Lo que alguna vez fue •°~Guapoduo~°•

Mañana

...
Estaba decidido, necesitaba ir a esa fiesta para encarar a cellbit.

Era más que obvio que el estaría ahí ya que al rato de baghera irse tocaron de nuevo la puerta, cansado y enojado se levantó para abrirla... pero solo estaban unas flores amarantos ...Justo las que estuvieron en su matrimonio y supo al instante quién las dejo hay.

Baghera de seguro fue a avisarle que el estaría en esa fiesta y lo dedujo por las flores..Después de todo lo conoce como la palma de su mano.

Detestaba esas flores ahora...antes eran sus favoritas y fue la razón por las que estuvieron en su boda. Pero ahora solo son un recuerdo horrible.

-Las amaranto no sirven para nada...-

No sé tomo ni siquiera la molestia de tomarlas y cerró la puerta para poder dirijirse a la habitación donde estaba Pepito y comenzar el día...talvez y en la noche pueda descansar mejor.

Aunque sabía que sería muy difícil.

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Pov's Cellbit

Se había retirado del hogar hace rato y ahora estaba en su hogar buscando entre los miles de libros que tenía algo que pueda hacer.

Estaba tan desesperado que estaba dispuesto a utilizar algún echizo para "Volver al pasado" o hacer que Roier olvidará el resentimiento que tiene, pero era más que obvio que no encotro esa información y jamás la encotrara.

Eso ya se trataría de un milagro, por lo que dejo de buscar para resignarse y dirijirse a la cocina de su casa.

Necesitaba comer algo por lo que se empezó a hacer un pequeño almuerzo.

Todo este tiempo solo se la había pasado observando a roier como un acosador desde que llegó a la isla,
Aunque no veía mucho ya que el no puso ni un pie fuera de su casa desde que entró...el único que podía y salir era Pepito, ya ni siquiera fueron a verlo Richard y Leo...pero no importaba eso, logro verlo aunque sea unos minutos en estos dias, Después de todo era la única forma de tener un poco de el.

Y de todo esto le estaba llegando factura, tenía ojeras muy grandes y el estómago vacío de esos días sin comer además de que se desmayo unas cuantas veces por todo.

No pudo descansar bien desde que llegó y eso era lo de menos... Necesitaba a Roier, verlo no era suficiente, quería aunque sea que se dirigieran la palabra, quería abrazarlo, besarlo, dormir con el, despertar con el para luego besarse de nuevo, extrañaba tocar y adorar cada parte de su cuerpo y ser lo que para el aún no a acabado...un matrimonio.

Porque si, sabía que roier no quería verlo ahora, pero aunque hayan pasado cuatro años sabe que todavía hay algo hay...muy en el fondo, pero existe.

Y una prueba de ello es que no se han divorciado...todo este tiempo tuvo la oportunidad de haber presentado un divorcio por su "muerte" y otra razón es que no se lo a pedido en estos dias que llegó.

Es sacado de su alborotoza mente cuando escuchan tocar la puerta por lo que va a abrirla.

-Cellbit!-Y en cuanto está es abierta lo aborda baghera quien está un poco más emocionada de lo habitual.

-o que está acontecendo?-

-Roier...roier irá al convivio de mañana, tal vez puedas hablar con el un poco o resolver las cosas.-

Baghera le levantó por mucho el animo, por fin, por fin roier saldría de esa cueva que es su castillo y podrá verlo mejor.

Ella siempre estuvo de acuerdo con su relación y los apoyo en cada momento, y le alegra saber que aún después de todo, aún los quería seguir viendo juntos.

-muito obrigado baghe, Tengo que preparar algo-

-Esta bien, solo recuerda no abrumarlo e intenta ser despacio.-

Cellbit le dedicó una sonrisa que fue devuelta por baghera antes de que ella empezará a irse sabiendo que Cellbit tenía que descansar y prepararse para mañana.

Ella es una de las personas que ha estado con el desde hace mucho y lo ha apoyado siempre, incluso mataron en el purgatorio codo a codo...Aunque también Roier lo había hecho...

Solo ahora es cuando le da importancia a eso, roier estuvo ahí siempre y nunca demostró estar triste para el...incluso cuando las cosas iban de mal en peor... Roier hizo cosas que jamás antes había hecho para protegerlo... Matar.

Y aún así con todo eso el nunca se vio triste o infeliz por hacerlo, al contrario , parecía que eso solo demostraba más su amor.

Y tal vez esa es su manera de hacerlo...dejando de lado lo que quiere y es para amar... Amarlo con todo lo que es y tiene para dar.

cómo pudo pensar que estaría mejor sin el?

Cómo pudo ser tan insensible y dejarlo sin decirle nada, solo con un estúpido mensaje pensando que con eso sería suficiente.

Roier había dado todo lo que pudo para hacerlo sentir feliz y amado... Y lo desecho.

Tenía muchas razones para estar enojado...Después de todo lo que hizo no tiene justificación.

Por eso estaba dispuesto a hacer cualquier cosa.

Y ahora que sabe que el irá al convivio no desaprovechara la oportunidad.

Pero por ahora tenía que hacerle saber que seguía ahí.

Y no se le ocurrió mejor forma que darle una pequeña muestra de su amor intacto.

Por lo que salió a toda velocidad buscando flores,pero no cualquier flor... si no LAS flores que Roier ama.

Los amarantos...

Roier ama estas flores...

Aún recuerda el día de su boda...ese dia no pudo negarse a la petición de su guapito de colocar flores amaranto por todos lados cuando le dijo que significaban Amor que nunca marchita.

Fue de las cosas que más le gusto...porque significo que su amor jamás acabaría, o al menos así lo vieron ese día.

Una vez con las flores en mano intento por un buen rato colocarlas todas perfectamente para formar un ramo.

Ramo que no dudo en llevar a la casa de roier en cuanto las termino.

Tocó la puerta de este para colocarlas en el suelo y salir corriendo para adentrarse en el bosque de los alrededores del castillo de roier.

Para ver cómo este salía con una cara de enojo y cansancio...Observo por unos momentos las flores para después murmurar algo que fue imposible de entender para el y entrar a su casa nuevamente, sin siquiera levantar las flores.

Se quedó un rato más esperando que roier se retractara para volver por las flores pero no fue así, entre más se hacía de noche mas morían las esperanzas de que saliera de nuevo...y de nuevo, con las piernas arrastrando y decaído tomo camino a su hogar.

Talvez...

Talvez mañana sea un mejor intento...