Park Hoseok tiene un secreto. Le gusta un poco de dolor con su placer, y anhela la libertad que sólo puede encontrar en la dominación de otro hombre. Pero ese secreto la ha costado, y ahora, ya no se atreve a satisfacer su verdadera necesidad.
Una...
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Cuando Hoseok solo lo miró, Taehyung decidió que era mejor Hoseok. Él ya estaba medio desnudo después de lo que había sucedido entre él y Hoseok en el pasillo. Soltando la mano de Hoseok, abandonó la cama y terminó de quitarse la ropa. Los ojos de Hoseok se iluminaron con interés, lo que previsiblemente hizo que la polla de Taehyung reaccionara a su vez, a la altura de las circunstancias.
Hoseok se humedeció los labios y Taehyung estaba muy tentado de saltar sobre su pareja y meter su polla en la boca de Hoseok, o mejor aún en su culo. Había tantas cosas que no habían hecho en la cama, porque Hoseok no había estado listo. En cierto modo, todavía no lo estaba, y Taehyung podía esperar cuando se trataba de sexo. Pero la confianza entre ellos seguía siendo inestable, y esa era una de las razones por las que Taehyung necesitaba continuar con esto. Solo podrían tener una relación si Hoseok realmente entendiera en lo que se estaba metiendo.
Tomando una respiración profunda, Taehyung invocó su forma de lobo. A medida que el cambio fluía sobre él, el instinto de poseer a Hoseok se hizo aún más fuerte, más potente. Lo detuvo con gran dificultad, cayendo al suelo sobre cuatro patas y mirando a su amante. Desde la cama, Hoseok soltó un grito ahogado.
—Dios mío. Eso es... Mierda, esto es un sueño. Tiene que ser una especie de sueño extraño.
Con cuidado, para no asustar a su compañero, Taehyung se colocó junto a Hoseok. Puso una enorme garra en la cama, sin atreverse a saltar sobre el colchón para no asustar a su compañero. Hoseok tentativamente se acercó a él, frotando con sus dedos la pata de Taehyung. Las sensaciones que el toque de Hoseok invocaba dentro de él se sentían tan bien que, si hubiera sido un felino, Taehyung habría ronroneado.
No fue solo debido a la caricia física, aunque definitivamente contribuyó a ello. Más bien, tenía más que ver con el hecho de que, a través de ese simple gesto, Hoseok estaba mostrando su aceptación de la naturaleza de Taehyung. Su lobo quería arrastrarse sobre la cama y acariciar a su compañero, pero Taehyung se recordó severamente que ahora no era el momento para eso. Quizás más tarde.
Incluso mientras pensaba eso, los dedos de Hoseok viajaron desde su pata a su frente lupina. Taehyung sacudió una oreja, pero Hoseok no pareció sorprendido. En todo caso, parecía fascinado por la cercanía de Taehyung.
En respuesta, Taehyung lamió la mano de su compañero y movió su cola. Probablemente parecía ridículo, pero no pudo evitarlo. Al final, Hoseok había reaccionado mucho mejor de lo que podía, lo que probablemente era porque ya sabía que Taehyung no era humano.
Una comprobación más en la lista de cosas difíciles de hacer. Taehyung deseó haber podido permanecer en su forma de lobo por más tiempo, tal vez lograr que Hoseok se acostumbrara a su bestia, pero aún así tenían que hablar de muchas cosas. Dio un paso atrás y cambió a su forma humana.
