Capítulo 21

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Capítulo 21

Al terminar de comer, Jiang Yao pidió inmediatamente a la señora una nueva habitación, la comprobó personalmente y sólo entonces le pidió a Song Muyun que se mudara.

Hacía sólo unos días que se conocían, pero su relación era como la de viejas amigas que se conocen desde hace años. Jiang Yao se paseaba por la habitación como si fuera suya. Cuando terminó, se tumbó en el mullido sofá.

Ya había echado al grupo de jóvenes. Ahora sólo quedaban Song Muyun y ella.

Song Muyun le dio unas ligeras palmaditas en el brazo. "¿Te apetece un poco de té?".

En la otra mano sostenía una taza de té de porcelana de la dinastía Qing.

Jiang Yao se incorporó, tomó el té y se lo bebió de un trago, luego tiró despreocupadamente de Song Muyun para que se sentara a su lado.

"¿Todavía te duele la herida?".

Song Muyun se sentó a su lado, con aspecto algo reservado. No estaba acostumbrada a estar tan cerca de alguien, pero como era Jiang Yao, no le importaba.

"Ya no me duele, tu medicina es muy efectiva, gracias".

"¿Qué hay que agradecer? Mientras no duela, está bien. Ten, toma esto".

Jiang Yao sacó de su pecho el frasco de medicina de jade blanco que había usado durante el día y que contenía un ungüento medicinal de alta calidad.

Song Muyun inmediatamente quiso negarse. "N-no siempre puedo aceptar cosas de ti...".

Su rostro se sonrojó ligeramente, sintiendo que había recibido demasiado de Jiang Yao, que le debía demasiado.

Jiang Yao se sintió impotente, pinchando la frente lisa y pura de esta belleza. "Esas mujeres de tu círculo que son favorecidas por los mecenas, ¿las ves rechazando regalos de los mecenas? Desde que te he marcado, a los ojos de los demás, soy tu mecenas. Darte cosas es tratarte bien. ¿Qué mujer de tu círculo no ha recibido varios regalos de mecenas? Tómalo, no aceptarlo me disgustaría".

Song Muyun se lastimaba a menudo, a veces cuando no podía cuidarse adecuadamente. Sus propios ungüentos no eran efectivos, haciendo que las heridas se reabrieran después de una noche. Esta hermosa dama merecía los mejores ungüentos medicinales. Si las heridas no se trataban adecuadamente y dejaban cicatrices, Jiang Yao se sentiría angustiada.

Al oír las palabras de Jiang Yao, Song Muyun pareció ligeramente disgustada, pero acabó tomando el frasco de medicina. Su voz se volvió más suave: "Muchas gracias, me has ayudado mucho. A veces no sé cómo pagártelo".

Antes no eran muy cercanas. Sólo se había encontrado con Jiang Yao unas pocas veces y nunca esperó que fuera ella quien la ayudara cuando cayera en problemas. Prefería ser enemiga del Séptimo Príncipe a no protegerla.

Song Muyun sintió calor en el corazón.

Jiang Yao no necesitaba que ella le devolviera nada. "Mientras permanezcas a salvo y mantengas las distancias con Murong Qing, sería el mejor pago".

Ella hizo todo esto sólo para separar a los dos. Si se quedaban juntos, la volvería loca.

La expresión de Song Muyun se volvió ligeramente fría ante la mención del nombre de Murong Qing. Pero recordando rápidamente quién estaba frente a ella, suavizó su mirada. "Hmm, no lo haré".

Detestaba tanto a Murong Qing que ni siquiera quería mirarle. Definitivamente cumpliría los deseos de Jiang Yao.

Qué bien.

Está Prohibido Acosar A La Heroína De La Novela [GL] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora