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Bien, ahora Mingi estaba montado en un auto moderno, que de hecho se manejaba solo, y Yunho iba bien feliz en el asiento del copiloto, murmurando que su "bebé" lo estaba haciendo muy bien y que él era un maestro de la mecatrónica y la ingeniería automotriz (?), ¿Qué? Por "bebé" el escritor se refería al auto que se manejaba solo y que... sacaba alas de ángel y empezaba a volar para salir de los embotellamientos. Ok.

—Tengo muchas preguntas pero no haré ninguna porque hablas demasiado —Mingi suspiró y miró por la ventana para luego regresar su mirada a cualquier punto que no fuese la ciudad debajo de ellos. Tenía miedo.

—Puedes hacer cualquier pregunta, corazón, con gusto te responderé —Yunho lo miró con una sonrisa, luego abrió mucho sus ojos como si recordara algo—. ¡Ah! Los anuncios de parejas en el área de trabajo suelen ser dramáticos, así que debes llevarme de la mano y besarme frente a todos para simbolizar nuestra unión, luego decir: "Les presento a mi omega, Jeong Yunho", luego debes contar cómo nos conocimos y finalizar con otro beso, y también una amenaza a los otros alfas y betas: "Lo miran y los mato". Fin.

—¿¡Uh!? ¿Y toda esa mierda para qué?

—Este es un mundo muy competitivo. Y soy el omega más bonito, así que todos quieren tenerme.

—Mamague... ¿en qué coño tú me metiste? Dios mío —Mingi golpeó su cabeza en el volante y el auto dio una vuelta en el cielo para luego seguir manejándose con normalidad— ¡Ah, nos vamos a morir!

—No te preocupes, es imposible que los protagonistas mueran en este fanfic —Yunho le restó importancia—. Si por desgracia nos hubiésemos transportado al fanfic que escribí en el que estamos en un mundo apocalíptico, pues de una forma u otra yo hubiese muerto ya que en el último capítulo de ese fanfic, muero y tú te suicidas por eso —soltó una risa—. Pero qué suerte que estemos en este mundo, jaja.

Mingi lo miró, asqueado.

—Niño, ¿qué te inspira a escribir historias raras sobre mí?

—De hecho, soy mayor que tú por algunos meses.

—Ajá, pero "en este mundo" te llevo como diez años... eres un niño comparado conmigo —Yunho alzó las cejas, sorprendido de que Mingi ahora estuviese usando SU historia en su contra. Mingi aprendía rápido las técnicas, eh—. Solo dime... ¿por qué? ¿Qué hice?

—La primera razón es porque estás bueno, la segunda razón es porque eres... no sé, simplemente te vi y dije: "necesito shippearme con este tipo". Ya, eso es... Oh, ya llegamos —el auto se estacionó en el techo del edificio. Un edificio muy lujoso por cierto—. Tu oficina está en el último piso, o sea, debajo de este estacionamiento. Vamos.

Mingi salió del auto y de inmediato, Yunho se colgó de su brazo. Bajaron a la oficina por un elevador de cristal y ya en la oficina, escucharon gritos, les cayó confeti encima y había muchos empleados allí, todos con un uniforme raro... Una camisa blanca, pantalones jean y orejitas de gato. ¿Qué diablos pasaba en Song Enterprises?

—¡Por fin regresó, jefe!

—¡Lo extrañamos, señor!

—Bienvenido, patrón.

—¿Quién es ese lindo omega?

Luego del último comentario, todas las miradas se posaron en Yunho, quien se escondió detrás de Mingi, fingiendo timidez. Ese idiota. ¿Ahora era un niño callado y tranquilo? Por favor. Pero Mingi, en lo más profundo de su ser, sintió la extraña necesidad de protegerlo. Se aclaró la garganta y miró a todos, fijándose en Seulgi quien, al verlo, hizo una reverencia y sonrió.

—Por fin nos vemos de nuevo, señor. Hizo mucha falta en la reunión de ayer.

—Solo falté un día, no hay necesidad de hacer un escándalo —wow, ¿en serio Mingi había dicho eso? Nunca antes se había sentido tan profesional—. Eh... Seulgi, trae el informe —ordenó. Se supone que era el jefe, el CEO o no sabía qué diablo, pero Yunho le había dicho que debía trabajar, así que por mientras, imitaría a la gente de posiciones altas y poderosas de las películas y series de baja calidad que tanto le gustaban.

—¿Qué informe?

—El de la reunión de ayer... ?

—Nunca hago informes —la mujer con orejitas de gatos frunció el ceño—, ¿se pegó en la cabeza?

—Yo... —Mingi miró a todos los presentes, que retrocedían viéndolo con duda. Su aroma a chocolate se volvió temeroso (si eso tiene sentido)— ¿broma? —sonrió nervioso, y de la nada todos los empleados empezaron a reír y le tiraron confeti de nuevo.

—¡Ah, tan carismático como siempre! —dijo un empleado, que en su camisa tenía una placa con su nombre: "Hyunsuk"— Bueno, patrón, ¿no nos dirá quién es ese jovencito?

Yunho tocó la espalda de Mingi, como incitándolo... no, obligándolo a hablar.

—Hmm, él... ah, él... es... ¡un loco que me encontré en el bosque, desnudo, merodeando mi casa antes de anoche! ¡Dice que es mi omega y eso es mentira, yo no tengo omegas! ¿No se supone que odio a los omegas? ¿No? Bueno... eh, ¡sálvenme de él, por favor! —al dejar de chillar... digo, llorar... sí, eso, Mingi miró, con expectativa, a los demás. Sin embargo, sus empleados simplemente empezaron a reír, otra vez. ¿Por qué?— No estoy bromeando... por favor... ayuda —susurró.

—Oh, señor, ¿no era ese el niño que vi ayer en la llamada?

—El que "vimos" en la llamada —salió otro tipo con orejitas de gato, éste en su placa tenía: "Youngkyun".

—Sí, ese mismo —Seulgi respondió—. Entonces, ¿quién realmente es?

—Ya les dije... —las lágrimas de Mingi eran genuinas.

—Yo... yo —Yunho susurró, escuchándose asustado. Mingi se dio la vuelta para verlo y su corazón se estrujó, Yunho lo veía con ojos suplicantes.

—Él es... mi omega —dijo por fin, sintiendo su garganta arder al soltar esas palabras. Mingi odiaba todo, hasta odiaba haberse convertido en streamer. Si él se hubiese llevado de su mejor amigo, ahora mismo sería un stripper, probablemente sería millonario y Yunho no sabría de su existencia. Pero no. Tuvo que ser un friki de mierda. Convertirse en streamer resultó ser la peor decisión que ha tomado en su vida—. Se llama Jeong Yunho... nos conocimos por... ¿internet?

—¡Un amor por internet, sorprendente! —dijo el Hyunsuk— ¿Cuánto llevan conociéndose?

—Dos dí-

—Dos años —interrumpió Yunho, aparentemente dejando su timidez y poniéndose al frente.

"Dos años llevas tú conociéndome a mí, idiota" pensó Mingi pero solo asintió.

—¡Señor! ¿Cómo pudo ocultar eso? —Seulgi preguntó haciendo un puchero.

—Simplemente estaba esperando hacerlo oficial —ni sabe por qué dijo eso, pero bueno, se sintió "como todo un alfa" (pendejo)—. Pero... ¿por qué tienen todos orejitas de gato?

—Porque este es nuestro uniforme usual —dijo otro empleado con obviedad. "Sungjae" decía su placa.

—Ugh... —Mingi miró a Yunho, y el muy descarado solo se encogió de hombros con una inocente sonrisa.

—Se ven tiernos, ¿no?

—No —Mingi contestó de inmediato.

El Streamer [Yungi - ATEEZ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora