Ruthlessness [Angstruary 2024]

Don't say Goodbye

Día 4: Amnesia

Shipp: Lawliet (L) & OC

Fandom: Death Note

Lawliet miró a la muchacha, quien tenía su mirada enfocada en la nada, desde el cristal de la puerta obviamente preocupado por su estado. Había pasado por mucho y jamás debería haberla dejado sola. Ahora, por un simple descuido, su mejor amiga se encontraba con múltiples traumas que no saldrían a la luz a no ser que se mejorase, ya que su cerebro había creado la mejor defensa para ella: la amnesia. A pesar de que su cuerpo estaba más que maltratado y había perdido color, Nicky le seguía pareciendo aquella florecilla del desierto que le cautivó desde la primera vez que la vio. El doctor se acercó al muchacho y le hizo una señal de que podía pasar.

Lawliet abrió la puerta, no sin antes secarse el sudor de las manos, causado por los nervios. ¿Qué le diría? ¿Le reconocería? Temía que al verle, reviviera todo aquello, los maltratos de Yagami Light con el fin de torturarla y le dijera el nombre del famoso detective, pero ella jamás lo hizo, aguantando cada golpe, asfixiamiento y a saber qué más. El pelinegro se acercó, a paso lento, para ponerse a su lado y, al tomar su mano, ella no hizo amago de mirarle, hasta que le habló.

— Nicky. — pronunció su nombre con voz temblorosa y ella reaccionó, conectando su verdosa mirada con la de él.

— Hola. — respondió escuetamente con una sonrisa leve, sin hacer el amago de continuar hablando.

— ¿Sabes por qué estás aquí? — dijo el muchacho, esperando que ella supiera quién era por sí misma.

Se tardó un rato, ya que su mirada se perdió en la pared que estaba detrás de Lawliet, como si estuviera rebuscando en su mente, haciendo que los minutos se volvieran horas para el muchacho, quien se encontraba ansioso por la respuesta, pero cuando la chica retomó la conversación que había quedado en el aire.

— No… — expresó confundida — ¿Hice algo malo? — su semblante tranquilo se convirtió en uno preocupado.

— No, linda. Todo está bien. — le sonrió el pelinegro, atreviéndose a tocar su blanquecina cara, aguantando las ganas de abrazarla y decirle que todo lo malo que le había pasado ya no ocurriría más — ¿Recuerdas algún dato sobre tu vida? Cualquiera servirá para ayudarte.

— Sí. Me llamo Nicky y vivo en el orfanato “Wammy’s House” junto a Watari y los demás niños. — comenzó a decir y el muchacho se mostró sorprendido, pero no la detuvo — Mis padres me abandonaron, pero los del orfanato son mi familia, aunque hay un chico que me gusta mucho.

— ¿Quién, Nicky? — dijo el pelinegro, impaciente. Aquello, sin saber por qué, le mataba por dentro, teniendo miedo, una vez más, de lo que contestase — Dime su nombre. — insistió. 

— Se llama Lawliet — sonrió tímidamente la muchacha, instaurándose un sonrojo en sus mejillas y un brillo en sus ojos — Él debe estar preocupado por mí. ¿Podrías decirle que venga a verme? Él sabrá cómo encontrarme. — su sonrisa se amplió al hablar de él.

— No te preocupes. Yo se lo haré saber. — le besó la frente, levantándose — Ahora me tengo que ir — comunicó Lawliet, conteniendo sus lágrimas e intentando camuflar su voz rota mientras que se dirigía hacia la puerta, pero Nicky le detuvo al hablarle de nuevo.

— ¿Volverás mañana, extraño desconocido? — preguntó y él se giró, viéndola de nuevo, tan bella y vulnerable a la vez.

— Siempre volveré. No volveré a dejarte sola. — abrió la puerta, despidiéndose con esas palabras, dejando que su llanto estallara nada más cerrar detrás de sí.

Lo recordaba, pero no de la manera en la que quería. El niño de 8 años no volvería a su vida y solo quedaba ese adulto de 25 años, que recién había descubierto que sus sentimientos siempre habían sido correspondidos, dañándolo aún más, y que posiblemente no llegaría a reconocerlo jamás, pero nunca hay que dar todo por perdido, a pesar de que tuviera que destruirse a sí mismo por el camino yendo cada día a visitarla, porque, en lo que le quedaba de vida, no la volvería a dejar sola.

Día 4 superado. La verdad que me dolió cada palabra que escribí. Jamás pasé por esta situación, pero sabía que era duro. Ver que alguien no te recuerda o reconoce, incluso que tenga un momento de lucidez para luego volver a olvidar todo. Espero que os guste esto y agradezco a Schatten_7u7 por haber propuesto esto. Estoy aprendiendo mucho y creo que se está convirtiendo más en un recurso a usar. Dejad vuestros comentarios, los cuales leeré atentamente, y vuestro votito. Nos leemos en la siguiente actualización.