje sus labios, pero no los besos. Baje por su mandíbula hasta su cuello, precediendo los besos de caricias. No fue hasta que llegue más abajo de lo usual, que el rubio me miró. Su expresión era una mezcla de incertidumbre y deseo. Casi como si le hubiese pedido permiso con la mirada, él hizo un gesto con la cabeza, dándome permiso.

Aquel rostro marcado con la lujuria no se me olvidaría jamás. Sus ojos seguían teniendo un aura inocente que se entremezclaba con la pasión del momento, su labio inferior desaparecía entre sus dientes y su mano se paseaba por mi pelo sin rumbo fijo.

Al volver a ponerme a su altura, sus labios se perdieron en el hueco de mi cuello, mientras que sus manos hacían un recorrido algo más abajo. Al igual que él hacía escasos segundos, mi labio inferior se perdía entre mis dientes. Le acaricie el pelo, dando algún que otro tirón en el proceso.

No sé cuanto estuvimos allí, pero al salir, los labios de ambos estaban hinchados. Las luces se habían apagado y lo único que sonaba en aquella sala eran nuestras respiraciones. La vergüenza volvió a mi cuerpo, como si al haber entrado en las duchas esta se hubiese quedado fuera. Mis mejillas rojas entre la penumbra me delataron, porque Paul soltó un sonidito de burla.

— Ni se te ocurra hacerte el inocente ahora, Mayo. O te juro que volvemos ahí dentro.

— ¿Se puede saber desde cuando eres tan descarado? Se suponía que el de las bromas así era yo...

— ¿Quien te ha dicho que sea una broma, guapo? —me cogió la mano y me guió hacia la habitación , tras guiñarme un ojo— Vamos anda, que a este paso despertaremos a todo el mundo.

🤍

Hola de nuevo, que vergüenza jsjs.
Obviamente es todo absoluta ficción, espero que os guste.
<3

Those eyes|| OT2023Donde viven las historias. Descúbrelo ahora