La Socia de Papá - Satzu

Chapter 4

Sana

Llegué a la oficina y como lo esperaba ella volvió a ser la misma. No solo estaba igual de irritante, si no que estaba especialmente estresada por el trabajo y además bastante tensionada.

Pasó una semana siendo una completa idiota, ya estaba empezando a cansarme de ella, pero tenía un objetivo claro y no iba a parar hasta conseguirlo. Así que me las arreglaba y ponía una sonrisa en mi cara antes de llegar.

En la mañana me levanté y me vestí con una falda negra y una blusa roja. Mis tacones rojos combinaban y amarre la mitad de mi cabello con un pequeño broche.

Al llegar a la oficina pude ver a mi papá, así que caminé a él.

"¿Por qué saliste antes hoy?" Le pregunté.

Papá me tomó del brazo y me acercó a él hasta que pudo dejar un beso en lo alto de mi cabeza.

"Lo lamento mi vida" se disculpó "estamos con muchísimo trabajo y tuve que venir a hacer unas cosas, ¿Tuviste problemas para llegar aqui?"

"Nop" le di un beso en la frente "Pagué un taxi, me voy a trabajar, nos vemos al rato".

"Vale" me sonrió.

Me alejé de el hacía la puerta de Tzuyu, pero antes de entrar le hice la pregunta habitual.

"¿Qué tal está hoy?"

"Jodida, pero no tanto"

Solté un suspiro de alivio y toqué la puerta, llevaba varios minutos de retraso y al hablar con papá me retrasé más, así que al pensar en eso creí que Tzuyu se podría poner de mal humor así que me puse un tanto nerviosa.

"Pase" me indicó

Entré y la vi sentada detrás de su escritorio. Llevaba un traje negro y una corbata roja sin amarrar. Tenía una postura relajada y un cigarro en los labios.

Parecía estar tomando un pequeño descanso y no estar tan tensa como en el transcurso de la semana.

Así que papá tenía razón

Tzuyu me dedico una mirada de arriba a abajo. Su expresión era indiferente, pero no tan tensa.

"Perdón por el retraso, el tráfico estaba  increíble" me justifiqué, "Y después fui a ver a papá"

"Cállate Sana" murmuró, "Siéntate" me ordenó señalando la silla con el cigarro.

Me relajé y me senté. Doble una pierna encima de la otra y busque con los ojos el computador.

"¿Dónde está el..."

"Cierto" recordó abriendo la gaveta del escritorio, "él técnico la estaba revisando"

Ella me la dió y al abrirla me dió 5 minutos antes de empezar a soltar órdenes.

"Lee Hajun, llámalo para que esté aquí el viernes por la noche. Agenda un viaje a Los Ángeles para fin de mes. Revisa mi bandeja de entrada y la de tu padre, todos los jodidos días hay mil correos nuevos. Los de mantenimiento tienen que estar aquí a las 5 para arreglar el circuito de la segunda sala de juntas" le dió una calada al cigarro y sus ojos brillaron increíblemente, "Y hoy quiero café con leche" me guiñó un ojo.

Al terminar mis ojos buscaron los suyos y por  alguna razón éstos  de repente estaban más transparentes, como si hubiera quitado suavemente su carcasa y dejará que sus ojos me recorrieran indiscretamente. Tan indiscretamente que me puso de los nervios. Sus ojos se resbalan como mantequilla por mi mandíbula, luego mi cabello y mis hombros.

Tuve que reacomodarme en mi asiento, cuando lo hice también me concentré en mis apuntes y fruncí el ceño.

"Perdón" solté con nervios, "El viaje a Los Ángeles, ¿Para fin de mes? Papá me dijo que para esas fechas irian a Nueva York, ambos"