—Oye ¿Sabes la última del pueblo?
—¿Ah?
—Se rumorea que un brujo anda por ahí.
—¡¿Qué?!
—¡Sí! Dicen que sus magias oscuras buscan arrebatarle las riquezas a nuestro pueblo... o mejor dicho, los poderes místicos del templo Akabane.
—¡Oh no! ¡Que el cielo nos ampare! Ah, aquí tienes tu orden de fresas querido.
—¡Gracias!—Agradece Nagisa con una sonrisa mientras recibe el frasco con los frutos de una de las ancianas tenderas del puesto de frutas. Procedió a retirarse mientras dejaba a ambas mujeres seguir chismoseando entre sí.
—¡Espero que a Karma le gusten!—Exclamaba alegre mientras contemplaba los jugosos frutos rojos.
—Creo que debería preocuparte por cosas mayores a esa ¿Oíste eso no?—La voz de Lyon resonó en su cabeza cual eco distante, como susurrando temiendo que alguien lo escuchara—están empezando a nacer rumores, hemos estado demasiado tiempo aquí.
—Son meras historias de pueblo Lyon, no hagas caso.
—Yo creo que debemos hacer mucho caso—Nagisa frunce el entrecejo con enojo, previendo a donde iba la conversación. El libro continuó—¿Siquiera sabes cuánto tiempo hemos estado aquí? Mañana cumpliremos el mes, que es el límite de lo recomendado por el maestro pulpo sobre quedarse en un sitio. Los encargos se nos están acumulando y aún tenemos asuntos que atender, debes estar consciente de eso.
El brujo guarda silencio, dándole la razón a la voz en su cabeza que suspiró con cansancio.
—Nagisa, como buen libro de hechizos que soy apoyaré a mi brujo en todo lo que quiera hacer. Pero estoy seguro que no quieres quedarte en ese pueblucho de segunda para siempre ¿No? Sólo digo que si vas a hacerle la pregunta a tu peli rojo psicópata, ahora sería un buen momento.
Un suspiro de resignación sale de los labios de Nagisa.
—Tienes razón.
—Yo siempre tengo razón.
—Pero aún no siento el momento correcto para decírselo a Karma—Agrega con mirada distante a lo que Lyon bufa.
—¿Y cuando lo será?
—No lo sé... lo sabré cuando llegue el momento—Declara ahora sonriendo de forma segura, Lyon suelta un quejido mientras habla con mal humor.
—Como quieras, pero yo que tú empiezo a pensarme un buen cuento sobre mi vida.
—¿Eh? ¿A qué te refieres?
—Piénsalo un momento, has estado yendo al templo de ese psico- ¡ejem! "Chico especial" durante casi un mes, tiempo en el que no más han hablado de él, su estilo de vida y su trágico pasado. Pero ¿Qué hay de ti? ¿Qué pasa con este extraño enano, turista de personalidad particular que se interesó en él de la noche a la mañana? Es cuestión de tiempo para que haga preguntas.
Traga grueso, abrumado por los nervios que le aparecieron por las palabras de Lyon.
—N-No seas exagerado, seguro que ni interés tendrá.
.
.
.
.
—Entonces... ¿Eres un viajero?—Pregunta mientras toma una de las fresas que le trajo el contrario.
Nagisa sonríe de forma nerviosa mientras escucha una voz lejana en su mente diciendo "te lo dije", la ignora cómo puede tratando pensar en la mejor forma de hablarle a Karma.
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El Brujo de la Montaña. (KarmaxNagisa)
Random¿Cuál es el nombre del chico que vive en la montaña maldita? -Por tú bien recuérdalo porque es Nagisa. Conoce los hechizos más malvados y las pociones más peligrosas que puede haber. -Puede que tú seas el siguiente ingrediente. No te dejes engañ...