Capitulo 2

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EL ESCAPE DEL PURGATORIO

Narra.....

Un día soleado, bastante lindo si me permiten decir, me encontraba en mi habitación, o al menos lo que aparentaba serlo, mi compañera de cuarto como siempre chismosa; me cae bastante bien aunque no lo quiera admitir, había descubierto el plan desde hace mucho, yo mismo se lo conté, también con su ayuda logramos conseguir algunas cosas, suministros cómo ropa, comida, medicinas y vendajes, alguno que otro objeto como defensa, fui precavido, si realmente podíamos salir de este lugar no permitiría que nos volviéramos vagabundos, con esto tendría para los primeros días, después de eso, ya me las tendría que ingeniar.

Para que todo saliera perfecto lo más óptimo sería que fuéramos sigilosos, nadie se entere y salir rápido, escuché que otros lo intentaron pero no pudieron, una de las razones de esto es que los que se intentaban fugarse eran los de menor jerarquía, esto no le gustaba a los mayores después de todo como ellos dicen, no le gustan perder juguetes, eso sin duda hacia el querer salir rápido y sigiloso más complicado, aunque por si acaso entre algunas cosas como, ropa idealmente negra, junto a algo que cubra mi pelo ya que no es un buen camuflaje que digamos en la noche, un cubrebocas no estaría mal, también alguna que otra arma cuerpo a cuerpo, alcance a tomar un cuchillo de la cocina, sería arriesgado empezar a robar utensilios a lo loco, así que con palos o piedras empecé a tallar, quería intentar hacer proyectiles filosos, costó mucho pero la forma me terminó gustando, también me enfoque un poco en la puntería, normalmente entrenaba todo esto en mi habitación, junto a mi compañera ayudandome a corregir una que otra cosa, una vez ya listo la defensa, necesitaba las vías de escape, obviamente una cuerda, el alcohol, un trapo y el mechero servirian, aunque prefería no tener que usar eso.

8:00 pm de la noche, tenía todo listo solo faltaba esperar, procure pasar desapercibido, tras tanto tiempo se volvió algo llevadero, es una lastima que está ves no se hubiera podido, no se cómo esos desgraciados lo hacen pero me localizaron, esos típicos pandilleros me rodearon confiando en su número, no permitiria que me intimidaran, no estando tan cerca.

Siempre usan el mismo patrón, con el ego desbordante empiezan las burlars, después las risas, amenazas, paliza y se van, de forma predecible se mofaron, espere a la risa, ahí estarían más vulnerables, bajaron la guardia, y aproveche con un puño en la cara del más grande, había usado toda mi fuerza y creo que le parti la nariz, sus compañeros por la impresión tardaron en reaccionar, una reacción normal pero que no iba a desaprovechar, me escabulli entre ellos y salí corriendo lejos de ahí, obviamente no me dejarían ir tan fácil, eran más que yo por lo cual debia usar el cerebro y no la fuerza, las oscuridad estaba descartada, mis rasgos no ayudaban.

Los demás llenos de furia decidieron seguir mi rastro, logré separarlos en duos, eran 4 dúos, el problema fueron dos tríos, precisamente los más fuertes, fui a los más débiles de primero, desde lejos y sin que se dieran cuenta arroje un fracmento de piedra a la pierna de uno, y noquie a su compañero con un palo similar a un garrote, el de la pierna mala quiso poner resistencia pero con su pierna adolorida no pudo hacer mucho, seguí este patrón con 3 de los 4 dúos, pero en un fallo de cálculo erré el lanzamiento inicial, eso hizo que la pelea se alargará, algo fatal para mi, rápidamente informaron a los demás, una pelea contra 8, eran muchos pero ya me tenían rodeado.

El primero se lanzó para golpearme en la cara, la moví ligeramente evitando casi todo el daño, a pesar de no sentir el dolor igual el cuerpo sufría el daño, le clavė uno de los fragmentos en el hombro, la sangre salió, eso los espanto un poco, aproveche y arroje otro fragmento a uno mientras apuñalaba a otro, con tres fuera del juego iba bien pero los desgraciados no eran tan brutos, agarraron varios objetos, aprovecharon los números y empezaron a llover golpes de todos lados, yo conectaba uno que otro, saque el cuchillo e hice Cortes y cuando veía el momento apuñalaba, no quería matarlos, apuntaba a puntos de dolor pero no letales, sabía bien como funcionaba el cuerpo, lo experimente yo mismo, uno me logró dar con algo afilado, el desgraciado apunto a la cara, en un momento para salvar lo que podía hice un movimiento brusco sacrificando la carne pero salvando el ojo, una cicatriz me acompañaría pero ya para ese punto me daba igual, la duración de la pelea paso factura, estaba magullado, lastimado de forma fea pero nada letal y aunque el dolor era débil, el cansancio era algo inevitable, esto no iba hacia ningún lado que no fuera mi plan fracasando y yo de nuevo en la enfermería, no tuve de otra, usé la última carta, en un acto de distracción tome distancia, agarre mi mochila y saque el molotov, lo prendí y lo arroje, algunos se quemaron otros se asustaron pero me dieron tiempo, el tan valioso tiempo.

aproveche y corrí a mi habitación con las fuerzas que me quedaban y agarre todo de forma rápida, prendi mi segundo molotov para lanzarlo a mi habitación, esto desviaría la atención haciendo que mi escape tenga una probabilidad del 100%, antes de irme vi una gabardina medio grisasea, con una x Blanca junto a mi amada bufanda, casi la olvidó, un regalo de mi compañera, no, mi mejor amiga, era una de las pocas prendas que de verdad me gustan, use la bufanda como tapabocas para evitar el humo ya que se estaba empezando a formar, por fin pude salí de ese infierno mientras ardía en llamas, tenía la esperanza de no ser el único en escapar, quizás otros niños alcanzarían a escapar, quizás lograrían apagar el fuego, lo mejor sería que este lugar de mierda desapareciera del mapa, espero que ella haya logrado seguir el plan, pero bueno, al fin lo logré, la libertad al frente mío, me largo de acá.

Esta es mi historia y mi nombre no tienen porque conocerlo, es de nula importancia para ti pero me pueden llamar............CROSS.

CROSS

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