Entre Dioses y Gloria (fanfic persy jackson)

Una diosa en el campamento

Durante la fiebre de hijos prohibidos de los dioses olímpicos, Persephone y Hades los gobernantes del inframundo decidieron tener una hija propia, su hija era descendiente de dioses y por consecuencia ella era una, fue llamada ileyna proclamada diosa de la vida y la muerte representando la esencia de sus padres, pero los dioses primordiales Gaia y Erebo le dieron otro título a la recién nacida, pero la única enterada de eso era persephone quien se lo guardó para sí misma para proteger a su hija.

A los 5 años los poderes de la pequeña ileyna ya eran bastante fuertes, al grado de regresarles la vida a los muertos, dado a lo peligrosa que era en el reino y aún no saber controlar sus poderes, Hades decidió alejarla del inframundo, mandándola hacia el reino mortal al campamento mestizo sin previo aviso, dejándola en la entrada en espera de que alguien se diera cuenta que la pequeña estaba ahí.

Pasaron dos años e ileyna ya tenía 7, era una niña de cabello ondulado y largo de color negro como la más oscura noche, ojos verdes, tenía las facciones de su madre, pero la mirada fría de su padre, una belleza confundida con las hijas de Afrodita, hasta la fecha ella era la única de la cabaña 13, pasaba la mayor parte de sus días sola, y otra con una de las hijas de Afrodita llamada Silenna quien era como una hermana para ella.

Un día por la noche ileyna no conciliaba el sueño decidió caminar, entre más caminaba escuchaba un susurro que la llamaba a lo lejos llegando a los límites del campamento, donde presenció un disturbio, eran 4 personas escapando, pero por la oscuridad no sabía de qué, el miedo empezó a hacerse presente en ella y decidió esconderse detrás de una pequeña colina, el susurro lejano se escuchaba más fuerte volviéndose en un extraño sentimiento, ileyna observó a lo lejos y vio como una de las personas que huían decidió enfrentarse a lo que era un monstruo, la niña estaba estallando en demasiadas emociones no sabía lo que pasaba pero quería parar lo que pasaría como si viera el futuro, de la nada un rayo cayó, la desesperación de ileyna desapareció pero aún tenía lágrimas en los ojos, a lo lejos pudo notar como de la nada un pino apareció, nunca pudo explicar lo que vivió en esa noche, pero esa fue la primera vez que ileyna sintió la presencia de la muerte lo cual era uno de sus poderes.

Al pasar el tiempo ileyna ya tenía 12 años, se hizo de una reputación en el campamento, claro que era inteligente y era una de las mejores en combate y estrategia, pero al ser una diosa e hija de Hades, no simpatizaba mucho a los semidioses.

Una tarde se encontraba en el área de combate junto con Annabeth Chase una de las hijas de atenea, ella era también muy buena en el combate así que se reunían a entrenar juntas de vez en cuando, no eran tan amigas pero si eran cercanas.

-Crees que hoy capturen la bandera?- pregunto ileyna mientras se sujetaba bien su armadura.

-No lo creo, se pasará al viernes, quieres hacer el combate con armas o prefieres a mano limpia- dijo Annabeth.

Por detrás una chica alta con cabello rizado se acercó e interrumpió la plática -yo creo que de ninguna manera podría, bueno su majestad se puede defender con sus poderes, pero claro como podría si ni sus poderes sabe controlar- era Clarisse , pertenecía a la cabaña 5 hija de ares.

-Miren que oportuna, si tratas de provocarme no va a funcionar Clarisse, tu "majestad" no necesita nada más así que ya te puedes retirar- el comentario sarcástico hizo que le hirviera la sangre a la chica que tenía en frente.

- Te crees mucho, que te parece si lo demuestras, lucha conmigo, un duelo de espadas, si gano harás lo que yo diga por una semana-

-Bien, si yo gano me quedo con tu lanza- las dos estaban frente a frente dándose un apretón de manos aceptando la apuesta.

-Esto es ridículo, lo sabes verdad ileyna- habló detrás Annabeth, mientras las oponentes se ponían sus cascos y en posición.

-No te preocupes, ya es tiempo de que le den una lección a la bravucona de Clarisse-.

-¿Ya terminaron!? Porque necesito que ileyna empiece a hacer unas cosas para mí y mis hermanos- Clarisse dio una sonrisa con malicia.

Y así empezó el combate, los demás campistas las estaban observando al rededor, las dos eran buenas estrategas, una era innata para la lucha pues su padre era el dios de la guerra, y otra debido a la constante soledad en la que se encontraba lo único que hizo desde que llegó al campamento fue entrenar.

Estaban en un empate, hasta que Clarisse decidió usar las palabras como un as bajo la manga,
-Que triste tal vez tu padre se hubiera sentido orgulloso de cómo peleas-.

-El tuyo lo estaría si te callaras- ese comentario hizo enojar aún más a Clarisse haciendo que con el mango de su espada le diera un golpe en la nariz

-Ya recuerdo porque Hades no está orgulloso, no sabe nada de ti, nunca estuvo orgulloso de hecho, si no nunca te hubiera abandonado- esa fue la gota que derramó el vaso.

Los ojos de ileyna se tornaron de un color rojo que radiaban ira pura ya no parecía ella misma, tomó a Clarisse por la pierna provocando que callera, la tenía entre el suelo y su espada acercándola cada vez más a su rostro con una fuerza brutal, mientras la semidiosa hacía fuerza contra ella para que la espada no le atravesara el cuello.
Unas gotas doradas calleron en la frente de Clarisse, era sangre que salía de la nariz de ileyna por el golpe anterior.

-!ileyna ya basta! Ya es suficiente- gritó el lider de la cabaña del dios Hermès.

-Debería cortarle la garganta, el dejarla de escuchar sería un alivio- en sus mirada no había rastros de compasión.

Clarisse después de escuchar eso empezó a entrar en pánico, quiso buscar algo que la pudiera ayudar a su alrededor pero al voltear un poco la espada de ileyna rozó su mejilla haciendo un pequeño corte, estiró su brazo lo más rápido posible para alcanzar una piedra para después darle un fuerte golpe en la cabeza, funcionó porque cayó inconsciente y se pudo librar de ella.

Annabeth corrió hacia ileyna -tiene una contusion ay que llevarla a la enfermería, luke ayúdame- el líder de la cabaña 11 hizo caso.

Luke tomó en sus brazos a ileyna. -Tu deberías venir también estas sangrando del rostro- le dijo a Clarisse -Espero y quiron no se entere-.

-Tranquilízate Castellan, no es la primera pelea que surge aquí no es novedad- dijo mientras se levantaba del suelo y recobraba el aliento.

-No es eso lo que me preocupa- miró consternado a la chica que tenía en brazos y así dirigiéndose a la casa grande.