CAP 6

280 40 0
                                    

Jimin sonrió a la pareja de abuelitos que tenía delante.

–"Claro que puedo cambiarles el pedido" –dijo él con una sonrisa, a pesar de que era la tercera vez que cambiaban de opinión. –"Iré a la cocina para solucionarlo".

Se dió media vuelta y se dirigió a la cocina de la cafetería a toda prisa, antes de que comenzaran a preparar sus platos. Le dolía todo el cuerpo y se sentía ridículamente pesado. Se miró el reloj. Una hora más. Solo necesitaba aguantar una hora más para terminar su turno.
Se había alegrado cuando una de las otras camareras no había podido ir ese día, pues eso suponía más trabajo para él y más propinas, un poco de dinero extra para cuando llegara el bebé. Aunque se sentía demasiado cansado. Y, a pesar de su agotamiento, no lograba dormir bien.
¿Era lo correcto limitar su contacto con Yoongi? ¿Hacía bien en no someterse a la prueba de paternidad que él le había pedido?
Era un gran paso, algo que él no podía tomarse a la ligera. No estaba seguro de que quisiera que aquel hombre cínico y desconfiado lo ayudara a criar a su hijo.
Aunque igual él tampoco pensaba hacerlo. Para Yoongi, la idea de ser padre se limitaba a pasar dinero. Pagaría a niñeras de élite y caros internados, pero no le ofrecería amor ni tiempo.
Él le había dejado claro que no tenía ningún interés en el niño. Solo lo veía como una carga económica o como una herramienta de chantaje.
Jimin se estremeció, preguntándose a qué clase de mundo estaba acostumbrado para creer que el engaño era lo natural.
Cabizbajo, abrió la puerta de la cocina y avisó del cambio de pedido. Luego, agarró un vaso de agua y se apoyó en la pared. Necesitaba recuperar el aliento para poder continuar en pie.
Cerró los ojos y bebió despacio. ¿Había hecho bien al decirle que había cambiado de idea a la secretaria de Yoongi, cuando lo había llamado para fijar la cita para el test de paternidad? No pensaba someterse a esa prueba.
Yoongi pensaría que el niño no era suyo.
El problema era que, de ese modo, le negaría al bebé la oportunidad de conocer a su padre. Si se hacía la prueba, por otra parte, Yoongi se involucraría en la educación del niño. Aunque Jimin temía lo que eso podía significar para su hijo.
Y para él. Porque, a pesar de las terribles acusaciones que le había lanzado, Jimin ansiaba su contacto, la seguridad de estar entre sus brazos. Cuando había estado a punto de vomitar, en vez de dejarlo solo, él lo había cuidado. Eso hacía que casi lo perdonara por sus acusaciones.Era algo demasiado peligroso.
No quería ser la clase de doncel que se vendaba los ojos y justificaba el mal comportamiento de un hombre. Eso no podía conducirle a nada bueno.

...

–"Jimin, aquí estás" –dijo Lisa, su jefa. –"Oye, ¿estás bien?"

Jimin se enderezó y abrió los ojos.

–"Solo necesitaba beber agua. Estaba muerto de sed. Pero no te preocupes, ya voy…"
Lisa meneó la mano.

–"He venido a hablarte de eso. Tienes aspecto de estar derrotado. He llamado a Eunwoo y viene ahora mismo a sustituirte. En cuanto llegue, puedes irte.

Jimin se quedó boquiabierto. Lisa era una buena jefa, pero nunca antes se había fijado en su cansancio, algo que había sufrido a diario en las últimas semanas. Ni siquiera se había percatado de sus mareos mañaneros.

–"Vamos, ¿a qué esperas?" –lo azuzó Lisa con una sonrisa
–"Yo no perdería un segundo, si tuviera a alguien tan guapo esperándome para llevarme a casa".

–"¿Cómo?. Nadie me espera fuera".

Lisa arqueó las cejas con una sonrisa aun mayor.

–"¿Así que quieres guardarlo en secreto? Por mí no hay problema. Pero te advierto que, a pesar de que está agazapado en una esquina, llama mucho la atención. Si yo fuera tú, tendría cuidado de que no me lo robaran".

EN TUS REDES - YOONMIN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora