GINA - ONE PIECE (LIVE ACTION)

| 2 - Marino desagradable. |

Nuestra próxima parada era Shells Town. Donde reclamaríamos la recompensa por el cuerpo del tal Sr. 7 en la base de la marina de la ciudad.

Aunque antes de eso, decidimos beber algo. Adentrándonos al primer bar que nos cruzamos.

Recibimos las miradas curiosas de varias personas, pues, no es de todos los días ver a alguien portando tres espadas, o un equipo de arco y flechas.

Me senté frente a la barra, saludando con un asentimiento a la mesera. Mientras mi compañero se acomodaba a mi lado izquierdo y en el asiento siguiente colocaba al barroco. O lo que quedaba de él.

-Sírvele un jugo a ella. Una botella para mí, y otra para mi amigo.- Pidió el cazador. Logrando que la mujer que nos atendía lo mirase con rareza e, incluso, miedo. Para luego dirigir su mirada al saco y finalizarla en mí, recibiendo un levantamiento de hombros y una sonrisa de mi parte.- Tuvo un día difícil- Finalizó el chico.

Lo miré con gracia a la vez que negaba con mi cabeza. -Oye, admite que fue bueno- Se quejó Zoro, dando la espalda a la barra y apoyándose en ella, manteniendo un rostro serio, pero con cierta broma en su voz.

Bebí un sorbo de mi jugo, para luego distraerme por una risa juguetona que se escondía al otro lado de la barra.

Era una niña, de tez morena y cabello rizado. Nos observaba divertida, por lo cual, no dudé en levantar mi mano y saludarla sonriente desde mi posición. Recibí el mismo gesto de su parte, al mismo tiempo que desaparecía detrás del mueble.

Pasados pocos minutos, la pequeña se acerca nuevamente a nosotros, pero esta vez con una bandeja en sus manos.

-¿Qué es eso?- Preguntó el peliverde observando la comida del plato.

-Son bolas de arroz. Para ustedes- Contestó la niña ofreciéndome una. La cual con gusto acepté.

Le dí un mordisco al dulce, comprobando que sabía muy bien. Sonreí a la niña, levanté mi pulgar y con varios asentimientos le indiqué que me habían gustado.

-¿Las hiciste tú?- preguntó nuevamente él. Recibiendo un sonido de afirmación.

Pasé mi dedo índice por la bola de arroz, tomando un poco del polvo que llevaba encima.

-Es chocolate. Hace que todo sepa mejor.- Explicó la menor al observar mi acción curiosa. Estaba de acuerdo con ella.

-¿Rika?- Se oyó al fondo del bar, como su mamá la llamaba.

Decidida a irse, en un movimiento rápido, chocó con un joven de cabello largo y rubio, traje morado y una muy mala cara.

El sonido de una bandeja cayendo me hizo voltear a ver la situación, pero lo que me hizo fruncir el seño fue el regaño de ese idiota hacia Rika.

-Eres una mocosa estúpida. ¿Qué haces?- exclamó el rubio, pisando con autoridad una de las bolas de arroz que cayeron al suelo.

Rika intentó disculparse con él, como se lo pidió su madre, pero solo recibió una burla de parte del mayor.

Tuve la intención de entrometerme, aunque no podía insultar a ese maleducado de las mil formas que quería. Por eso, Zoro se me adelantó.

-Tiraste mi comida.- enfrentó al de traje. Se agachó y tomó del suelo un trozo de la bola de arroz que había sido aplastada.-Tienes razón, Gina. Está delicioso.- dijo para animar a la pequeña.

Levantó la bandeja con la bola de arroz que quedaba. -Ahora come tú. Y discúlpate con la niña.- ordenó de forma sería.

-¿Sabés quién soy?- Entre risas preguntó el rubio con la intención de burlarse de Zoro.

Aunque la única respuesta que recibió fue un insulto. -Un marino de mierda con un corte ridículo.-

Cuando ví que el marino sacó su espada, supe que la situación se iba poner intensa.

Con mi mano derecha, acerqué a Rika hacia mí, para indicarle con señas que debería irse detrás de la barra.

Sabía que Zoro tenía todo bajo control, por ende, seguía sentada en el mismo lugar cerca de esos dos y con mi bola de arroz en la mano izquierda. Después de todo, con el alboroto no pude seguir disfrutando de ella.

-Yo no haría eso.- advirtió el cazador, con la intención de voltearse y volver a mi lado.

Cuando escuchó la burla del otro. -¡Ay, por favor! Tipo rudo. ¿Tres espadas? Yo solo necesito una.-

Rodé mis ojos y continué comiendo tranquilamente. Ese tonto no sabía dónde se estaba metiendo.

-Bien, pero va a doler.- el aviso de Zoro dió inicio a la pelea.

Era claro que el cazador llevaba la ventaja, dejando en ridículo al marino. Por ende, los demás marinos que se encontraban en el bar decidieron intervenir, sin ser un gran problema para Zoro.

Pude ver cómo uno de ellos planeaba atacarle por la espalda. Considero que eso es de cobarde.

Bebí lo que quedaba que mi jugo rápidamente y lancé el vaso hacia él, dejandolo inconsciente y esperando que mi acto haya pasado desapercibido.

Con todos los hombres de la marina fuera de combate, Zoro acorraló al rubio sobre la barra.

-¡No me mates por favor! Mi papá te dará todo lo que pidas.-suplicó con miedo.

-¿Quién es tu papá?- cuestionó el peliverde. Al enterarse que se trataba del capitán de esa base, finalizó la conversación-Entonces me debe dinero-.

Observé como mi compañero se disponía a irse con los marinos llevando en su mano el cuerpo del barroco.-Nos encontramos más tarde.-dijo en mi dirección.

Solté un suspiro de aburrimiento. Ya que no queremos que me relacionen al negocio del cazador, o bueno, Zoro no lo quiere.

Es sabido que ser cazarrecompensas te pone en la mira de la misma forma que lo está la cabeza de cada pirata. Por eso, soy de apoyo "entre las sombras".Ataco a distancia con mi arco y evito en medida de lo posible el combate cuerpo a cuerpo.

Es eso, o recibir alguna herida que tardará más de lo normal en cicatrizar. Si es pequeña tardará un día en dejar de sangrar, si es grande, tal vez me desangre y muera.

Cosas de ser portadora de una fruta del diablo. Más específicamente, de mi fruta del diablo.

Aunque ese es un tema que no me gusta tocar.

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Hola!
Creí que nadie leería esto, pero llegar casi a 10 vistas, para mí ya es un montón.
Gracias por interesarte en mi historia.
Por ahora estamos en la presentación de la personalidad de Gina y su trato con Zoro. Aunque aún es la punta del iceberg, será genial escribir las interacciones con los demás compañeros.
Haceme saber que estás acá con un voto y comentario, te lo agradecería mucho.
Que tengas buenos días, tarde o noches. (⁠ ⁠◜⁠‿⁠◝⁠ ⁠)⁠♡