✨To a Billion stars [Miguel O'hara]✨

Capitulo VIII. Tardes de estudio.

Tiene rato ya desde que gabriella fue a la escuela y no tuve más remedio que quedarme en casa vigilando a... ¿Su madre?

No.

Ella no es su madre. Gabriella lo descubrirá un día y la repudiará por ello.

Mi hija solo me necesita a mí, pero me vi obligado a tomar esta absurda decisión de tener una madre sustituta.

No puedo dejarla sóla cuando vaya a misiones multidimencionales o a la spidey-society.

Si la dejo con los otros Spideys, sé que no la cuidaran bien.

Si la dejo con Jess, Peter B, u otro de mis ayudantes, existe el riesgo de que se rompa el canon de sus universos y éso solo supondrá un peligro a la larga.

Cabe mencionar que yo no suelo ponerle tanta atención. Necesito liderar allá.

-¿Entonces éste es tu plan, O'hara? -preguntó la anomalía - ¿Encerrarme en una jaula láser hasta que Gabriella regrese?

-Sí, así es -respondí sin darle tanta importancia.

-Me pregunto qué pensará su hija si se llegara a enterar que su padre tiene encerrada a su madre en una celda.

-No eres su madre.

-Usted dijo lo contrario.

-No está en discusión.

-¡Entonces déjeme ir! -Recargandose en la celda- Encontré a Gabriella, hablé con ella sobre lo que hizo ¿Qué más quiere de mí?

-No se trata de lo que yo quiera.

Logré escuchar como unos pequeños pasitos se acercaban al lugar, es Gabriella.

Desactive la celda provocando que la anomalía callera al suelo.

-Vaya, gracias por sacarme de ahí -mientras se levanta sacude su ropa- la próxima vez, ¿Podría intentar un método menos impactante? Sentí que mi dignidad se desactivó antes que la celda.

Sonreí.

Me incliné y la tomé del mentón obligándola a mirarme a los ojos.

-No está en discusión.

-Estaba mejor ahí dentro...

Frunci el ceño y antes de poder responderle, Gabriella entró.

-¡Mamiii! -Y corrió a abrazarla.

La joven sólo se limitó a corresponder el abrazo.

-Ah, hola papi -me abrazó, correspondi.

-Hola Princesa ¿Qué tal te fue en la escuela?

-Fue genial. Hoy en la escuela aprendimos cosas súper interesantes sobre el cuerpo humano.

-¿Ah si? Cuéntame, ¿Qué aprendiste?

-La maestra nos mostró un dibujo del cuerpo humano con muchas partes. Hay cosas como el corazón que late fuerte y rápido, y los pulmones que nos ayudan a respirar -Respondió emocionada-. También hablamos sobre los huesos. Tuvimos que tocar nuestras costillas y la maestra nos dijo que son como una armadura protectora para el corazón y los pulmones.

Escuché un rugido proveniente de su estómago, colocó sus manos en él riendo un poco.

-Parece que alguien tiene hambre. ¿Qué te parece si continúas contándome mientras preparo algo delicioso para la pequeña científica?

Gabriella me miró sorprendida.

-¿En serio, papi? -asentí- ¡Genial! Ven mami -tomó a la anomalía de la mano- ¡Ya se! ¿Y si preparas unas galletas después de comer, mami?