Bunnie ~ CharlieBabe

o n c e

POV's BABE:

Alguien me despertó con un fuerte golpe en el hombro. Winner se encontraba sonriéndome burlonamente mientras sostenía una bandeja con comida. Bufé y traté de sentarme en la cama sin hacer algún movimiento brusco para no despertar a Bunnie que se encontraba dormida junto a mí.

— Tony te manda esto —alzó la bandeja metálica que llevaba en la mano—. Dice que debes mantenerte alimentado porque sino no serás una buena venta —bufó—.

— Dame eso.

Estiré mi brazo para tomar la comida, pero el idiota se hizo para atrás y con una sonrisa en el rostro soltó la bandeja logrando que todo se regara sobre el sucio suelo.

Bunnie se despertó por el fuerte ruido del metal de la bandeja contra el concreto y comenzó a llorar asustada, murmuré una maldición hacia Winner quien ya estaba saliendo de la habitación mientras reía.

— Bunnie, estoy aquí —susurré mientras la tomaba entre mis brazos—. Mamá está aquí, no llores.

Acaricié su espalda mientras la mecía en mis brazos. Evalué la comida tirada en el suelo y me agaché para recoger un pequeño pastelito aún empaquetado y una caja de leche sellada, el resto de comida evidentemente estaba desperdiciada, pero al menos había logrado salvar algo para mi bebé.

— Toma Bunnie, tienes que comer —abrí ambos productos y comencé a darle de comer poco a poco—.

Habían pasado tal vez quince minutos cuando Bunnie terminó de comer todo, seguía sentada en la cama mirando todo con curiosidad, hasta que sus ojitos parecieron captar algo y trató de bajarse de la cama. Cuando la ayudé a bajar, ella corrió hacia una esquina de la tétrica habitación, sus manitos comenzaron a tantear la sucia pared hasta que se detuvo.

— ¿Qué pasa Bunnie? —me acerqué a ella—. ¿Encontraste algo?

Ella me miró por un segundo y comenzó a balbucear cosas que evidentemente no entendí. Sus manitas comenzaron a golpear una y otra vez la pared, y cada vez más fuerte. Temí que se hiciera daño y estaba dispuesto a detenerla hasta que su pequeño puño golpeó la pared con tanta fuerza que logró atravesarla.

— ¡¿Pero qué...

Bunnie comenzó a reírse sin razón y sacó su pequeña manita del agujero que acababa de hacer, luego retrocedió y me miró fijamente.

No puede ser.

Mi pequeña hija de un año de edad acaba de manifestar su don frente a mí, y este claramente no era un don cualquiera.

— Bunnie —la cargué en mis brazos—. Mierda, debemos esconder esto de Tony —susurré—. Pequeña, por favor prométeme no volver a hacer esto frente a nadie más, ¿si?

Ella solo se metió su dedo pulgar a la boca y me sonrió, bufé y la dejé sentada en la cama mientras me acercaba hacia el agujero para espiar que había del otro lado. Al parecer también había otra habitación abandonada con la puerta asegurada, pero a comparación de nuestra habitación, esa si poseía una ventana. Eso solo quería decir, que por fin habíamos encontrado la posibilidad de escapar.

...

Para la hora de la cena, Tony fue el que nos llevó la comida esta vez, para mi suerte había logrado ocultar el hoyo en la pared poniendo una silla al frente.

— ¿La niña se encuentra bien? —preguntó mientras recorría la habitación—. Si es así, debería de llevármela nuevamente.

— No —solté enojado—. No te la lleves, ella llorará si lo haces.