❝Lennox Dolatte era un amargo con gusto por el dinero y asco por los dulces y chocolates.
Willy Wonka quedó maravillado con el negocio de Lennox. Incluso con lo amargo de sus dulces y chocolates, le pidió ayuda.
¿Que sería de dos hombres los cuale...
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❝come with me, and you'll be in a world of pure imagination❞
chapter sixteen.
recordatorio de comentar por el último capítulo de bitter sinful. <3
Lennox estaba junto a Wonka, con la mirada fija en la ventana donde estaba atrapado Noodle. Su corazón latía con fuerza en su pecho, sintiendo la escalera balanceándose.
Pero Wonka no podía soportar ver a su amada Noodle en apuros y estaba dispuesto a hacer lo que fuera necesario para liberarla.
Wonka se volvió hacia Lennox, sus ojos llenos de una mezcla de preocupación y determinación.
—Sabía que tú padre no cumpliría con su parte del trato.—dijo, con la voz llena de urgencia.
—Bueno ¿tú eres tonto?—Lennox dijo mirando hacia abajo y luego miró a Willy.—Era obvio que no lo iba a hacer.
Lennox suspiró, con la mandíbula apretada.
—Solo... saca a Noodle y así podemos hacer lo demás.—declaró, con la voz llena de resolución inquebrantable.—Necesitamos idear un plan, algo que sea más astuto que Fregoso y libere a Noodle de sus garras.
Los ojos de Wonka brillaron con picardía mientras una sonrisa traviesa se extendía por su rostro.
—Tengo una idea.—dijo, con la voz llena de emoción.
El corazón de Lennox se llenó de alivio cuando la ventana del armario se abrió, revelando el rostro sonriente de Noodle. Sintió una oleada de emoción al verla, una mezcla de amor, alivio y gratitud inundó sus sentidos.
—Willy, Lennox.—la sonrisa de Noodle se extendió mirando a ambos.—Volvieron.
—No ibamos a dejarte aquí, Noodle.—dijo Lennox, su voz llena de calidez y determinación.—No dejaremos que Slugworth te mantenga atrapada por más tiempo.
—¿Que tiene él contra mi?
—No lo sabemos con seguridad, pero estarás a salvó cuando esos chocolateros estén tras las rejas.
La sonrisa de Noodle se amplió mientras miraba a Willy y Lennox, con los ojos llenos de gratitud y afecto.
—Sabía que volverían por mí.—dijo, con la voz llena de confianza inquebrantable.
Los ojos de Willy brillaron.
—Te sacaremos de aquí, Noodle.—dijo, con la voz llena de convicción.—Ahora estás a salvo y no dejaremos que nada te haga daño.
—Tenemos que ir a la bóveda de la iglesia, así tendremos el libro mayor, comprobaremos que envenenaron tus chocolates y así podemos estar tranquilos todos.—Lennox le sonrió a Willy quién asintió y Noodle vio el intercambio entre ambos.
