Promesas [LISKOOK] ✔️

03

— ¡Jefe Jeon! —entro un muchacho muy agitado a la oficina de Jungkook.

— Más te vale que sea algo muy importante para entrar sin tocar, idiota —habló Jungkook revisando unos documentos.

— Su omega fue al pueblo a comprar una prueba de embarazo —informó ganándose la atención del otro hombre— Hace unos veinte minutos.

Jungkook había contratado personas para que vigilarán a su omega. Si Lisa salía, se lo tenían que informar, pero para estar seguro necesitaba saber absolutamente todo lo que hiciera su omega cuando no estaba con él, así que los empleados se lo tenían que informar por mensajes.

Cuando escuchó eso, dejo caer los papeles al suelo y miro a su empleado.

— ¿Estas seguro de lo que dices? ¿Cómo lo sabes? —cuestiona levantándose de su silla y caminando hasta donde el hombre estaba parado.

— Manobal entro a una farmacia... Cuando salió inmediatamente le pregunté a la señora lo que su omega compro y ella dijo que una prueba de embarazo —hablo con una voz temblorosa al ver la mirada de su jefe.

— ¡Largate! —gritó furioso.

El muchacho salió de ahí casi corriendo. No quería tener problemas en su trabajo y Jungkook molestos significaba problemas.

El alfa jalo su cabello con furia, después tomo su celular rápidamente. Esa maldita prueba tenía que salir negativa, no quería otro hijo. Al menos no con una persona analfebeta.

Alfa 🤍:

— Quiero que vengas inmediatamente a mi oficina, no me importa donde estes. ¡Te quiero aquí, rápido!.

Enviado 2:09 PM

Lisa escucho el audio que le había enviado su pareja y sintió un escalofrío recorrer su cuerpo.

¿Hice algo mal? ¿Qué hice para que esté tan molesto está vez? esas y más preguntás cruzaron por su mente al escuchar el audio.

Salió del mercado del pueblo para ir casi corriendo a la oficina de su predestinado.

Una vez entro a la gran casa que tenía Jungkook en el pueblo para atender asuntos de su hacienda y otras cosas, todos se le quedaron viendo, algunas miradas eran de lastima otras solo eran de burla. Todos ellos se burlaban de ella cuando Jungkook no estaba presente, pero cuando estaba la trataban como una mujer importante.

Hipócritas.

Camino hasta la oficina de su alfa y con su mano temblorosa golpeó delicadamente la gran puerta de marmol sintiendo los nervios correr por todo su cuerpo. Jungkook en ocasiones le daba miedo.

Desde afuera se podía oler el fuerte aroma de café. Eso hizo que sus ojos se llenaran de lágrimas con anticipación.

— ¡Que esperas para entrar Lalisa! —se escuchó del otro lado de la puerta.

La pelinegra entro a pasos lentos y con mucho miedo a la oficina. Ahí estaba su alfa, sentado mientras tomaba tequila y la miraba detenidamente.

— ¿Es cierto que compraste una prueba de embarazo? —cuestiona con su ceño fruncido.

— Yo... ¿Q-Quien te dijo eso? —trato de evadir la pregunta con nerviosismo.

— Manobal, compraste una prueba de embarazo ¿Si o no? —hablo con voz dura y aventando un portaretrato cerca de donde estaba Lisa parada haciendo soltar un pequeño sollozo.

— Sí...—su vista estaba fija en sus zapatos y sus manos hechas puños, tratando de controlar su llanto— Está en el bolsillo de mi ves...

Jungkook suspiró y se acercó a Lisa furioso sin dejar que terminara de hablar. La tomó muy fuerte del antebrazo y la jalo hasta llegar al baño haciéndola llorar más fuerte. Aventó a la omega al suelo del sanitario lastimando su tobillo y la encerró ahí.

— ¡Hazte la maldita prueba ahora! —grito.

— P-Pero Jungkook... l-a-

— ¡Cállate antes de que entre y hazte la puta prueba antes de que entre y lo lamentes! —Lisa temblorosa agarro la prueba y trato de callar sus sollozos mientras olía el olor a café de su alfa volverse más fuerte y amargo.

(...)

Quince minutos después ya tenía el resultado.

Negativo.

— Kookie... Abre la puerta —pidió limpiando sus lágrimas.

La puerta fue abierta dejando ver a Jungkook ahí parado con una expresión dura.

— Dame esa cosa, rápido —extendió su mano para recibir la prueba.

Lisa le dió la prueba y el sonrió viendo el resultado.

— Que alivio amor, ven —dijo para abrazar a su omega cariñosamente— No quiero un hijo, Lili... Al menos no ahora.

Lisa solto sus lágrimas y se aferró al cuerpo de Jungkook. Sj cuerpo aún temblaba por el miedo pero no podía evitar sentirse protegida por su agresor.

— La prueba no era para mí —dijo entre sollozos callados, Jungkook se alejo confundido de Lisa.
— ¿Qué? ¿Cómo qué no era para ti?
—cuestiono.

— Era para la beta Lee, la que me cuida cuando se lo pides —limpio sus lágrimas.

Malditos buenos para nada, voy a correr a ese idiota. Por su culpa trate mal a mi Omega. Pensó Jungkook enojado, tratando de calmarse.

Ayudo a Lisa a limpiar sus lágrimas delicadamente y la abrazo.

— Perdóname por tratarte así. Ya sabes como son de chismosos y pensé que tú estabas en cinta —murmura oliendo el cabello de la pelinegra. Su olor favorito: Fresas.

— No te preocupes... Ya se cómo es la gente, ellos me odian —sonríe cálidamente— No es tu culpa Kookie.

Pero en el fondo, ella sabía que no merecía esos tratos.